'Caso cerrado': confiesan el brutal asesinato, imputan a una policía local y localizan dos armas
La Policía Nacional 'cierra el círculo' tras localizar el arma utilizada en el crimen y otra más / Detienen a una tercera mujer, un agente de la Policía Local de León de 41 años / La madre confiesa el crimen y asegura haber planeado el crimen hasta en cinco ocasiones / Montserrat González da positivo en la prueba de parafina / El arma empleada es un revolver de la marca Taurus del calibre 22
J.C. / A.C. 14/05/2014
El Ayuntamiento de León confirma la implicación de una policía local en el caso del crimen de Isabel Carrasco
Policialmente el caso del asesinato de Isabel Carrasco, presidenta de la Diputación de León y del PP provincial, puede darse por cerrado. La investigación de la Policía Nacional ha avanzado con celeridad y el juez dispondrá en las próximas horas de toda la documentación, pruebas y el material que esclarece lo sucedido en la tarde del pasado lunes.
Los pasos dados en las últimas horas han sido determinantes para poner fin a este caso y cerrar -al menos en el capítulo de la investigación- un episodio dramático en la historia de León.
La Policía Nacional levantó a última hora de este martes el dispositivo puesto en marcha para la localización del arma empleada en el crimen. Ese dispositivo dio sus frutos y permitió localizar no una, sino dos pistolas, aunque sólo una de ellas se empleó en la mortal acción.
La primera de las armas (la empleada en el crimen, un revólver de calibre 22 y conocida en el argot policial como 'arma de señorita') fue localizada "en el transcurso de la investigación" según han asegurado a leonoticias.com fuentes policiales, mientras que la segunda se localizó en la vivienda de Montserrat Triana Martínez González, hija de María Montserrat González Fernández, quien fue la autora material de los disparos.
Análisis de balística
El arma utilizada está siendo analizada por balísitica con el objetivo de determinar que coincide exactamente con la utilizada en esa fatídica tarde del lunes.
Pero la investigación ha ido más allá. Una tercera mujer ha sido interrogada en las últimas horas y, presumiblemente, ha sido imputada aunque no se ha dado a conocer el grado de implicación en el suceso. Según fuentes de la investigación pudo haber actuado como encubridora, pero este último aspecto no ha sido confirmado.
Se trataría, según la investigación, de una agente de la Policía Local, Raquel G. de 41 años de edad, cuyo grado de actuación no está claro -pudo ser receptora del arma y la entregó a última hora del martes directamente o a través de su abogado-. La agente que se encuentra en la Comisaría de Policía de León habría asegurado que era amiga de la hija de la principal acusada por el asesinato de Isabel Carrasco y según su primera declaración ésta dejó el arma en el maletero de su vehículo.
Supuestamente, sucedió en el brevísimo lapsus que medió entre el asesinato de la presidenta de la Diputación de León, a las 17.17 horas, y las 17.30 horas del lunes, cuando fue detenida Triana Martínez, después de que se volviera a encontrar con su madre junto a su coche tras haberse separado durante la fuga. Fue en ese lugar donde ella localizó el arma horas después del crimen, según su versión.
La agente aseguró que no se dio cuenta de la presencia de la bandolera en la parte de atrás de su coche hasta la tarde del martes y que, por eso, no avisó antes.
El arma en sí es un revólver, lo que explica que no se hallaran casquillos en la escena del crimen, de la marca Taurus, al que faltan tres de las seis balas. El arma tiene el número de serie borrado, lo que avala la tesis inicial de los investigadores de que ésta fue comprada por madre e hija en el mercado negro, ya que ninguna de las dos tenían licencia de armas y el marido y padre de ambas, el inspector jefe de Astorga, no tenía más que su pistola reglamentaria.
Confesión del crimen
Sea como fuere, la policía municipal fue detenida (al menos en un primer momento) y se investiga su verdadera relación con los hechos, ya que a los investigadores no les cuadra demasiado la rocambolesca versión de la bandolera en el asiento de atrás. Además, según fuentes del caso, la agente local además ha incurrido en su declaración en varias incongruencias y contradicciones, que todavía no ha sido capaz de aclarar.
Un giro inesperado a la que se sumó la declaración de Montserrat González que, tras 48 horas en dependencias policiales, confesó haber sido la autora material de los disparos y lo había hecho por una “inquina” personal que tenía contra la presidenta de la Diputación de León desde hacía años.
Hasta ese momento, la detenida se había negado a colaborar, llegando a negar en reiteradas ocasiones su implicación en el crimen hasta verse totalmente acorralada por las múltiples evidencias. Una confesión esperada por los agentes que recuerdan que tras 48 horas una persona sin experiencia se derrumba.
Así, la presión finalmente empujó a Montserrat González ha asegurar completamente entera, según han señalado a leonoticias.com, que había sido la autora material de los disparos e incluso que hasta en cinco ocasiones llegó a planear el crimen de Isabel Carrasco.
A disposición judicial
Todas esas pruebas unidas al 'positivo' de María Montserrat González Fernández, de 55 años, en la prueba de parafina permiten dar por cerrado el caso por el asesinato de quien fuera presidenta de la Diputación de León y una de las políticas de mayor peso en la historia reciente a nivel provincial.
En las próximas horas las dos principales encausadas en este caso pasarán a disposición judicial para su posterior ingreso en prisión.