La jueza da a entender que la Guardia Civil "malinterpretó" su auto y la AUGC dice que los agentes hicieron "lo que se les ordenó"
En menos de 48 horas la operación policial y judicial que investiga supuestos delitos contra la propiedad intelectual en tres radios de Telde desanda sus pasos
La jueza María de los Ángeles Zabala (Foto LP/DLP)
TELDEACTUALIDAD
Telde.- En menos de 48 horas la operación policial y judicial que investiga supuestos delitos contra la propiedad intelectual desanda sus pasos. La jueza dicta un acto en el que deja entrever que la Guardia Civil pudo malinterpretar su mandato y ordena levantar el precinto de las tres radios locales. Frente a esta tesis, la Asociación Unificada de la Guardia Civil respaldó ayer al cien por cien la labor desarrollada por la Patrulla Fiscal de Guía y aseguró que hicieron lo que se les ordenó.
Según publica Canarias7, la jueza notificó el desprecinto a las tres emisoras afectadas, Canal Telde, PCL Radio y Radio Cibelio, y los agentes de la Guardia Civil, acompañados del correspondiente perito, se personaron en las sedes de las empresas para levantarles la restricción impuesta. Entre las 17.00 y las 18.00 horas de ayer tarde se ejecutó la marcha atrás, apenas dos días después de que las radios fueran precintadas en una operación que ha sido duramente censurada por «desmedida» y «exagerada» por grupos políticos y sociales de toda la Isla. No entienden que por piratear música o por no tener convenio con Agedi, la sociedad que agrupa a los productores musicales en España, se cortara la voz de tres emisoras y se detuviera a 9 personas entre locutores y técnicos.
Añade el periódico de Inforcasa que El auto viene a decir que la Guardia Civil pudo haber malinterpretado a la jueza, que es la titular del Juzgado de Instrucción y Primera Instancia número 6 de Telde, María de los Ángeles Zabala. «Se aclara que el auto de 12 de julio de 2010 en el sentido indicado, acordándose, en el caso de que se hubiera malinterpretado en el sentido no acordado por esta juzgadora, el levantamiento, si lo hubiera, de cualquier restricción que se haya producido en los aparatos de emisión», reza textualmente el documento. Frente a esta tesis, la Asociación Unificada de la Guardia Civil respaldó ayer al cien por cien la labor desarrollada por la Patrulla Fiscal de Guía y aseguró que hicieron lo que se les ordenó.
Faltan aparatos
Pasadas las 13.00 horas de ayer el juzgado contactó con los afectados, los propietarios de las emisoras, para que pasaran cuanto antes por la sede judicial a recoger la notificación del auto. Sólo fueron los de Radio Cibelio y PCL Radio y a media tarde se hizo cumplir el nuevo mandato. Pero el problema estriba ahora en que para poder volver a emitir necesitan algunos de los aparatos que les incautaron los agentes de las patrullas fiscales en la redada del lunes. Se llevaron los ordenadores donde tenían los programas y los aparatos de emisión. Hoy solicitarán su devolución.
Vuelta en horas
Tanto Radio Cibelio como PCL Radio tienen la esperanza de volver a emitir desde hoy mismo. Eduardo Luis, propietario de Cibelio, pedirá formalmente esta mañana la devolución del ordenador central para la automatización de la programación, el router, el procesador de estéreo y el compresor de señal. PCL hará lo mismo, aunque no descarta hacerse con nuevos aparatos. En Canal Telde la cosa irá más lenta. Ayer no se pudo desprecintar porque se lo tienen que notificar al Ayuntamiento, no a los trabajadores. De todas formas, y casualmente, la emisora está en obras. No tiene prisas para volver a las ondas.
La benemérita tenía indicios
Fuentes de la Guardia Civil sostienen que la Patrulla Fiscal de Santa María de Guía actúo porque existían indicios de delitos contra la propiedad intelectual. Al mismo tiempo, califican de «curioso» que la primera vez que se pone en cuestión la labor de esta Patrulla Fiscal, especialista en este tipo de delitos, sea justo cuando se interviene una radio municipal. Las mismas fuentes confirman que había material pirata en las instalaciones. Copias de música sin autorización, descargas ilegales y software sin licencia en los ordenadores. De ahí que el material incautado siga en manos de la Guardia Civil a pesar del desprecintado ordenado por la jueza.
La magistrada matizó ayer su auto inicial por si indujo a malinterpretación. La ley no permite variar resoluciones firmadas, pero da la posibilidad de rectificar «errores materiales manifiestos o aritméticos». Debe ser este uno de los casos, porque la jueza aclara en su auto de ayer que cuando ordenó el precinto se refería a la emisión de contenidos que estuviesen protegidos por la propiedad intelectual, pero que no se podía «limitar de ninguna forma» la emisión de cualquier contenido.
Canariasahora.com
Sección Top Secret
Un auto para corregir otro auto
No hizo falta revolver los recursos que habían anunciado los responsables de las tres emisoras de radio salvajemente clausuradas este martes por la Guardia Civil a instancias de la juez de Instrucción María de los Ángeles Zabala, decana de los jueces de Telde. La propia magistrada, quizás alarmada por lo que de su actuación se publicó y por el escándalo provocado, dictó este mismo miércoles un escueto auto en el que trata de matizar la incuestionable metedura de pata anterior. Pero lo hace con la autoridad que le confiere ser la autoridad, es decir, dejando a la fuerza actuante, la Guardia Civil de Vecindario, con el culo expuesto a la más cruel intemperie. Alegando la capacidad que le confiere la ley para "rectificar errores materiales manifiestos o errores aritméticos que se hubieran podido cometer", la señora Zabala le da la vuelta por completo a su resolución del pasado día 12, tratando de establecer ahora que jamás ordenó ni autorizó que a las tres emisoras perjudicadas se les impidiera emitir. Analicemos el párrafo en cuestión y la rectificación de la magistrada, porque la cosa traerá mucha miga.
La instructora limita la censura al material de “ilícita procedencia”'
La ignorancia de la cuestión no excusa la burrada
Veamos qué dijo exactamente la magistrada en su auto del pasado día 12: "El objeto [de la autorización de entrada y registro] será la acreditación de los extremos de la emisión/retransmisión y difusión de las obras, así como la intervención/precinto en su caso de los soportes de las obras de audio que se estén proyectando o se presuma que hayan sido retransmitidas o que estén preparadas para ello, así como la intervención o el precinto de cuantos aparatos/soportes se estén utilizando en la comisión del delito para la emisión, retransmisión de la obra y grabaciones de audiovisual y software". Teniendo en cuenta estas limitaciones, que en realidad apenas limitaban nada, una comisión judicial (secretaria y perito), acompañada de la Guardia Civil, procedió a llevarse por delante todos los ordenadores (incluidos los de emisión) y material fonográfico de las tres emisoras teldenses víctimas de este injustificable atropello (Radio Cibelio, PCL Radio y Canal Telde, esta última de titularidad municipal). ¿Ignoraba la juez que autorizando tales precintos e intervenciones impedía el ejercicio de la actividad total de las cadenas atacadas? Y, a mayor abundamiento, ¿era eso lo que le pedía el denunciante?, porque la Guardia Civil sí que se lo pidió clarito en su oficio de 8 de julio. Insistimos, ¿actuó la señora Zabala desde la ignorancia más supina, ajena a la violación de derechos fundamentales que estaba propiciando? Dígale usted a un juez que ignora el alcance de la ley, a ver qué le responde.
Tendrán que devolver los equipos que la jueza sigue diciendo que hay que precintar
Ahora, la cuadratura del círculo
Para lo único que sirve el auto de la juez Zabala, emitido este miércoles, es para su propio y fallido intento de lavarse las manos y echar el muerto de la censura previa a la comisión judicial y a los agentes de la Guardia Civil que actuaron el lunes siguiendo sus designios. Porque en esta nueva resolución, la instructora matiza que lo que ella autorizó fue "la intervención o el precinto de soportes electrónicos, informáticos o de cualquier tipo que contengan los productos protegidos por la propiedad intelectual, e impedir que sean objeto de difusión y/o emisión, sin que ello se extienda a la emisión de cualquier otro contenido por parte de la emisora de radio objeto de las presentes diligencias, no limitando de ninguna forma la emisión o radiodifusión de cualquier otro contenido que no esté protegido por la propiedad intelectual, no siendo objeto de este procedimiento contenidos que no queden incluidos en lo anteriormente descrito y por tanto no sean de lícita procedencia". Y añade en el siguiente párrafo: "Acordándose, en caso de que se hubiera interpretado en un sentido no acordado por esta juzgadora [querrá decir instructora] al levantamiento, si lo hubiere, de cualquier restricción que se haya producido [querrá decir podido] realizar en los aparatos de emisión". Es imposible, salvo que en el juzgado hayan inventado un método revolucionario, confiscar equipos para la emisión de música distintos a los que se utilizan para el resto de la programación. Por lo tanto, o la Guardia Civil devuelve todo lo intervenido, o no habrá manera de que el auto de aclaración de la juez sirva para algo más que para salvarse ella del despropósito cometido.