martes 6 de mayo de 2008
Heridos tres vigilantes del metro del Casco Viejo en una reyerta con un grupo juvenil
Cuatro jóvenes fueron detenidos por agresión y los empleados, hospitalizados
06.05.08 -
??Qué, nos váis a pegar como en el metro de Madrid??. Ésta fue la frase -alusiva a las agresiones racistas a inmigrantes por parte de vigilantes grabadas en el suburbano de la capital madrile?a- que inició una tumultuosa pelea en la estación bilbaína del Casco Viejo en la madrugada del pasado sábado, según la versión de los tres empleados de seguridad, dos hombres y una mujer, que terminaron heridos y en el hospital. La otra parte, una cuadrilla de Portugalete formada por seis chicos y una joven, de los que cuatro fueron detenidos por la Policía Municipal como agresores, aseguran que fueron ellos los ?agredidos?.
Todo empezó alrededor de las seis de la ma?ana. La supervisora del metro encargada de la parada de Casco Viejo observó una trifulca a través de los monitores de las cámaras de videovigilancia. Al fijar su atención, vio -según ha declarado ante la guardia urbana- que tres vigilantes estaban siendo acometidos por un grupo de jóvenes. La responsable decidió llamar al 112, cerrar la entrada por la plaza de Unamuno para impedir que huyeran y enviar refuerzos.
Al parecer, una pareja formada por un chico y una chica habían pasado juntos por la máquina canceladora para evitar pagar uno de los billetes. Los vigilantes presenciaron la escena y les llamaron la atención. Los dos jóvenes se disculparon y se comprometieron a pagar el precio de la diferencia. Según han declarado los trabajadores del metro ante la Policía, en ese momento apareció el resto de la cuadrilla, jóvenes de entre 24 y 30 a?os. Y empezó la discusión. La referencia a los ataques injustificados a inmigrantes en Madrid soliviantó a los empleados de seguridad. Hubo empujones, agarrones, tortas... y al final una auténtica batalla campal, desigual en cuanto al número de componentes de cada parte. Por cada vigilante tocaban a dos chicos, por lo que los primeros se llevaron la peor parte.
En las imágenes grabadas por las cámaras de seguridad, que han sido entregadas a la guardia urbana y que servirán de prueba ante los tribunales, se aprecia una gran violencia. Dos de los vigilantes caen derribados al suelo y reciben patadas por todo el cuerpo. Uno de los jóvenes llega a apoderarse de la defensa de uno de ellos y la utiliza para amenazarles, según refleja el vídeo.
La trifulca dura unos 15 minutos, si bien hay un intento de escapada por parte del grupo juvenil, que se encuentra con la puerta de Unamuno cerrada. Los vigilantes les siguen y cuando éstos regresan vuelven a enzarzarse en una pelea a pu?etazos, que se desarrolla después a lo largo de toda la estación. ?Os vamos a grabar y lo enviaremos a 'Antena 3'?, amenazaron los chicos. Revolcones, sangre, gritos...
Cuando llega al lugar la primera patrulla de la Policía Municipal -hace dos meses se firmó un acuerdo entre el metro y el Ayuntamiento de Bilbao para que el cuerpo colabore con la Ertzaintza en la asistencia a incidentes- se encontró con la pelea en pleno fervor. Los agentes separaron a los contrincantes y redujeron a los agresores más violentos.
Cocaína y hachís
Uno de los tres vigilantes, de 33 a?os, estaba conmocionado e inconsciente a causa de los golpes. El segundo, de 45, se quejaba de dolores por todo el cuerpo y presentaba una brecha en la cabeza. Su compa?era, de 37, había recibido un pu?etazo en la cara que le partió el labio. Entre los tres se?alaron a los jóvenes que les habían pegado. Los policías les identificaron y procedieron a la detención de cuatro de ellos por un delito de agresión con lesiones. Se trata de A.L.N., de 24 a?os; J.F.H., de 30; G.L.M., de 28 y R.L.R., de 24, todos ellos domiciliados en Portugalete. Los cuatro arrestados fueron trasladados a la comisaría central de Garellano. A uno se le ocupó una peque?a cantidad de cocaína y a otro, hachís, indicaron fuentes cercanas al caso.
Los tres empleados de seguridad -los dos hombres presentaban las peores lesiones- fueron trasladados en ambulancias a centros médicos para ser sometidos a las curas precisas. La joven que intentó colarse sufría una herida en una ceja y también fue evacuada a Basurto.
Tras salir de los calabozos ayer por la tarde, Julen, uno de los jóvenes implicados, afirmó que la versión que había trascendido del origen de la refriega no correspondía con la realidad. ?Nosotros hemos sido los agredidos, no los agresores?, apuntó.
Por su parte, Yolanda, la vigilante herida, declaró a este periódico: ?Lo único que hemos hecho ha sido defendernos; eran siete contra tres. Un compa?ero mío sigue ingresado y el otro tiene una brecha en la cabeza?. Sin querer entrar en detalle en los hechos, Yolanda aseguró: ?Si te vienen a pegar y te sacan el tema de Madrid... pues no nos quedamos quietos, claro?.