GRANADA
Un grupo de policías gana casi tanto como los ediles a los que protegen
Los agentes locales que escoltan a l0s concejales cobran un 50% más que el resto por las horas extras
CARLOS MORÁN Y QUICO CHIRINO
El alcalde de la ciudad costera de Motril -50.000 habitantes- o el de la localidad de Loja -más de 20.000 vecinos- ganan lo mismo que varios de los miembros de la Policía Local de Granada -son un grupo reducido- que tienen encomendada la misión de velar por la seguridad de los ediles de la capital.
Es más, algunos de estos escoltas logran, gracias a las horas extras, sueldos que poco tienen que envidiar a los de las personalidades a las que protegen. El jefe y el subordinado, casi emparejados en la cuantía de las nóminas. Parece el sue?o de cualquier defensor de la igualitarismo. Lo que ocurre es que los beneficiarios son una minoría. Es por ahí por donde llegan las suspicacias, que las hay.
La Policía Local de Granada es un foco de tensiones constante. Y el problema no es de ahora: viene de lejos. Ahora son los 'hipersalarios' de determinados funcionarios los que están levantando ampollas. Los pasquines de queja ya han echado a volar. El tema del dinero es siempre especialmente delicado y, en ese caso, parece que las diferencias entre unos y otros son excesivas.
Los datos
Según fuentes internas del Ayuntamiento, un agente 'raso' de la guardia urbana gana, en bruto, algo más de 31.000 euros al a?o. Esa cantidad ya incluiría el llamado 'anexo quinto' -80 horas de más que hacen los policías locales con respecto al resto de los funcionarios municipales- y otras 35 horas extras anuales voluntarias.
El salario anual, también bruto, de un policía de la misma plantilla dedicado a tareas de custodia de responsables políticos asciende a casi 34.900 euros porque tienen dedicación plena.
Pues bien, según los medios consultados, hay guardaespaldas que, además de todo lo anterior, han sumado más de 400 horas extraordinarias en un a?o -en algún caso, puede que menos-, que se pagan, de media, a unos 28 euros -las normales se cotizan a unos 24 euros y las nocturnas, a 34-. Resultado: hay escoltas que, por dedicarse a esa labor más allá del horario normal, ganan un 50% más que el resto de los policías locales. Alrededor de dos millones de las antiguas pesetas. Y las estimaciones que aquí se hacen, según indicaron las fuentes informantes, pueden ser modestas: nada impide que estos funcionarios puedan sumar más horas extras trabajando en los dispositivos 'antibotellón' o acudiendo a echar una mano a Churriana de la Vega: ambos consistorios tienen firmado un convenio que permite a los policías de Granada cubrir las carencias que puedan producirse en la localidad del Área Metropolitana.
Pero esto son sólo conjeturas.
Lo que sí parece acreditado es que hay escoltas que rozan los 50.000 euros anuales -una 'marca' a la que sólo se acercarían un pu?ado de agentes: no es algo general-, que es lo que vienen a percibir -euro arriba, euro abajo- los alcaldes de Motril o Loja.
Nóminas de los políticos
Si se comparan esas retribuciones con las de sus 'protegidos', las diferencias no son abismales. Ni mucho menos.
El alcalde de Granada, José Torres Hurtado, que terminó su anterior mandato con unos emolumentos de 56.620 euros brutos anuales, se subió el suelo hasta los 65.977 euros nada más resultar reelegido. Si no hubiese adoptado esa -impopular- decisión ahora tendría casi el mismo estatus económico que sus escoltas.
Todos los corporativos con dedicación exclusiva -también los socialistas- perciben 52.517 euros al a?o, frente a los 37.040 que empezaron cobrando los concejales de la oposición al inicio del anterior mandato. Los tenientes de alcalde, que arrancaron en 2003 con unas retribuciones de 48.720 euros anuales, llegan ahora a los 58.011. Un poco más que los policías que les cubren las espaldas.
Este periódico contactó ayer con varias personas que tuvieron responsabilidades en el gobierno tripartito que presidió el socialista José Moratalla y todas ellas dijeron que, en aquel tiempo, no se pagaban horas extras a los escoltas que, además, eran menos que ahora. Si alguna vez su jornada laboral se estiraba más de los estipulado, el Ayuntamiento les compensaba con descansos.
Sea como fuere, lo cierto es que el Consistorio está tieso, a dos velas, y que buena parte del presupuesto se gasta en abonar las nóminas de los trabajadores municipales.
Ya hay quien asegura que la culpa, al menos en parte, es de la hemorragia de horas extras.
Más gasto en sueldos
Las cuentas para 2008 ascienden a poco más de 227 millones de euros, el 80% de los cuales se irá en gastos corrientes y en sueldos. Estos últimos se llevarán 90 millones, un 14% más que en 2007. Es la subida más alta en todos los capítulos de los presupuestos.
Los políticos, que son 27, costarán al erario público 1.853.535 euros en 2008.
Sus escoltas -los de los que los tienen-, al paso que van, parece que no se quedarán demasiado lejos.