Cuando se acaben los chorizos (algo que dudo), como ciudadano os agradecería comenzaseis la campaña del bache, el obstáculo y el desconchón...informando de cuantos haya en aceras y calzada (incluidos las docenas y docenas de carteles anunciadores sujetos a árboles, farolas y señales de tráfico)...eso genera publicidad positiva y sirve al propósito.
Las plazas rotas de Ruíz Gallardón
"¿Vosotros que estáis haciendo fotos no seréis del Ayuntamiento? Porque acaba de caerse una señora de morros contra el suelo. De rodillas se ha quedado la abuelita". La escena la contaba este miércoles por la mañana una bilbaína de paso por la capital, pero cualquiera que hubiese parado un rato en la plaza de Callao obtendría material de sobra para grabar un vídeo con risas enlatadas.
Hasta los policías municipales advertían a los viandantes: "Tenga cuidado no se le vaya a volcar el carrito", le decían a una mujer con sus bebés. La nueva plaza, cuya remodelación costó cinco millones de euros, acaba de cumplir un año.
Desde hace días, varios tramos de la recién inaugurada plaza de Callao, con más de 10.000 metros cuadrados de granito,
están destrozados. Las pesadas baldosas de piedra se han partido y levantado provocando caídas y tropiezos entre los viandantes."Callao no está tan mal", minimiza el director general de Vías y Espacios Públicos, Pablo Usán, que asegura que una brigada especial reparará lo desperfectos, más de una semana después, "enseguida".
El hundimiento de varios tramos de la plaza no no es achacable a los materiales, según Usán, sino a la cantidad de grúas y camiones de gran tonelaje que pululan por un espacio que, a pesar de estar diseñado para el tránsito peatonal, se ha convertido en un gran escaparate para las marcas.
"Fundamentalmente han sido las grúas de elevación de los eventos comerciales las que han dañado el pavimento", explica Usán que asegura que en la plaza se limitó el tonelaje de los vehículos.
"Controlar que se permita, o no, el paso de vehículo pesados, ya no es nuestra función si no de la policía municipal", añade el director general que confirma que los gastos de reparación corren a cuenta de los madrileños. "El contrato de obra nueva tiene un periodo de garantía, pero en este caso en el que se ha roto por causas ajenas a la constructora, será el servicio muncipal el que lo arregle".
Tampoco la plaza de Santa Bárbara, donde a la carga y descarga habitual se le ha unido el constante ir y venir de camiones y hormigoneras que acuden a la rehabilitación de uno de sus edificios, aparenta un año de vida ni los cuatro millones de euros que costó. Varias baldosas están comidas por las grietas, el material de los alcorques luce cada día más deshecho y las tarimas de madera que se instalaron ya han comenzado a partirse.
El paisaje de grietas, hundimientos y baldosas reventadas se repite, además de en toda la ciudad, en casi todas las zonas que se han peatonalizado en los últimos años.
La imagen no es tan chocante como la de Callao, pero sigue llamando la atención que zonas tan nuevas aparezcan tan castigadas. La calle del Arenal o la de Montera, remodeladas entre 2006 y 2008, en las que se inviertieron unos tres millones de euros, están siempre en rehabilitación.
"Son zonas que hay que estar remodelando constantemente por su actividad comercial y siendo las losas de piedra no se puede evitar que se rompan o se levanten", justifica Ausán que no contempla la utilización de otros materiales ni tampoco, de momento, la limitación del tránsito. "El problema no es tanto el paso de vehículos sino las cargas fuertes y muy localizadas", asegura Ausán que concluye: "Es lo que tienen los pavimentos discontinuos que se estropean constantemente".
...si antes lo digo.