Un centro pionero para tratar las adicciones a las nuevas tecnologías en Madrid: hasta el 3% de la población puede estar enganchada al móvil
MARTA BELVER
Madrid
Actualizado Miércoles, 27 julio 2022 - 00:08
La unidad inaugurada en el Hospital Gregorio Marañón dará atención integral a los dependientes del juego, el sexo o las compras compulsivas
¿Cuánto tiempo pueden pasar sus hijos sin mirar Twitter o consultar las redes sociales? ¿Y usted mismo? Si la respuesta a esta pregunta le parece preocupante no descarte que pueda estar ante un caso de dependencia de las nuevas tecnologías que a partir de ahora se va a poder abordar en una unidad específica creada por la Comunidad de Madrid en el Hospital Gregorio Marañón para su tratamiento.
En este Centro Integral de Prevención e Investigación en Adicciones Comportamentales, un recurso público «pionero» en España según la Consejería de Sanidad, se va a atender también a personas enganchadas al juego, al sexo, a las compras compulsivas y a otras conductas que no llevan aparejadas el consumo de sustancia. Aunque se trata de una patología considerada «emergente» y aún sin datos de prevalencia definidos, se calcula que entre un 2% y un 3% de la población podría sufrirla.
«No es infrecuente que cuando un joven que está realmente enganchada a las redes sociales o a los videojuegos y se le retira el medio por el cual accede la reacción sea de un profundo malestar, a veces también con reacciones hostiles hacia el entorno», explica el doctor Francisco Ferre, jefe de Psiquiatría del Gregorio Marañón. Detrás de actitudes como ésta, añade, «hay habitualmente un trastorno mental subyacente».
Para poder tratarlo adecuadamente, una de las ventajas que ofrece este centro es que los usuarios pueden entrar en la página web de AdCom Madrid y autocitarse directamente sin necesidad de tener que acudir antes a su médico de cabecera, ya que se considera un posible elemento disuasorio. Posteriormente se les someterá a un proceso de cribado y se les distribuirá en tres grupos: alta sospecha de no adicción; uso problemático con posible riesgo, lo que incluirá psicoeducación y orientación; y necesidad de intervención mediante un tratamiento específico a medida del paciente.
Esta medida se incluye en el Plan de Salud Mental y Adicciones 2022-2024, con una inversión prevista de 45 millones de euros. La plantilla la compondrá un psiquiatra de adultos, otro de niños y adolescentes, un psicólogo experto en adicciones, una enfermera especializada en este tipo de trastornos y un trabajador social y la estimación es que se pueda atender a 100 personas a la semana.
«Este centro refleja nuestro compromiso como Gobierno con la salud mental desde hace años y en especial tras el Covid-19», subrayó este martes el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, durante su presentación. «Es un paso determinante para afrontar un problema preocupante que afecta sobre todo a los más jóvenes y que se ha extendido y agravado durante la pandemia», añadió.
Aunque este recurso se diseñó durante el mandato de Cristina Cifuentes e incluso se anunció su apertura en enero 2018 ha sido cuatro años y medio más tarde de lo previsto con el Ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso cuando se ha inaugurado.
