Una mujer y su hija detenidas al denunciar una estafa tras contratar a un sicario para robar los órganos de la víctima
LUIS F. DURÁN
Madrid
Miércoles, 26 junio 2019 - 20:10
El promotor, que simulaba trabajar en servicios de inteligencia, les prometió a los otros 60.000 por el asesinato y venta de los órganos
Un rocambolesco triángulo criminal ha dejado perplejos a los agentes de la Policía. Una mujer, su hija y el novio de ésta, un falso agente del CNI, han sido detenidos tras acordar entre los tres matar a la pareja de la madre y vender siete de sus órganos. La progenitora y su descendiente pagaron 7.000 euros al supuesto agente secreto para que contratará un sicario que ejecutase el asesinato. Y todo lo firmaron en un contrato. Fueron engañadas por el falso espía y al denunciar el caso en la comisaría de Centro acabaron arrestadas.
Según la Jefatura Superior de Policía de Madrid, el trío fue apresado el pasado 14 de junio por un presunto delito de proposición para cometer asesinato. Se trata de una mujer de 52 años, su hija de 20 y el novio de esta, de 29. Todos son españoles y no tienen antecedentes policiales, y ahora se investiga si este hombre, que les aseguró que era un alto cargo del CNI y tenía documentos falsificados con el anagrama de ese servicio de inteligencia, ha engañado a más personas.
Fue el falso agente el que propuso a las mujeres ordenar a un sicario que matase a la pareja de la madre y vendiese los órganos para conseguir así 60.000 euros, ya que la chica le contó que el actual novio de la madre les había engañado en múltiples ocasiones, consiguiendo esa misma cantidad de ellas.
Con ese negocio fraticida las mujeres recuperarían el dinero perdido, según el detenido, que les mostró documentos que supuestamente acreditaban que él era jefe de varios servicios secretos y que podría resarcirlas económicamente.
Las mujeres estuvieron de acuerdo y firmaron, el pasado mes de marzo, un contrato que reflejaba sus intenciones y que le entregarían 7.000 euros como adelanto.
Al pasar las semanas y no consumarse el asesinato, las mujeres fueron el pasado día 14 de junio a la comisaría de Centro de la Policía. Fueron detenidas al delatar que habían sido estafadas por la pareja de la hija, que además les dijo que había sido consejero de operaciones especiales de la CIA-Mossad. Poco después se localizó y detuvo al falso agente en su piso de Madrid.
El detenido y las mujeres firmaron el contrato bajo el epígrafe Resolución en vista ordinaria con el logotipo del CNI y el protocolo del Consejo de Naciones Unidas. En el escrito se indica que todo se sigue «bajo siglas, reglas y procedimiento de encriptación». Se recogen 10 puntos con los pasos a seguir para el crimen y la venta de órganos. Se habla de la búsqueda del sujeto, del interrogatorio de familias y amigos, de sustracción de identidades, descalificaciones y sumisiones y del enlace del sujeto con empresas fantasma. El punto cinco indica la donación de siete órganos para la venta en los lugares cifrados con un número: T-47/T-49.... Asimismo, el punto seis del contrato recoge que se compensaría a la mujer con la venta de esos órganos y, el siete, que en caso de negativa del sujeto a donar sus órganos voluntariamente, se le obligará de las «maneras establecidas». Por último, señala que la orden será ejecutada por un grupo de operaciones antiterroristas y que el plazo de ejecución sería entre 60 y 180 días.
En el contrato, el falso agente presume de haber obtenido 46 medallas en 352 misiones, 349 de ellas positivas. Asegura que ha abatido 1.897 objetos y capturado 524. En su falso currículum aseguraba que era teniente coronel experto en disciplinas como tiro de combate, artes milenarias y que hablaba 22 idiomas, entre ellos bengalí y hawaiano.
