Las puertas de entrada a Europa: 800.000 sirios piden ir a Alemania, solo 6.000 quieren ir a España
Grecia, Italia, España... Los puntos calientes de entrada y paso de refugiados en Europa se han encontrado este verano, y en concreto durante el mes de agosto, con oleadas de miles de inmigrantes en sus fronteras. La mayoría quiere llegar a Alemania o los países escandinavos. Y no sólo a través del Mediterráneo: Reino Unido ha recibido 330.000 inmigrantes en un año, y casi 20.000 refugiados más que en 2014.
"Grecia vive una gran crisis en medio de su crisis". Este es el retrato de la península del entonces primer ministro heleno, Alexis Tsipras, el pasado 31 de julio. Las islas de Lesbos, Quios, Samos y Kos han recibido y dado paso en el mes de julio a una media de 1.600 refugiados al día, de los que el 90% proceden de Siria, Afganistán e Irak, según la agencia de refugiados de la ONU, Acnur. Los centros de acogida griegos están desbordados y los enfrentamientos con la Policía a cuenta de los visados son continuos.
Tsipras no es el único en denunciar la denigrante situación humanitaria de los refugiados. El comisario de Inmigración de la Comisión Europea, Dimitris Avramopoulos, ha advertido de que el mundo afronta "la peor crisis de refugiados" desde la Segunda Guerra Mundial y ha instado a Europa a acogerlos de forma "decente" y "civilizada".
Las situaciones de conflicto en países de Oriente Medio y el Norte de África dejan a su paso no sólo muertes, sino flujos migratorios de miles de personas. La ONU ha confirmado este jueves que unos 310.000 inmigrantes y refugiados han llegado a Europa en lo que va de 2015 a través del Mediterráneo, 100.000 más que en todo 2014. Familias enteras se exilian ante el peligro de perder la vida o de ser encarceladas. Y en cuestión de meses, los desplazamientos se han convertido en un auténtico éxodo con una meta: Reino Unido, Alemania o los países escandinavos.
La ruta de los refugiados desde Siria hasta ahora había sido sólo marítima: la primera etapa del viaje eran las islas griegas cercanas a la costa turca. Eso ya es suelo europeo y están fuera de Asia, pero no por ello a salvo de regresar a sus países de origen. Deben conseguir asilo para cerrar la posibilidad de repatriación. Lo siguiente es llegar a la península helénica. Allí el viaje comienza a ser terrestre.
Con casi 160.000 refugiados en Grecia, de los que muchos quieren llegar a Alemania, que puede enfrentarse a más agitaciones sociales por brotes xenófobos
Una media de 8.000 kilómetros de camino
Una vez abierta la puerta de Europa, sólo el 8% de los inmigrantes han solicitado asilo en Grecia. El resto, continúan a pie o en distintos vehículos atravesando Macedonia, Serbia y Hungría, donde en un solo día, entraron más de 3.200 inmigrantes. En suelo húngaro, la circulación hacia otros países europeos es libre. ¿Por qué Hungría es diferente? Pertenece al espacio Schengen, comunidad de 26 Estados europeos donde no hay fronteras interiores, y es además vecino de Austria, otro de los destinos con más posibilidades de labrarse un futuro.
Ante la ingente cantidad de personas que entran cada día, las autoridades de Budapest han decidido no sólo sacar las fuerzas de seguridad como barrera humana, como hicieron Serbia y Macedonia, sino instalar una alambrada en toda su frontera con Serbia para impedirles por completo el paso. No obstante, los inmigrantes no se amilanan y se las arreglan para atravesarla. Hungría pretende aprobar además una ley que permitirá al Ejército actuar por la fuerza en la frontera "en casos extremos".
Alemania se prepara para seguir recibiendo a miles de refugiados. Mientras que el Gobierno teutón ha registrado 97.640 peticiones de asilo sólo en 2015, según Eurostat, a la vez, ha tenido que hacer frente a los crecientes ataques racistas a la población extranjera que ya está instalada en el país: un hombre que orina sobre dos niños en Berlín o el incendio de un gimnasio habilitado como centro de acogida en Weissach im Tal, hechos que han desatado la "indignación" de la canciller Angela Merkel y con ella, del Ejecutivo.
Con casi 160.000 refugiados llegados a Grecia entre enero y agosto, de los que bastantes quieren llegar a Alemania, el Gobierno de Berlín puede enfrentarse a más agitaciones sociales por brotes xenófobos de la población germana. Merkel ya ha recibido abucheos de sus compatriotas por la gestión de la crisis migratoria y la apertura de nuevos centros de acogida.
Se trata de la peor crisis de refugiados desde la II Guerra Mundial
La situación en el Mediterráneo oriental, si bien inferior en cifras, es parecida. Italia no sólo es puerta de entrada de miles de eritreos, somalíes y norteafricanos a través de Lampedusa, sino que ya ha recibido 19.945 solicitudes de asilo y prevé la llegada de otros 20.000 inmigrantes en septiembre, entre los que también hay refugiados sudaneses o sirios.
1% de las solicitudes de asilo, en España
En cuanto a España, que sigue a la cabeza en la recepción de inmigrantes marroquíes (20.000 en 2014, según el INE), ha registrado en 2015 la llegada de 3.789 refugiados sirios. Ramiro Muñiz, miembro de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), precisa que sólo el 1% de los sirios que piden asilo en la UE, en calidad de refugiados, es decir, 6.000 personas, lo hacen en España.
¿Por qué razones? "Ellos saben dónde hay condiciones de integración más favorables desde el punto de vista laboral", afirma. Sólo en Alemania se esperan, para finales de 2015, según apunta, más de 800.000 solicitudes de asilo. "[Los inmigrantes] Saben dónde hay trabajo y dónde es más difícil encontrarlo", asegura Muñiz. Añade también que las redes familiares ya tejidas en Suecia o Francia y sus raíces francófonas "les llevan a otros países europeos". A los que se quedan en España, dice Muñiz que "el Estado para ellos articula sistemas de acogida por toda la península y ayudas sociales a través del Ministerio de Empleo".
Calais es "la selva" de Francia, donde 3.000 esperan una oportunidad para embarcarse a Reino Unido
En Reino Unido, el 61% de las solicitudes de asilo son denegadas y los acogidos superan los 32.000. Más de 330.000 inmigrantes han llegado a las costas de la isla en lo que va de 2015, la mayoría, procedentes de Sudán, Somalia, Nigeria y Siria y que llegan a suelo británico a través de Francia, por el Canal de la Mancha y desde Calais.
A la ciudad francesa se la llama "la selva" por la situación de caos con los inmigrantes que quieren refugiarse en Reino Unido y que esperan allí una oportunidad de embarcarse hacia allí. Permanecen en Calais más de 3.000 inmigrantes, según la Comisión Europea, denegado el paso por el túnel subterráneo. En un comunicado, el Gobierno británico ha asegurado que trabajará para que Reino Unido no reciba más inmigrantes ni refugiados.
Mientras tanto, 3.600.000 refugiados siguen a las puertas de Europa, esperando una solución para sus vidas. Y una permanente, aunque aún más difícil, para remediar la situación de sus países de nacimiento.