Ayer estuvimos con Laura.
Tumbada sobre la cama.
Ojos vivos, para si los quisiera el "rapaz del Buscón".
Cara redondita, piel blanca, de las que hace días no sienten el sol.
Tímida, de las que hablan tapándose la boca con miedo a errar.
Agarré de nuevo su mano, para olvidar el miedo de hace unos días y sentir una nueva sensación.
Nos quiere regalar un dibujo..."para sus amigos los policías".
Piensa que le regalarán una medalla, por ser la nena más valiente.
Miré de reojo a los dos compa?eros que estuvieron en la persecución.
De alguna manera...ellos tambien volvieron a nacer.
Que orgullo el trabajar con ellos día a día.
Cuánto me queda por aprender de gente así.
Al despedirnos, el padre y yo, nos fundimos en un abrazo.
DIOS!
"Habeis cogido al hombre malo"...preguntó Laura.
Fue como ver nacer un Angel...