Del número 5 de la revista Madrid Seguro
Programa de prevención de riesgos laborales (II)
Prevención de enfermedades trasmitidas por accidentes biológicos
Prevención de riesgos laborales
Por su actividad profesional, el colectivo de Policía puede estar especialmente expuesto a la trasmisión de enfermedades de tipo biológico, por contacto con sangre o saliva, pinchazos o mordeduras. Los profesionales del Cuerpo deben tener presentes las recomendaciones para, en caso de que se produzca exposición, actuar rápida y adecuadamente.
Los policías deben trabajar pendientes de los posibles momentos de exposición a enfermedades biológicas, pero no hay que generar una alarma innecesaria ya que, estadísticamente, las enfermedades no son de alta contagiosidad y para muchas de ellas existen posibilidades de vacunación previa, con lo que el peligro disminuye.
Únicamente, las enfermedades ante las que el profesional debe estar alerta son la hepatitis C y el sida porque para ellas aún no existe una vacuna.En primer lugar, el policía debe tratar de evitar la exposición, si es posible. En el caso de que ésta se produzca, debe tomar medidas inmediatamente para evitar el
contagio.
A continuación, se tratan las vías de exposición más habituales y el modo de actuación. Básicamente hay tres supuestos que tienen que contemplarse especialmente:
• Las mordeduras.
• Los pinchazos.
• La exposición a sangre o saliva.
Mordeduras
El policía, cuando se encuentra de servicio, debe mantenerse alerta ante el peligro de mordeduras, principalmente cuando está procediendo a reducir o a detener a alguna persona. Aunque el riesgo que existe de transmisión de enfermedades
por esta vía es bajo, sí hay que tener en cuenta que la boca es la parte de cuerpo más séptica, es decir la que contiene mayor cantidad de bacterias.
Esto puede provocar, en caso de mordedura, que la herida pueda llegar a infectarse. Por lo tanto, si se produce, lo primero que debe hacer el policía, en el mismo momento y lugar del accidente, es lavar la zona enérgicamente
con povidona yodada (Betadine®), para evitar infecciones.
Pinchazos
Otro supuesto que supone un riesgo para el policía es el de los pinchazos con agujas de jeringuillas. En este caso hay queextremar las medidas de prevención, ya que suelen proceder de adictos a las drogas.
Los profesionales deben seguir escrupulosamente todos los pasos indicados en el procedimiento del cacheo y utilizar los medios de protección de que se disponen, como son los guantes especiales antipinchazo y anticorte.
Aún así, puede ocurrir el pinchazo, ante lo cual, el profesional tendrá que actuar como ante un mordisco, lavando enérgicamente con el antiséptico y facilitando el
sangrado.
Esta acción debe volver a repetirla dos o tres veces más.
Exposición a sangre o saliva
La exposición a sangre es un supuesto que se puede dar con relativa facilidad en el trabajo diario del policía. Si la piel donde se produce el contacto está intacta, no hay
ningún problema, basta con lavar la zona con agua y jabón.
Únicamente hay que tomar medidas en caso de que la sangre roce una zona con herida. En este caso, aunque las posibilidades de contagio son escasas, se procederá a lavar con agua y jabón e inmediatamente aplicar un antiséptico, como por ejemplo Betadine®.
Siempre hay que lavar enérgicamente y aplicar desinfectante
El profesional de servicio puede también tener contacto con saliva, bien porque es escupido, bien porque en el transcurso de una actuación, alguien le grita a corta
distancia directamente a la cara. Igualmente, el procedimiento pasa por lavarse con agua y jabón, aplicar agua tibia en los ojos y enjuagarse la boca y la nariz, lo
antes posible. Si hay heridas en la piel, aplicar además antiséptico.
Para terminar, en todos los casos, una vez se ha procedido zona afectada una gasa mojada con más antiséptico y dos o tres secas encima. Evidentemente, si se considera que el incidente ha sido grave, habría que acudir rápidamente al servicio médico para su valoración.
En caso de exposición, el policía debe tomar medidas inmediatamente
Una vez tomadas las medidas per tinentes, en caso de exposición a algunos de estos supuestos, el policía debe tener en cuenta los siguientes puntos:
• Nunca se debe perder la pista al agresor, para que bien con su permiso o a través de una orden judicial, se le hagan inmediatamente las pruebas necesarias
para descartar enfermedades. En el caso de un pinchazo con jeringuilla, además, hay que hacerse con ella y llevarla al hospital.
• Llamar a la mutua de accidentes laborales correspondiente, para que nos indiquen, previa información referida, a qué centro acudir, en caso necesario (teléfono 91 590 63 00).
• Cuando los hechos ocurran en presencia de los servicios médicos de urgencias nos limitaremos simplemente a seguir sus instrucciones.
• En caso de alergia al yodo no se utilizará este antiséptico (consultar contraindicaciones). Se deberá proceder a un buen lavado de la zona afectada y acudir inmediatamente a los servicios de urgencias de la mutua de accidentes laborales correspondiente.
A estos efectos, todos los vehículos llevarán siempre:
• Un paquete de gasas.
• Un bote de povidona yodada.
http://www.madrid.es/UnidadWeb/Contenidos/Publicaciones/TemaEmergencias/MadridSeguro/Ficheros/n5diciembre2009.pdf