Autor Tema: Democracias y dictaduras  (Leído 37797 veces)

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Re: Democracias y dictaduras
« Respuesta #300 en: 28 de Febrero de 2025, 06:55:37 am »
De Ceaușescu  a Georgescu, Rumania, país de la UE que mantiene unos peligros latentes de volver a convertirsre en una dictadura.

La Policía de Rumanía incauta decenas de armas en los registros de la investigación contra Georgescu
Historia de Europa Press • 11 h • 2 minutos de lectura


Calin Georgescu, en el centro de la imagen, tras su detención.

© Europa Press/Contacto/Cristian Cristel
MADRID 27 (EUROPA PRESS)

El alijo incluía 25 kilos de oro por valor de más de 3,3 millones de dólares, además de 43.000 euros en efectivo y otras divisas, así como 51 granadas, dos lanzagranadas, unas 30 armas, principalmente pistolas, pero también ametralladoras, 40 cargadores para armas de diversos calibres, 20 cajas de munición y explosivos.

Todo ello ha sido hallado en la casa de Horatiu Potra --mercenario y colaborador de Georgescu-- y en la de algunos de sus familiares. En total, se han realizado casi medio centenar de registros en las localidades de Sibiu, Mures, Timis, Ilfov y Cluj, según detalla la Policía en un comunicado que recoge la agencia Agerpress.

Potra ha explicado que ese dinero lo obtuvo como pago de sus diferentes trabajos como responsables de seguridad en Qatar y África durante estos años y ha esgrimido que "nadie" puede obligarle a ingresarlo en el banco. "Tengo documentos de todo el dinero que gané", ha asegurado, según recoge la cadena de televisión Digi24.

En lo que respecta a todo el arsenal encontrado en su casa, ha afirmado que asume la responsabilidad de no haber respetado el régimen de armas y municiones.

La Fiscalía interrogó este miércoles a Georgescu, que fue puesto en libertad bajo fianza e imputado formalmente de seis delitos, entre ellos uno de incitación de revertir el orden constitucional por medios violentos y otro de falsificación documental sobre la financiación de su campaña.

Georgescu se impuso en el 24 de noviembre en la primera vuelta de unas controvertidas elecciones presidenciales, que finalmente fueron suspendidas a pocos días de la segunda ronda por irregularidades en la financiación de su campaña y en medio de acusaciones de supuesta injerencia extranjera.

Esta decisión del Tribunal Constitucional fue duramente criticada hace unas semanas por el vicepresidente de Estados Unidos, JD Vance, durante su intervención en la conferencia de seguridad de Múnich.

La Fiscalía rumana sostiene que el candidato de la ultraderecha rumana --conocido por sus posiciones afines al Kremlin y euroescépticas-- es sospechoso de alentar la creación de una organización fascista y de promover el culto hacia criminales de guerra.

Las elecciones de noviembre han sido fijadas para el próximo 4 de mayo, mientras está por ver si Tribunal Constitucional avala una eventual candidatura de Georgescu.

Desconectado 47ronin

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Re: Democracias y dictaduras
« Respuesta #302 en: 28 de Junio de 2025, 08:41:14 am »

Corea del Norte ejecuta a ciudadanos por ver series surcoreanas, pero no logra frenar el cambio entre los jóvenes


Tras la pandemia se intensificó la censura, castigó con mayor severidad el acceso a contenidos extranjeros y reprimió cualquier desviación cultural

Vozpópuli
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Cultura
Publicado: 27/06/2025 ·04:45
Actualizado: 27/06/2025 · 04:45
El consumo de series surcoreanas es visto como una amenaza existencial para el régimen de Kim Jong-un, que responde con ejecuciones públicas y otros castigos extremos que no logran frenar el impacto cultural creciente del país vecino entre los jóvenes norcoreanos, según testimonios presentados por desertores este miércoles en Seúl.

Esta semana, la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OHCHR) en Seúl comenzó un foro público, de dos días, con desertores norcoreanos, que han sido víctimas y testigos de violaciones de DD.HH, para documentar los últimos diez años de abusos del régimen de Kim Jong-un. El evento forma parte de los trabajos preparatorios para un informe especial que será presentado en septiembre ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU.

Los testimonios recogidos en las sesiones, celebradas en formato presencial y remoto arrojaron luz sobre el impacto del consumo de cultura surcoreana, el recrudecimiento de la represión tras la pandemia y el endurecimiento legal con la promulgación de tres normativas clave: la Ley de Rechazo a la Ideología y Cultura Reaccionarias (2020), la Ley de Garantía de Educación Juvenil (2021) y la Ley de Protección del Lenguaje Cultural de Pionyang (2023).

Con estas medidas se intensificó la censura, castigó con mayor severidad el acceso a contenidos extranjeros y reprimió cualquier desviación cultural o lingüística, especialmente entre los jóvenes. Los desertores coincidieron en que la pandemia de COVID-19 marcó un punto de inflexión en la represión interna de Corea del Norte, al coincidir con un deterioro drástico de las condiciones de vida y la adopción de tales medidas legales para reforzar el control ideológico.



Kim Il-hyuk, un desertor que escapó por mar en 2023 junto con su esposa embarazada, relató que conoció personalmente a un joven de 22 años que fue ejecutado a tiros por compartir telenovelas y canciones pop de los 70. Kim afirmó que las ejecuciones públicas por fusilamiento se llevaban a cabo aproximadamente dos veces cada tres meses, y que en algunas ocasiones hasta una docena de personas eran ejecutadas al mismo tiempo, la mitad de ellas por infringir la ley que prohíbe ideologías y expresiones culturales consideradas reaccionarias.



Una joven desertora, que intervino de forma anónima, relató haber presenciado el arresto de una mujer embarazada y su pareja por ver telenovelas surcoreanas. "Sentía que prefería suicidarme antes que ser ejecutada. Por eso decidí escapar", dijo.



También describió que ella, como muchos jóvenes, recurren a la cultura surcoreana, incluida la música, como escape psicológico a la dura realidad en el Norte. El impacto cultural de Corea del Sur en los jóvenes norcoreanos se refleja incluso hoy en la industria del entretenimiento del Sur, con el debut de este verano de 1Verse y Be Boys, los primeros grupos de K-pop con miembros desertores del Norte. Las declaraciones de los desertores coinciden con lo descrito en el informe de derechos humanos publicado por el Ministerio de Unificación de Corea del Sur en junio de 2024, que documenta ejecuciones públicas por consumir o distribuir productos culturales del Sur, así como registros domiciliarios y controles de móviles para detectar modismos surcoreanos como 'oppa' (hermano mayor).

La opinión de los que logran adaptarse al Sur
Durante la última sesión del foro, tres jóvenes desertores que hoy ejercen como profesionales compartieron sus impresiones de la situación actual. El joven emprendedor Oh Kwang-myong, advirtió que la represión en el Norte se ha intensificado, pero tiene esperanza en que la llamada generación 'jangmadang' es más individualista y menos obediente al régimen. La generación jangmadang se refiere a los norcoreanos que crecieron tras la hambruna de los años noventa participando desde jóvenes en actividades económicas informales, comercio privado y pequeños emprendimientos, en un contexto de economía de mercado no oficial que surgió al margen del sistema estatal.

Por su parte, Kim Eun-ju, activista y directora de relaciones externas del Instituto de Investigación EUM, integrado por desertores, lamentó la decisión del Gobierno surcoreano de apagar los altavoces de propaganda en la frontera, una medida promovida por el nuevo presidente Lee Jae-myung. "Fue un error grave. La información exterior debe seguir ingresando de cualquier forma y en cualquier circunstancia", afirmó.

Aunque los panelistas reconocieron el pesimismo actual, marcado por la ruptura total del diálogo intercoreano, el acercamiento de Pionyang a Moscú y la parálisis diplomática con EE.UU., también insistieron en que el conocimiento sobre derechos humanos dentro del país ha crecido gracias a fuentes externas. "Ese cambio no vino del régimen, vino de abajo", dijo Kim Eun-ju.

Park Dae-hyun, director de la organización Woorion, una red digital de apoyo para desertores norcoreanos en Corea del Sur insistió, en un inglés fluido, en que el cambio es posible. "Siento que el túnel en el que vive Corea del Norte va a tener un final", dijo. "Lo único que queremos es que pare el sufrimiento perpetrado por un régimen basado en el miedo"


Desconectado Vikingo83

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Re: Democracias y dictaduras
« Respuesta #303 en: 30 de Junio de 2025, 15:43:21 pm »
Cosas de la izquierda... ¿qué dice Celestino?



Corea del Norte ejecuta a ciudadanos por ver series surcoreanas, pero no logra frenar el cambio entre los jóvenes


Tras la pandemia se intensificó la censura, castigó con mayor severidad el acceso a contenidos extranjeros y reprimió cualquier desviación cultural

Vozpópuli
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Cultura
Publicado: 27/06/2025 ·04:45
Actualizado: 27/06/2025 · 04:45
El consumo de series surcoreanas es visto como una amenaza existencial para el régimen de Kim Jong-un, que responde con ejecuciones públicas y otros castigos extremos que no logran frenar el impacto cultural creciente del país vecino entre los jóvenes norcoreanos, según testimonios presentados por desertores este miércoles en Seúl.

Esta semana, la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OHCHR) en Seúl comenzó un foro público, de dos días, con desertores norcoreanos, que han sido víctimas y testigos de violaciones de DD.HH, para documentar los últimos diez años de abusos del régimen de Kim Jong-un. El evento forma parte de los trabajos preparatorios para un informe especial que será presentado en septiembre ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU.

Los testimonios recogidos en las sesiones, celebradas en formato presencial y remoto arrojaron luz sobre el impacto del consumo de cultura surcoreana, el recrudecimiento de la represión tras la pandemia y el endurecimiento legal con la promulgación de tres normativas clave: la Ley de Rechazo a la Ideología y Cultura Reaccionarias (2020), la Ley de Garantía de Educación Juvenil (2021) y la Ley de Protección del Lenguaje Cultural de Pionyang (2023).

Con estas medidas se intensificó la censura, castigó con mayor severidad el acceso a contenidos extranjeros y reprimió cualquier desviación cultural o lingüística, especialmente entre los jóvenes. Los desertores coincidieron en que la pandemia de COVID-19 marcó un punto de inflexión en la represión interna de Corea del Norte, al coincidir con un deterioro drástico de las condiciones de vida y la adopción de tales medidas legales para reforzar el control ideológico.



Kim Il-hyuk, un desertor que escapó por mar en 2023 junto con su esposa embarazada, relató que conoció personalmente a un joven de 22 años que fue ejecutado a tiros por compartir telenovelas y canciones pop de los 70. Kim afirmó que las ejecuciones públicas por fusilamiento se llevaban a cabo aproximadamente dos veces cada tres meses, y que en algunas ocasiones hasta una docena de personas eran ejecutadas al mismo tiempo, la mitad de ellas por infringir la ley que prohíbe ideologías y expresiones culturales consideradas reaccionarias.



Una joven desertora, que intervino de forma anónima, relató haber presenciado el arresto de una mujer embarazada y su pareja por ver telenovelas surcoreanas. "Sentía que prefería suicidarme antes que ser ejecutada. Por eso decidí escapar", dijo.



También describió que ella, como muchos jóvenes, recurren a la cultura surcoreana, incluida la música, como escape psicológico a la dura realidad en el Norte. El impacto cultural de Corea del Sur en los jóvenes norcoreanos se refleja incluso hoy en la industria del entretenimiento del Sur, con el debut de este verano de 1Verse y Be Boys, los primeros grupos de K-pop con miembros desertores del Norte. Las declaraciones de los desertores coinciden con lo descrito en el informe de derechos humanos publicado por el Ministerio de Unificación de Corea del Sur en junio de 2024, que documenta ejecuciones públicas por consumir o distribuir productos culturales del Sur, así como registros domiciliarios y controles de móviles para detectar modismos surcoreanos como 'oppa' (hermano mayor).

La opinión de los que logran adaptarse al Sur
Durante la última sesión del foro, tres jóvenes desertores que hoy ejercen como profesionales compartieron sus impresiones de la situación actual. El joven emprendedor Oh Kwang-myong, advirtió que la represión en el Norte se ha intensificado, pero tiene esperanza en que la llamada generación 'jangmadang' es más individualista y menos obediente al régimen. La generación jangmadang se refiere a los norcoreanos que crecieron tras la hambruna de los años noventa participando desde jóvenes en actividades económicas informales, comercio privado y pequeños emprendimientos, en un contexto de economía de mercado no oficial que surgió al margen del sistema estatal.

Por su parte, Kim Eun-ju, activista y directora de relaciones externas del Instituto de Investigación EUM, integrado por desertores, lamentó la decisión del Gobierno surcoreano de apagar los altavoces de propaganda en la frontera, una medida promovida por el nuevo presidente Lee Jae-myung. "Fue un error grave. La información exterior debe seguir ingresando de cualquier forma y en cualquier circunstancia", afirmó.

Aunque los panelistas reconocieron el pesimismo actual, marcado por la ruptura total del diálogo intercoreano, el acercamiento de Pionyang a Moscú y la parálisis diplomática con EE.UU., también insistieron en que el conocimiento sobre derechos humanos dentro del país ha crecido gracias a fuentes externas. "Ese cambio no vino del régimen, vino de abajo", dijo Kim Eun-ju.

Park Dae-hyun, director de la organización Woorion, una red digital de apoyo para desertores norcoreanos en Corea del Sur insistió, en un inglés fluido, en que el cambio es posible. "Siento que el túnel en el que vive Corea del Norte va a tener un final", dijo. "Lo único que queremos es que pare el sufrimiento perpetrado por un régimen basado en el miedo"