Guardia Civil y otras instituciones policiales
José Nú?ez López, secretario para Galicia de la (R.E.G.U.A.C.I.)
Mucho se está hablando y escribiendo en estos días, sobre una mayor o menor eficiencia de los servicios que realizan los Cuerpos de la Guardia Civil, Policía Nacional y otros, cuyos comentarios por los medios de comunicación y algunos políticos, no hacen otra cosa que sembrar confusión y falsas teorías en relación con el funcionamiento de ambas Instituciones.
Porque tanto para la organización del Cuerpo de la Guardia Civil, Policía Nacional, Policía Local e incluso para los que les precedieron en tiempos remotos tales que: Ballesteros y Fusileros en Valencia; Caudillatos y Alarmas en Galicia; Milicias Locales y Escopeteros en Andalucía; Guardas de Costa en Granada; Compa?ía de Guardas en Aragón, Escuadras en Barcelona; Mi?ones en Vizcaya y Álava; Migueletes en Guipúzcoa o Somatenes primero en Catalu?a y luego en toda Espa?a; Santa Hermandad y últimamente la Ertzaintza en el País Vasco y Mossos d´Escuadra en Catalu?a; la materia prima (que son las personas) fue elegida de entre las que se consideraron más idóneas. Así pues, los "mimbres para cada cesto" fueron de primera calidad, o digamos de la misma; pero luego viene la estructura interna y los Reglamentos de cada Institución, que son distintos, y por tanto no cabe hacer comparaciones que, como suele decirse, siempre son odiosas.
La Guardia Civil, desde sus inicios, ha sido siempre un Cuerpo Militar y en las ordenanzas militares hay escrito que: "El mejor medio de educar e instruir a una tropa es el ejemplo constante". Además de que su condición militar es lo que le ha dado prestigio y estabilidad a este último Cuerpo, y le ha mantenido al margen de los cambios y vaivenes políticos, debemos tener en cuenta que lo del "ejemplo constante" es de "padres a hijos", o sea de arriba abajo, y dejo a la inteligencia del lector para que haga sus deducciones.