Así actuaron el día de la victoria de la selección española
Los carteristas del fútbol
Por Carlos Rojo, 22 de julio de 2010
Mientras unos miraban hacia arriba...
Pues sí, como un aficionado más y como un español más me pase la tarde en las proximidades de la Plaza de España y Gran Vía, con todos aquellos que el domingo 11 de junio de 2010 querían celebrar la victoria de la selección. Durante la espera, me llamó la atención un individuo que me resultó conocido, de aspecto árabe, que cubriéndole todo el cuerpo una bandera de España, no paraba de moverse lentamente como mirando al cielo, es decir disimulando.
Cuando conseguí identificarle, me di cuenta que se trataba de un argelino (un viejo inquilino de lo que fue la cárcel de Carabanchel), que en su tiempo libre es carterista, de profesión ladrón de carteras. Merecía la pena observarle. Actuaba como un ave rapaz. Primero elegía la victima, después miraba el entorno, se aproximaba con movimientos cortos y precisos, la bandera le servía de “muleta” y sus mejores aliados: el ruido, la gente eufórica por la victoria de España.
Este argelino, que sin duda es viejo conocido de la Policía, es de los que actúa en las grandes aglomeraciones, que es donde las victimas son mas vulnerables, al igual que las aves carroñeras lo hacen en grupo y se les puede ver en las inmediaciones de los estadios de fútbol, en la plaza de toros y en aquellos lugares donde se produce un evento de grandes dimensiones, sin olvidar El Rastro de Madrid, que como todos sabemos es el mas visitado por los turistas.
En el artículo de los robos en las casas durante el verano, un lector comento que lo de las marcas era un leyenda urbana. Desde estas letras afirmo la veracidad de las mismas y ahora explicaré como actúan los carteristas, y que tampoco es una leyenda urbana.
La escuela de Valladolid
Como todas las profesiones, necesitan de un aprendizaje y de unas prácticas, la famosa escuela de Valladolid, de donde en tiempos salían los mejores carteristas, naturalmente nacionales. Desaparece en los años 80, con el trasiego de ciudadanos del mundo, que nos traen a los chilenos uruguayos y argentinos que son profesionales limpios. Actualmente son rumanos y argelinos, los primeros tienen como campo de actuación las líneas de metro y algunos autobuses, se le puede ver por las zonas de los museos en Madrid, son un mínimo de tres y poco profesionales, la mayoría de las veces no pueden culminar sus objetivos, tal vez por la falta de profesionalidad.
Los argelinos están bastante organizados, en las inmediaciones del Santiago Bernabéu se les ve actuar antes de los partidos. Pueden ir hasta cinco juntos, la “muleta” que utilizan es una chaqueta, se camuflan con el resto del público y se les puede ver con bufandas del Real Madrid. Cuando eligen al primo, que es alguien al que han observado sacando una entrada, le controlan los jurdos que los ha metido en la pelleja, estos como si fuesen animales de presa comienzan la caza, se pegan dos, uno cubre la maniobra de levantar la pelleja. Una vez con la cartera en la mano, se la pasan a un tercero, que a su vez se la pasa a un cuarto y si son sorprendidos ellos mismos le dicen al primo, señalando a cualquier persona que a ellos también les han querido robar (hurtar, no hay violencia). Así actúan antes del partido.
Cuando faltan pocos minutos para finalizar el mismo, aprovechando que las puertas se abren sin control, para facilitar la salida, acceden al campo taponando los vomitorios y así consiguen que el flujo de personas sea más lento y pueden actuar con mas impunidad. Esto sucede a la vista del que quiera observarlo.