Un hombre ciego entra en un bar de lesbianas por equivocación.
Se las apa?a para llegar hasta la barra y pide una copa, y tras estar un rato sentado en la taburete le grita al camarero:
Eh, tu, te gustaría oír un buen chiste de rubias?
Inmediatamente se hace un silencio total en el bar y con una grave, profunda y áspera voz, la mujer que esta sentada junto a el le dice:
Antes de que cuente ese chiste, se?or, y en atención a su minusvalía física que le impide ver, creo que lo justo es que le advierta de cinco cosillas:
Que la camarera es rubia.
Que el portero del bar es una mujer rubia.
Que yo mido un metro ochenta, peso 80 kilos, soy cinturón negro de karate y tengo el pelo rubio.
Que la mujer que esta conmigo es levantadora de pesas y es rubia;
Y que la dama que esta sentada al otro lado de usted es una luchadora profesional y también es rubia.
Y ahora que sabe eso, piénselo cuidadosamente: De verdad todavía quiere contar ese
chiste?
El ciego piensa durante un par de segundos, menea la cabeza y contesta:
Naaa... Pues no lo cuento...Paso de tener que explicarlo cinco veces!.
El Indio Virgen
Llega un joven indio a un burdel, toca a la puerta y le abre la Madame.
Al ver su vestimenta le dice:
"?Qué se te ofrece?"
A lo que de inmediato contesta el indio:
"?Indio querer mujer!"
La Madame le contesta:
"Tienes experiencia?"
"Pues. no..." - responde el joven indio.
"Entonces vete allá, a la sierra donde vives, acércate al tronco de un árbol que tenga un agujero... practicas allá durante un mes y luego vuelves. ?De acuerdo?" - le dice la Madame.
El indio se va. Practica durante todo un mes con un árbol y regresa con una tabla muy gruesa debajo del brazo.
Toca a la puerta del prostíbulo y nuevamente le abre la Madame.
-"Indio querer mujer. Ya tener experiencia!"
La Madame le hace entrar y llama a Romualda para que le atienda.
Romualda y el indio suben al cuarto, ella se desviste y se tumba en la cama preparada para el tema.
De repente el indio le da tremendo tablazo en las nalgas.
Romualda, muy enojada, y sobándose su culo, le dice al indio:
"Pero, qué te pasa?, Indio hijo de puta! ?Por qué me pegaste con esa tabla?"
El indio muy serio, parado a la orilla de la cama, le contesta:
"Indio querer asegurarse de que tú no tener avispas en el agujero"