Así lo ha explicado su sobrino, Paco Ortega, a las puertas del hospital Virgen de la Macarena donde permanece ingresado el torero. "Según el atestado que le han hecho llegar al abogado de mi tío, le hicieron las pruebas de alcoholemia y no hay alcoholemia, y circulaba a 70 kilómetros hora", explicó.
La Guardia Civil reconstruye el accidente y la velocidad del coche de Ortega Cano
Expertos de la Unidad de Reconstrucción de Accidentes se desplazan la semana que viene a la localidad de Castilblanco para estudiar las condiciones en las que se produjo el accidente en el que falleció Carlos Parra
Jorge Muñoz | Actualizado 04.06.2011 - 05:03
La Unidad de Reconstrucción de Accidentes de la agrupación de Tráfico de la Guardia Civil de Madrid realizará un informe pericial sobre el siniestro en el que murió Carlos Parra Castillo y determinará la velocidad aproximada a la que circulaba el Mercedes R-320 del diestro José Ortega Cano.
Fuentes de la investigación confirmaron ayer a este periódico que varios agentes de esta unidad -que ha investigado entre otros casos el atropello mortal por el que fue condenado el bailaor Juan Manuel Fernández Montoya, Farruquito-
se desplazarán la próxima semana hasta la carretera A-8002, en Castilblanco de los Arroyos, para realizar una reconstrucción del accidente ocurrido el pasado 28 de mayo.
Entre los objetivos de esta investigación se encuentra el de determinar con una exactitud aproximada la posible velocidad del vehículo que conducía Ortega Cano. El avance del atestado realizado por la Guardia Civil atribuye las causas del siniestro a una velocidad inadecuada y a la invasión del carril por parte del coche conducido por el matador retirado, pero por el momento no se ha cuantificado la velocidad a pesar de que los familiares del diestro han apuntado que iba a 70 kilómetros por hora.
Hasta ahora se han ofrecido varias posibles velocidades a las que podría circular el Mercedes del torero, pero ninguna de ellas es correcta puesto que los agentes que han elaborado el atestado inicial remitido al juzgado no la han concretado. Para eso precisamente se va a realizar este estudio, aunque las mismas fuentes han precisado que la velocidad del vehículo no tiene por qué ser determinante a la hora de establecer las causas del siniestro, toda vez que se baraja que no debió ser muy elevada.
La investigación de la Unidad de Reconstrucción de Accidentes, que está considerada como una especie de CSI para estas cuestiones, incluye una inspección ocular, pruebas con vehículos similares y un estudio de los daños causados en los vehículos implicados en la colisión.
Los expertos de Tráfico utilizan para su estudio un acelerómetro en el que se registran determinados parámetros como el rozamiento en el asfalto, la frenada y la velocidad del vehículo. Con todos los datos recopilados a pie de carretera y un avanzado programa informático, los agentes pueden realizar incluso una recreación virtual del accidente que resulta de gran utilidad a la hora de enjuiciar los hechos.
Esta unidad suele investigar los accidentes graves, en los que se producen varias víctimas mortales, o aquellos que han generado una gran alarma social, como ocurrió en el caso de Farruquito, que fue investigado por la Unidad de Reconstrucción de Accidentes de la Agrupación de Tráfico de Mérida.
Mientras continúa la investigación para esclarecer las causas del siniestro, Ortega Cano continúa ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del hospital Virgen Macarena, sometido a sedoanalgesia, aunque según el último parte médico se ha comenzado a disminuir la sedación. El viudo de Rocío Jurado continúa con ventilación mecánica, aunque los facultativos que le atienden aprecian una "ligera mejoría de la función respiratoria, con estabilidad hemodinámica y sin nuevos datos significativos en su evolución clínica". En cualquier caso, desde el hospital aclaran que el pronóstico del paciente sigue siendo "grave".