Una juez cita a Romero como imputado en un presunto delito de prevaricación
El Juzgado de Primera Instancia a Intrucción número 1 de Moguer admite a trámite la querella presentada por la Policía Local contra Romero
HUELVA. El conflicto abierto entre la Policía Local de Palos de la Frontera y el alcalde, Carmelo Romero (PP), ha estado adormecido en los últimos meses y vuelve a recrudecerse. Ayer, se conocía un auto del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Moguer, dictado a raíz de la denuncia presentada por los agentes hace ya tres meses, en el que su titular anuncia la admisión a trámite de la querella y cita a declarar a Romero en calidad de imputado. La comparecencia del primer edil e Palos ante el juez será el próximo 20 de febrero.
El auto, que se reproduce en esta página, anuncia la apertura de diligencias de investigación que comenzarán, precisamente, con la declaración de Carmelo Romero y considera que los hechos que han puesto los agentes en su conocimiento podrían ser constitutivos de un delito de prevaricación.
La querella, a la que se suma también personal laboral del Ayuntamiento, ha sido presentada a título personal por los efectivos, sin la actuación (al menos de momento) de ninguna organización sindical.
El enfrentamiento entre la Policía Local y el alcalde arrastra desde hace a?os y se ha venido evidenciando en la apertura intermitente de expedientes a los agentes por parte del Ayuntamiento, medidas que han tenido respuesta inmediata en los tribunales de Justicia.
Fuentes consultadas por este diario indicaron que, en la denuncia, se acusa al alcalde no sólo de prevaricación sino también de abuso de autoridad, por ordenar a personal no autorizado el ejercicio de funciones que no son de su competencia, ejercer acoso contra los agentes e incumplir una sentencia de Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).
La versión oficiosa del enfrentamiento entre la plantilla de la Policía Local 81 (efectivos) y el regidor de Palos apunta que se han venido desarrollando persecuenciones contra los agentes y que incluso, por orden de Carmelo Romero, se les ha enviado a trabajar al cementerio o la depuradora.
Por otra parte, está la cuestión económica y la no renovación del convenio colectivo que se firmó para el cuerpo policial bajo el mandato de la ex alcaldesa Pilar Pulgar.
El entendimiento a estas altura del conflicto es prácticamente imposible porque se considera que Romero "no tiene voluntad de negociar". Es más, según las fuentes consultadas, el pasado verano hubo un conato de acercamiento que finalmente, después de cuatro meses, se fue al traste porque desde el Consistorio no se produjo gesto alguno de posibilictar uina salida negociada.
Romero, de momento, ha optado por guardar silencio sobre las causas de la su imputación judicial y sobre la declaración que tendrá que realizar ante la autoridad judicial en dos semanas.
Después de un periodo de silencio, la guerra entre la plantilla de la Policía Local de Palos y su alcalde ha estallado de nuevo, una vez más en los tribunales pero, en esta ocasión, con la imputación de Carmelo Romero en un supuesto delito de prevaricación.
A ver si es verdad que como mínimo lo inabilitan por muchos a?os y se le acaba el rollo.

Un saludo y cuidaros mucho... sobre todo de los políticos.