Qué podemos hacer para sacarnos de encima a ese vecino molesto, aquél que pone la música a todo trapo a altas horas de la madrugada, que se molesta si se lo reprochamos o incluso nos jode la puerta, el buzón, el coche...
La ley de propiedad horizontal prevé que el juez pueda determinar el abandono del domicilio habitual a aquellas personas que ejerzan alguna actividad molesta.
Pero realmente la justicia cubre estos hechos o simplemente "pasan palabra"?
Y mientras, quienes sufren a estos vecinos su único "consuelo" es la denuncia reiterada, "pesada" muchas veces a nuestro entender, pues nos hace comparecer en el mismo lugar a atender la misma problemática.
_________________________________________________________________________________
DIFÍCIL CONVIVENCIA
Una mujer pone 63 denuncias en dos a?os contra una vecina que la acosa
La afectada dice que la propietaria del piso de al lado la agrede, la amenaza, la insulta y comete actos vandálicos contra su telefonillo y su buzón
Una vecina de Valencia ha interpuesto durante los últimos dos a?os 63 denuncias contra la mujer que vive en el piso contiguo al suyo por amenazas, insultos, agresiones y ataques cometidos contra su patrimonio. La afectada, que ya ha ganado ocho de los casos, asegura desconocer los motivos por los que su vecina le acosa y lamenta que su comunidad no le apoye por miedo a la posible reacción de la denunciada.
J. V. G., Valencia
El infierno de Isabel Martínez comenzó el 19 de septiembre de 2003, cuando regresaba a su domicilio de la calle de la Estrella después de recoger a sus hijos del colegio. ?Me estaba esperando en la puerta y, cuando llegué, me recibió con insultos y amenazas?, relató la afectada a este periódico. Según Martínez, la vecina le dijo: ?Te he de hacer la vida imposible hasta que te vayas de aquí. Voy a llamar a la policía y a servicios sociales para que te quiten a tus hijos?.
Los altercados fueron subiendo de gravedad conforme pasó el tiempo. Martínez asegura en las denuncias interpuestas en el juzgado que su vecina le ha agredido físicamente en cuatro ocasiones y ha intentado hacerlo sin éxito en otros momentos. Según su testimonio, antes ya había optado por otras técnicas de acoso. La denunciante explica que, tras el primer incidente, su vecina empezó a dejar heces humanas en su parte del rellano, a rayar su puerta y su buzón, y a arrojar a su balcón cubos de agua, cortezas de sandía y otros deshechos.
La situación empeoró aún más cuando, como ha reconocido una sentencia, la denunciada acudió a un piso que la denunciante posee en la calle del Maestro Sosa y cometió una serie de actos vandálicos en elementos comunes que desde entonces ha repetido en varias ocasiones. Con un rotulador pintó la palabra ?puta? sobre la plaza de los telefonillos y los buzones ubicados en el interior del portal, como queda demostrado en las fotografías realizadas por un equipo de detectives privados contratado por denunciante. El juzgado condenó a la denunciada a indemnizara la víctima con los 92,80 euros que costó la reposición de los elementos y a pagar una multa de diez euros diarios durante veinte días.
Sin embargo, ni Martínez ni su abogado, Ramón Milara Garzarán, consideraran suficiente lo conseguido hasta la fecha y solicitaron a la juez que dictara una orden de alejamiento, que la magistrada rechazo. Letrado y defendida ya han anunciado que recurrirán.