Un peatón tendrá que indemnizar con más de 3.000 euros al conductor que le atropelló
Ocurrió en Palma de Mallorca el pasado 4 de septiembre de 2019 cuando un peatón fue atropellado por el conductor de un coche. Como consecuencia del suceso, comenzó un proceso jurídico que se ha ido demorando tras diferentes recursos por parte de los afectados.
La duda principal y que resulta decisiva para la resolución del caso es conocer con exactitud cuando cruzó el peatón la calle, dado que había un semáforo. ¿Estaba rojo para los viandantes o para los vehículos?
La sentencia aclara lo sucedido
En la sentencia, el peatón afirma que cuando comenzó a cruzar la calzada el semáforo que le afectaba se encontraba en fase verde y, por tanto, le habilitaba el paso. Sin embargo, giró la cabeza un instante y cuando volvió la vista al frente, el citado semáforo había ya cambiado a fase roja, momento en que supuestamente le atropelló el vehículo.
La defensa del peatón asegura que, si al empezar a cruzar el semáforo estaba en verde, ya tiene preferencia de paso durante todo el recorrido, independientemente de que a mitad cambiase a rojo. También añade que el conductor del coche iba a una velocidad excesiva al tratarse de un entorno urbano.
Al lugar de los hechos acudió una patrulla de agentes de la Policía Local de Palma que realizó un atestado donde se dice lo siguiente. "El peatón atropellado, Don Constantino, afirmó que después de girarse hacia su amigo, cuando volvió a mirar al frente, y ya en mitad de la calzada, vio que el semáforo de los peatones parpadeaba, para pasar de la fase en verde en que se encontraba, a fase roja."
El conductor del vehículo, Don David, manifestó que tenía su semáforo de circulación en verde y que el peatón se le echó encima.
Y el testigo Sr. Eusebio, amigo de Constantino, indicó que cuando éste se encontraba en medio de la calzada el semáforo de los peatones parpadeaba.
Con toda esta información, el Tribunal de Palma encargado del caso considera que el peatón actuó de forma negligente, y que "esta fue causa única del siniestro". La sentencia considera que si bien es cierto de que el semáforo cambio de color mientras el peatón cruzaba, esta persona debió esperar a que pasase el vehículo y no "irrumpir en la vía sin darse cuenta de que pasaba un vehículo, a pesar de la configuración de la calzada en línea recta y la ausencia de acreditación de obstáculos que impidieran la visión".
En cuanto al supuesto exceso de velocidad la sentencia señala que "no hay base probatoria alguna de que el vehículo implicado en el accidente circulara a velocidad excesiva, ni que lo hiciera en fase roja".
La sentencia estima que el peatón deberá pagar 3.610,99 euros a Liberty, que es la compañía de seguros del coche. También las costas del proceso judicial.