CUATRO A?OS DE PRISIÓN POR ?SECUESTRAR A SU HIJA?
26 de diciembre de 2007 ALICANTE.
Oscar Lopez.
Si el indulto no lo remedia esta rocambolesca historia con tintes de tragicomedia, terminara con los huesos de José Vicente vecino de Alcoy, en la cárcel cual peligroso delincuente.
Sus penas empezaron en la semana santa del a?o 2004, cuando fue denunciado por su hija mayor Alicia que entonces contaba con 17 a?os recién cumplidos, quiso la díscola joven a pesar de la prohibición de su padre, realizar un viaje a Mallorca para pasar la semana santa con el que era entonces su novio y un grupo de amigos, ante la actitud rebelde de su hija, José Vicente optó por impedírselo cerrando la puerta del domicilio e impidiendo por lo tanto que su hija lograra sus propósitos, permaneciendo encerrados en el mismo hasta el jueves por la tarde, día y medio, en que la permitió salir.
La joven, en su irritación e impotencia por habérsele estropeado los planes, procedió a denunciar a su progenitor ante la policía, y lo que en buena lógica debiera haber acabado con la sonrisa condescendiente de los funcionarios, terminó con José Vicente en los calabozos de las dependencias policiales, y una condena a cuatro a?os de prisión que acaba de ser ratificada por la sala segunda de lo penal del tribunal Supremo, que confirma así la sentencia dictada en su momento por la Audiencia Provincial de Alicante, y todo ello a pesar de que Alicia retiro la denuncia interpuesta en su día, pero esto no fue suficiente, una vez en marcha la maquinaria de la justicia no es tan sencillo pararla.
Al parecer y según reza la sentencia el perdón de la victima no exime de responsabilidad a José Vicente que retuvo contra su voluntad a su hija, no estando amparada esta conducta en los derechos de la patria potestad, máxime cuando Alicia tenia la madurez suficiente para tomar decisiones y además en el tiempo de los hechos trabajaba de dependienta en una tienda de la localidad de Alcoy, contribuyendo a la economía familiar con parte de su suelo, implicando todo ello una plena capacidad personal y jurídica que fue quebrantada a la fuerza por su padre, lamentan los juzgadores en la sentencia la dureza de la pena, pero es la mínima establecida en la norma para estos hechos.
Las paradojas de la vida hacen que, Alicia y José Vicente convivan hoy en día todavía en el mismo domicilio, sus relaciones estén totalmente normalizadas y vivan pendientes del indulto que tienen solicitado, si bien la reciente reforma de la legislación que ha desterrado ?el cachete?, como norma coercitiva a los hijos les haga temer, por lo que en buena lógica no debería existir ninguna duda.