La Policía Local busca una vía para sortear las trabas al ir de incógnito
Asegura que la autorización desde la Delegación obstaculiza su trabajo
p. calveiro
Pontevedra / la voz 14 de junio de 2012 04:59
Los representantes laborales de la Policía Local aseguran que la sentencia del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) que retira al alcalde la potestad para permitir que los agentes patrullen de paisano no impedirá que trabajen de incógnito, pero sí que pone trabas para ello. «Lo único que cambia es que ahora será la Delegación del Gobierno quien nos autorice, pudiendo delegar en la Subdelegación, que es quien habitualmente lo hace», explicó el delegado de personal en el Concello, Jose Manuel Duarte Solla. Quien afirma que dicho cambio nominativo repercutirá en la agilidad de los trámites y, en consecuencia, en la labor policial.
De hecho, hasta julio de 2010, cuando se publicó el decreto que legitimaba a la Alcaldía, era la Delegación del Gobierno quien tenía la potestad. «Volvemos a la situación anterior y, precisamente porque había problemas con las tramitaciones, es porque se solicitó entonces una nueva normativa», apuntó Antonio Millares Jorge, miembro de la comisión permanente de la coordinadora estatal de Comisiones Obreras.
Para los representantes de la Policía Local, además de implicar un retroceso, la sentencia del TSXG -resultado de un recurso de apelación de la Administración General del Estado- repercutirá directamente en el desarrollo de la labor policial. En este sentido, Duarte aclaró que el servicio de paisano se realiza semanalmente y resulta imprescindible para el control nocturno, o en temas tan sensibles como los menores o la violencia de género, en los que la eficacia de las identificaciones depende en buena medida de que no vayan uniformados.
En consecuencia, los representantes laborales de la Policía Local han solicitado una reunión con la Subdelegación del Gobierno para manifestar su oposición al fallo del Supremo. Del mismo modo, anuncian que están dispuestos a denunciar a través de Comisiones Obreras cualquier traba puesta desde la Delegación del Gobierno para el desarrollo de su trabajo. «No vamos a pasar por la misma situación del 2010», subrayó Millares.