El Parlamento Vasco reconocerá a 'Txiki' y Otaegi como víctimas de abusos policiales
Sus expedientes, junto a otros seis más, serán los primeros indemnizados por lakua
Para los siete fallecidos la indemnización es de 135.000 euros y, en el caso de resultar herido, de 35.000 a 95.000
Javier Núñez - Martes, 20 de Noviembre de 2012 -
Donostia. Angel Otaegi y Jon Paredes Manot Txiki, fusilados por el régimen franquista el 27 de septiembre de 1975, han sido reconocidos como víctimas de abusos policiales, según dieron a conocer ayer los miembros de la comisión de evaluación impulsada por el Parlamento Vasco para reconocer a estas víctimas de abusos policiales por motivación política. Junto a Otaegi y Txiki, la comisión también ha reconocido su condición de víctimas a otras cinco personas que fallecieron por la acción policial y a otra que quedó gravemente herida.
La comisión, presidida por la directora de Derechos Humanos del Gobierno Vasco, Inés Ibáñez de Maeztu, e integrada por Txema Urquijo (adjunto a la Dirección de Atención de Víctimas del Terrorismo), Manuela Carmona (exvocal del Consejo General del Poder Judicial), Carlos Martín Beristain (doctor en Psicología), Álvaro Gil-Robles (excomisario de Derechos Humanos del Consejo de Europa), José Antonio Pérez (vocal del Instituto Social Valentín de Foronda) y Mónica Hernando (miembro del Foro de Asociaciones de Educación en Derechos Humanos y por la Paz), dio ayer a conocer el trabajo realizado desde su constitución el pasado 20 de julio.
Según señalaron, en estos cuatro meses se han presentado 55 solicitudes. De ellas, 21 corresponden a fallecimientos, 32 por lesiones y otras dos están sin determinar. La comisión ha estudiado 15 expedientes, de los que cuatro están en vías de análisis y los otros once están ya cerrados. De estos once expedientes, en ocho casos los solicitantes han visto reconocida su condición de víctima. Por lo que respecta a los tres casos inadmitidos, uno de ellos lo ha sido por no corresponderse al periodo de trabajo que abarca esta comisión, de 1960 a 1978, otro porque la víctima ya sido reconocida como tal y el tercero porque hacía referencia a daños en un vehículo.
De los ochos expedientes a los que se ha reconocido su condición de víctima, siete corresponden a personas fallecidas. Se trata de Otaegi y Paredes Manot, de quienes se señala que fueron fusilados tras un Consejo de Guerra en el que se vulneraron sus derechos a un juicio justo, Antonio Fernández muerto por un disparo de la Policía Armada cuando observaba desde el balcón de su casa una manifestación contra la contaminación, Francisco Javier Núñez, muerto tras ser obligado a ingerir grandes cantidades de alcohol y aceite de ricino, Segundo Urteaga muerto en Urabain (Araba) por disparos de la Policía en un operativo contra ETA, Javier Batarrita, muerto al ser ametrallado su vehículo por la policía en un control y Alberto Soliño, muerto por un disparo efectuado por un miembro de la Guardia Civil. El octavo expediente corresponde a Antxone Telleria, gravemente herida por la Guardia Civil.
En el caso de los fallecidos, sus familias cobrarán 135.000 euros por parte del Gobierno Vasco, mientras que en el caso Antxone Telleria la indemnización, que deberá ser aún determinada, varía entre 35.000 y 95.000 euros. Según manifestó la directora de Derechos Humanos del Gobierno Vasco, Inés Ibáñez de Maeztu, la intención es que estas indemnizaciones se hagan efectivas lo más pronto posible, por lo que, según su opinión, podrían abonarse en un mes y medio o dos meses como muy tarde.
Según señalaron los miembros de la comisión, han trabajo por riguroso orden de entrada de los expedientes y su intención ha sido contar con los testimonios de primera mano de los familiares de las víctimas o de las propias víctimas, lo que en algunos casos ha ralentizado el proceso. En este sentido, desvelaron que todos los testimonios han sido grabados con la intención de dejar memoria de los mismos.
olvido institucional Inés Ibáñez de Maeztu, que aseguró que seguirán adelante con el estudio de los cuarenta expedientes que aún están sobre la mesa, afirmó que no han encontrado reticencias por parte de las instituciones, aunque sí señaló que en algunos casos el trabajo ha sido complicado ya que no había ningún tipo de documentación.
Por su parte, Txema Urquijo aseguró que a lo largo de los testimonios recogidos han constatado tres elementos comunes en todos ellos. "Hay tres elementos que son comunes a todos ellos. El olvido institucional y desamparo que han padecido, el que conceden un altísimo valor al hecho de que hayan sido reconocidos como víctimas, y, por último, que existe un déficit de memoria que consideramos que debe ser resuelto", señaló.
Urquijo, además, aseguró que no cree que levante polémica el hecho de haber reconocido como víctimas a Angel Otaegi y Jon Paredes Manot Txiki. "Nosotros no planteamos que se les haga un homenaje. Lo que la comisión señala es que se debe reconocer su condición de víctimas de violación de derechos humanos. Además, gobiernos del PSOE y del PP ya han realizado reconocimientos como víctimas del terrorismo a miembros de ETA. No tiene que haber polémica", manifestó.
La comisión evaluadora aseguró que estos expedientes serán entregados tanto al Gobierno Vasco como al Parlamento con la recomendación de que se incluyan a estas víctimas en las actividades de reconocimiento y memoria que se organicen. De igual forma, aseguraron que se va recomendar al Gobierno y al Parlamento para que dirijan esta petición a las instituciones del Estado.
"Infamia" Por su parte, la presidenta de la AVT, Ángeles Pedraza, consideró una "infamia" la decisión sobre Txiki y Otaegi y exigió al Gobierno español que controle la comisión del Ejecutivo de Lakua ya que "el País Vasco no es independiente a día de hoy".
l Francisco Javier Núñez
Resultó muerto en Bilbao el 30 de mayo de 1977 como consecuencia directa de las hemorragias producidas por la ingesta forzada de grandes cantidades de alcohol y de aceite de ricino, hecho acaecido el 17 de mayo de ese mismo año de 1977. La agresión fue provocada por elementos policiales o parapoliciales protegidos por estos. Su familia será indemnizada con 135.000 euros.
l Segundo Urteaga
Resultó muerto en la localidad alavesa de Urabain el 15 de mayo de 1969 por disparos efectuados por miembros de la Policía Armada en el transcurso de un operativo desplegado de forma conjunta con la Guardia Civil contra un presunto comando de ETA. Urteaga se dirigía a tocar las campanas de la iglesia del citado pueblo. La víctima no tenía ninguna relación con dicha organización. Su familia será indemnizada con 135.000 euros.
l Antonio Fernández Elorriaga
Resultó muerto en la localidad vizcaina de Erandio por el disparo efectuado por un miembro de la Policía Armada el 29 de octubre de 1969 mientras observaba desde el balcón de su casa una manifestación ciudadana contra la contaminación. La víctima falleció en el Hospital de Basurto el 12 de noviembre de 1969. Su familia será indemnizada con 135.000 euros.
l Francisco Javier Batarrita
Falleció en el barrio de Bolueta en Bilbao el 27 de marzo de 1961 a consecuencia del ametrallamiento de su vehículo en la gasolinera allí situada por parte de cuerpos y fuerzas del orden público. Batarrita fue interceptado y abatido en un control preparado contra un supuesto comando de ETA. La víctima no tenía ninguna relación con dicha organización. Su familia será indemnizada con 135.000 euros.
l Alberto Soliño Mazachs
Resultó muerto por un disparo efectuado por un miembro de la Guardia Civil que en aquel momento se encontraba de paisano. El suceso que acabó con su vida ocurrió en Eibar el 12 de junio de 1976 después de una discusión originada tras un concierto. Soliño Mazachs había actuado como músico en dicho concierto. Su familia será indemnizada con un total de 135.000 euros.
l Jon Paredes Manot, 'Txiki'
Miembro de ETA, este zarauztarra de origen extremeño fue fusilado el 27 de septiembre de 1975 en cumplimiento de la sentencia de un Consejo de Guerra sumarísimo contra él, en el que se vulneró su derecho a un juicio justo. Su familia será indemnizada con 135.000 euros en virtud de lo que dio a conocer ayer por la tarde la comisión evaluadora del Parlamento Vasco.
l Angel Otaegi Etxeberria
Natural de Nuarbe, Otaegi fue fusilado el 27 de septiembre de 1975 en Burgos en cumplimiento de la sentencia dictada en una Consejo de Guerra ordinario en el que se vulneró su derecho a tener un juicio justo. Fue acusado de ser colaborador de ETA. Su familia será indemnizada con 135.000 euros en virtud de lo decidido ayer por la comisión evaluadora del Parlamento Vasco.