Un compa?ero que escribió en otro foro.....
Acabo de pasar una mala racha, sobre todo desde que encarcelaron al compa?ero por aquella historia de no adjuntar los partes de baja; se me ha pasado de todo por la cabeza, incluso tirar la toalla y buscar otra forma de ganarme la vida. Este trabajo (como los de este gremio, pero éste por partida doble) va por rachas. Cuando estuve en la calle y, murieron los compa?eros en el control antiterrorista de la A-1 atropellados por el camión, ya comencé a plantearme si debía seguir siendo guardia civil; no porque me diera reparo el riesgo al que constantemente nos encontramos sometidos y porque, a la noche siguiente nos tocara a otros hacer el mismo control, en el mismo punto kilométrico y, a la misma hora, sino porque cuando llevaron los cuerpos al tanatorio de Colmenar Viejo (Madrid) ordenaron, darse pasadas a las patrullas de los puestos colindantes por el mismo, para hacer acto de presencia y, recuerdo que, un compa?ero mío que estaba esa noche de patrulla, tuvo que pagar las botellas de agua de su bolsillo para las familias porque a ningún alto mando se le ocurrió pensar en la situación de aquellas pobres familias. Al día siguiente, cuando fue la misa para poder trasladar posteriormente los cuerpos a cada cementerio elegido por sus respectivas familias, acudieron los generales a hacerse la foto con sus medallas al lado del presidente y del resto de las personalidades políticas y sociales, de tal manera que, unos compa?eros que lloraban a uno de los fallecidos en el accidente (los controles de carretera antiterroristas se abastecen de patrullas de diferentes Puestos) oyeron como un alto mando les dijo: ?vosotros detrás mía? para poder hacerse en primera plana la pu** foto y les tocó estar detrás del ataúd rezagados para poder llorarle a gusto. Cómo pueden? cuando estamos constantemente jugándonos el tipo desinteresadamente y estos mier*** permanecen detrás de las mesas de sus despachos calentitos, forradísimos y sin correr peligro alguno, a la espera de que hagamos alguna buena para colgarse la medalla o, alguna mala para darnos con todo lo que puedan.
A la semana siguiente de cambiar de destino tres compa?eros míos, tuvieron un tiroteo cuando acudieron a un aviso, porque había una banda organizada robando en el interior de chalés y consiguieron coger a uno de ellos, todo ello sin ningún tipo de apoyo ya que había sólo una patrulla para toda la demarcación de un Puesto Principal, qué triste. Cuando llegaron al Puesto con el detenido, que minutos antes había intentado matarles y, tras haber frustrado por completo el robo, lo primero que se le ocurrió decir al Comandante de Puesto fue: ?Cúanta munición habéis disparado? Necesito saberlo para elaborar el informe?, ni un ?qué tal estáis? o un ?buen trabajo?, como si los malos hubiesen sido ellos. Como éstas me sé unas cuantas.
Basta con un a?o en la Guardia Civil para darte cuenta de que lo único que vale de ella son los guardias, ni honor, ni patria, ni leches? Lo único que valen son los guardias, que con todo lo que tienen encima siguen luchando y amando esta forma de vida; sin decir esta boca es mía y, sin esperar nada a cambio; compa?eros que pudiendo optar a cualquier otro tipo de trabajo o cuerpo optan por éste y que se les siguen poniendo los pelos de punta cada vez que se visten el uniforme. Personas que, siendo enga?adas por este gobierno cientos de veces, siguen acudiendo a los avisos con el luminoso, a toda pastilla, olvidando que por una mala actuación pueden acabar presos o muertos, sin apoyos judiciales y, tampoco de sus jefes. Por todas estas valientes, luchadoras, sacrificadas y, para mí, especiales personas, no puedo permitirme tirar la toalla.
Mi mejor amigo (policía nacional) como no pertenece al Benemérito Instituto no consigue comprenderlo, aunque me anima un montón y, alguna que otra vez me ha soltado: ?Por qué no lo intentas para el CNP? Seguramente entrarías de cabeza?, y yo lo contesto: ?Gracias, pero yo sólo concibo una forma de ser policía y es, yendo de verde?. Nada más me queda por hacer una cosa? y es seguir luchando, por cambiar lo que tanto me gusta.
Un saludo