Inmigración
Zapatero reconoció al Gobierno galo que se equivocó con la regularización de 2005
Fillón declara que el presidente lamenta ?amargamente? la legalización de 650.000 inmigrantesJ. Gómez / R. Ruiz
París/Madrid- Si José Luis Rodríguez Zapatero pudiese retroceder en el tiempo, ?volvería a regularizar a 650.000 inmigrantes ?sin papeles?? No, según ha revelado el primer ministro francés, François Fillon, en alusión a una supuesta confesión del presidente espa?ol en el último encuentro que mantuvieron ambos, en Madrid, a finales de julio.
El Gobierno socialista ha jurado, y ayer mismo perjurado, que la legalización masiva fue beneficiosa para Espa?a. La versión de Fillon es que el balance de Zapatero, en privado, es diametralmente opuesto. ?Me reuní con Zapatero antes de las vacaciones. Regularizó a cientos de miles de clandestinos, ahora lo lamenta amargamente y, en todo caso, se ha comprometido a no volver a hacerlo?, declaró Fillon, el domingo por la noche, entrevistado en el telediario de la primera cadena gala, TF1.
En ausencia de desmentido oficial por parte de Moncloa, el único dirigente gubernamental en saltar a la palestra fue el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos. El jefe de la diplomacia espa?ola calificó de ?éxito? el proceso de regularización, porque se llevó a cabo ?mediante el diálogo?, y lo propuso como ?modelo? para otros países. Sin embargo, no negó que el presidente del Gobierno hubiera hecho las declaraciones al primer ministro francés que le dejan en evidencia.
Aunque se pueda reprochar a Fillon su falta de discreción acerca de un encuentro privado y oficial, parece poco creíble que el primer ministro francés pueda inventarse unas declaraciones de Zapatero sólo con el fin de justificar el endurecimiento de su política de inmigración.
La nueva ley, impulsada por el presidente Nicolas Sarkozy, endurecerá las condiciones de acceso al asilo y la residencia, y aumentará el número de expulsiones de ?sin papeles?. ?Francia no puede acoger a todos los que quieran instalarse en su territorio [...] Hay que seguir devolviendo a la frontera a los indocumentados?, zanjó Fillon.
En un primer término, el objetivo del Ejecutivo francés es ?orientar la inmigración hacia la economía y el trabajo?. Una ?inmigración? a la carta, según las necesidades de la economía gala, y no circunscrita a cuestiones humanitarias.
Sin embargo, el ?sarkozysmo? no se limita a los argumentos contables y también estima que la llegada masiva de personas con otras costumbres y religiones puede alterar de forma irreversible la ?identidad nacional?. Como se desprende de las palabras de Fillon: ?Nuestras economías, nuestros sistemas sociales y culturales no pueden asumir un flujo incontrolado de población extranjera [...] Los franceses aprueban esta política porque sienten, en su vida diaria, que hay equilibrios que no deben romperse?.
En lo que están de acuerdo tanto el Ejecutivo de centroderecha francés como el socialista espa?ol es en la necesidad de implantar una ?política europea de inmigración?, común a todos los integrantes de la UE.
salu2