La Policía de los pueblos tiene menos formación
Los agentes de localidades pequeñas carecen de planes reglados.
12/04/2010 F. V. L.
Las policías locales de Aragón funcionan a dos velocidades. O, dicho de otra forma, la Policía Local de Zaragoza funciona muy bien, posee una plantilla numerosa y cuenta con abundantes medios. Mientras que las policías del resto de municipios, de localidades como Huesca, Teruel, Jaca, Zuera o Utebo, desenvuelven su cometido en medio de grandes dificultades por la escasez de personal, los largos horarios y salarios muy inferiores.
Sin embargo, el aspecto en que la diferencia entre la Policía de la capital y la del resto de Aragón resulta más patente es en la formación profesional. Empezando por la formación básica, que los candidatos que superan las oposiciones deben realizar en Zaragoza debido a la inexistencia de academias específicas en las comarcas. De ahí que los policías en prácticas de pequeñas localidades hayan de desplazarse a la capital de Aragón durante tres meses para recibir los conocimientos que los capacitan para ejercer su profesión.
"El problema es que todo lo referente a la enseñanza de los agentes no está regulado", explicó Carmelo Pardos, del sindicato CSIF. "La cuestión se aborda en la Ley de Coordinación de Policías Locales, pero este texto se enfrenta a muchos problemas para su aprobación y ya ha sido rechazado varias veces", agregó.
OFERTA INSUFICIENTE
Al no existir una legislación que regule la formación de los policías locales, la cantidad de conocimientos prácticos y teóricos que estos adquieren dependen sobre todo del lugar donde están destinados. Cuanto menor es el número de habitantes de la población, menor es también la posibilidad de aprender, al margen de la preparación básica exigida a todos los miembros de las policías locales.
"Si queremos formarnos, tenemos que hacerlo fuera de las horas de trabajo, por eso vamos siempre a remolque", indicó un agente de una población próxima a Zaragoza. "Aquí tenemos que hacer de todo, no podemos especializarnos, y es por eso es esencial estar preparado", dijo.
Otro problema, según Raúl Lecha, de Comisiones Obreras, es que la escuela de policías locales de Aragón "solo existe sobre el papel". De ahí que, en estas circunstancias, el esfuerzo docente que llevan a cabo las distintas administraciones y las centrales sindicales "sea capital para formar buenos policías locales".
Por ejemplo, este año el Instituto Aragonés de la Función Pública, dependiente de la DGA, ha organizado 41 cursos, con un coste que ronda los 64.000 euros. Los imparten entidades como Adises, la Asociación Española de Intervención y Defensa Policial (Idepol) y el sindicato Cipol. Pero tanto UGT como CCOO y CSI-CSIF también dan sus propios cursos.
"Con todo, la oferta de cursos es claramente insuficiente", apuntó Carmelo Pardos. "En Aragón trabajan alrededor de 1.700 policías locales, 1.300 de ellos en Zaragoza, y lo cierto es que las clases de temas específicos, llegan a una minoría de esa plantilla", señaló. En cambio, los cursos de reciclaje son obligatorios y han de pasar por ellos todos los agentes.
Tomás García, responsable de Cipol, cree asimismo que es muy necesario incrementar el número de cursos, en especial los dedicados a cuestiones prácticas relacionadas con las formas de actuar de los agentes ante situaciones diversas.
TEORÍA Y PRÁCTICA
"No sobran cursos teóricos, pues es fundamental estar al corriente de los cambios legislativos, pero sí habría que hacer más hincapié en el día a día de los policías",afirmó García, que sostiene que las clases deberían impartirse en horario laboral para facilitar el acceso.