No creo que el Gobierno tuviese calculado el alcance de todo esto, que se llegase al extremo de cancelarse todos los vuelos y al cierre del espacio aéreo. Pero a grandes males grandes remedios y no hay mal que por bien no venga: nos ha quedado claro a todos los colectivos que en el fondo el Estado tiene a su disposición la "manu militari" para imponer la solución de conflictos de forma tajante y unilateral, ya nos llegará a nosotros el día que tendremos que trabajar sin cobrar por el artícula 33...
Cronologia:
3 DE DICIEMBRE DE 2010
# 13.00-14.00: El Consejo de Ministros aprueba un nuevo decreto que regula el nuevo modelo aeroportuario que incluye la regulación de la jornada laboral de los controladores.
# 17.00-18.00: Aena anuncia el cierre de parte del espacio aéreo español después del abandono masivo de los controladores de sus puestos de trabajo. Se desata el caos en los aeropuertos de todo el país. Los pasajeros tienen que desalojar los aviones. Los vuelos comienzan a cancelarse. El ministro de Fomento, José Blanco, reúne un Gabinete de Crisis en la sede ministerial para analizar la situación.
# 18.00-19.00: Prácticamente, todo el espacio aéreo español está cerrado. El Gobierno busca soluciones que pueden incluir pasar el control aéreo a Defensa, medida incluida en el nuevo decreto aprobado esa misma mañana por el Consejo de Ministros.
# 19.00-20.00: USCA pide a los controladores que recobren la cordura y regresen a sus puestos de trabajo. Las compañías aéreas continúan cancelando vuelos, algunas hasta el día siguiente.
# 20.00-21.00: El Gobierno, a través de José Blanco, da un ultimátum a los trabajadores: tienen hasta las 21 horas para incorporarse a las torres de control.
# 21.00-22.00: Los controladores no ceden y el presidente firma el traspaso del control aéreo a Defensa a las 21.30 horas. Los militares comienzan a dirigirse hacia las torres de control de los aeropuertos españoles. La Fiscalía de Madrid abre diligencias por un posible delito de sedición de los controladores. Al día siguiente, se le uniría la Fiscalía de Andalucía y Cataluña.
Un juez dice que los controladores 'se limitaron a cumplir' la ley
El cierre del espacio aéreo fue 'una decisión política' MARISA RECUERO
CÉSAR URRUTIA Madrid
Actualizado: 18/01/2014 03:25 horas
El cierre del espacio aéreo español que sumió al país en 43 días de estado de alarma, a finales de 2010, no fue por falta de controladores, sino por «una decisión política de quien tenía competencia para ello». Lo dice un juez de instrucción de Santiago de Compostela, que no duda en señalar a la empresa pública Aena como la culpable de cerrar el cielo de España para evitar que circulasen aviones.
José Antonio Vázquez Taín, magistrado del Juzgado de Instrucción número 2 de Santiago e instructor de la investigación del caos aéreo que bloqueó los aeropuertos españoles durante 24 horas -del 3 y 4 de diciembre de 2010-, deja claro en un auto dictado el pasado 8 de enero, al que tuvo acceso este diario, que el cierre «no es atribuible ni directa ni indirectamente» a los controladores. Es más, alega que el hecho se produjo «como fruto de una decisión adoptada unilateralmente por quien tenía competencia para ello». Los controladores «se limitaron a cumplir una norma que fijaba el número máximo de horas que podían trabajar», según consta en el auto de Vázquez Taín, instructor también de la investigación del accidente del Alvia, que costó la vida a 79 personas el pasado 24 de julio.
El magistrado alega que 'sólo caben responsabilidades' de las autoridades
En palabras del juez, «sólo caben responsabilidades políticas», ya que Aena «impone el rate 0 [prohibido el tráfico aéreo], pese a que contaba con varios aeropuertos en pleno funcionamiento».
Los hechos se produjeron bajo el mandato de José Luis Rodríguez Zapatero, con José Blanco como ministro de Fomento, Juan Ignacio Lema como presidente de Aena y Carmen Librero, actual secretaria general de transportes de España, como directora general de Navegación Aérea y responsable del control aéreo del país.
Pese a las denuncias de Aena y del Gobierno contra los controladores, acusándoles de haber abandonado su puesto de trabajo, el juez deja constancia de que «ni los controladores habían pactado abandonar masivamente los puestos de trabajo ni tenían un plan para cerrar el espacio aéreo». Es más, elige un símil literario para advertir de que «ni el propio Maquiavelo en su magnífico El Príncipe es capaz de imaginar un plan tan barroco para conseguir un fin».
Aena llegó a incluir a un fallecido en el cuadrante de Santiago
Lo que sí consideró Vázquez Taín fue la existencia de «un plan coordinado de defensa de derechos» por parte de los trabajadores de las torres, «al menos en lo concerniente al aeropuerto de Santiago de Compostela». Y es que fue aquí donde se inició la presunta huelga encubierta, que después se expandió al resto de torres y centros de control aéreos.
El juez justificó así el hecho de que los controladores que no estaban trabajando era porque habían cumplido el máximo de horas laborales decretadas por ley para el año. En este sentido, el magistrado destaca «la falta de previsión de la empresa», ya que las ausencias podrían «haber sido contrarrestadas de forma fácil por la empresa variando las hojas de cuadrante».
En cuanto a los cuadrantes, el auto deja constancia de que Aena incluyó «sin rubor alguno» a enfermos y controladores con permiso, entre otros. Es más, el juez asegura que «llegó a incluir supuestamente a un fallecido» en el cuadrante de Santiago.
La situación descrita llevó al juez a considerar, incluso, que una de las sentencias presentadas por Aena «está basada en hechos irreales». Vázquez Taín decidió archivar la causa de manera definitiva, por no ser los hechos constitutivos de delito, en relación al comportamiento que adoptaron los controladores aéreos.