Así es el cuartel que tiene la Guardia Civil en Torreviejahttp://fotos01.diarioinformacion.com/fotos/noticias/646x260/2011-03-20_IMG_2011-03-13_01.47.25__D2801RESTO.jpg.jpgLa subdelegada del Gobierno, Encarna Llinares, aseguró esta semana en Torrevieja que el cuartel de la Guardia Civil está en buen estado y que todos mienten cuando hablan de desperfectos. Esta es la realidad.
A los cuarteles de la Guardia Civil no se puede entrar así como así. No es fácil que los agentes abran sus puertas y den a conocer su realidad; entre otros motivos, porque lo tienen prohibido al tratarse de un edificio militar. Pero las paredes hablan.
Torrevieja se encuentra, probablemente, con uno de los edificios en peor estado de toda la Comunidad Valenciana que no se repara sencillamente porque no hay presupuesto, lo que no ha sido óbice para que los agentes sigan trabajando y atendiendo a los ciudadanos en unas circunstancias que pueden considerarse vergonzosas. Un guardia se dirigió a este periódico hace meses para denunciar que ha abierto la puerta de alguna celda en verano y lo primero que ha visto salir son cucarachas.
Pero esta realidad no existe para la Subdelegación del Gobierno. Como tampoco los despachos sin aire acondicionado, los ciudadanos que tienen que ser citados de un día para otro a fin de que presenten sus denuncias o los extranjeros que sólo cuentan con intérprete algún día que otro de la semana y que se acumulan a la espera de intérprete.
La Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC), uno de los colectivos que defiende a los agentes y su trabajo diario, asegura que buena parte de los males actuales se deben al actual responsable del puesto, "que ha conseguido batir el record de expedientes disciplinarios y bajas por enfermedad de los guardias civiles a sus órdenes y, especialmente, las bajas de carácter psicológico". Ante esta situación, "el desánimo y el miedo a sus represalias cunden entre los agentes a sus órdenes". Pero el principal problema del día a día es el de las infraestructuras y eso es algo que sólo se resuelve con presupuesto, algo de lo que se carece en estos momentos. Las deficiencias que hay son muchas. "Chalecos antibala obsoletos, linternas que encienden a base de golpes, radioteléfonos del tiempo de Marconi, vehículos casi imposible de poner en marcha y con nulas medidas de seguridad e higiene en su interior, carencia total de guantes adecuados para el registro..." y así un sinfín de deficiencias que han llevado a muchos profesionales a pedir el traslado a nuevos destinos, aseguran desde la AUGC.
Esta asociación se pregunta cómo la subdelegada del Gobierno puede acusarles de mentir cuando, "la oficina de atención al ciudadano mide entre 6 y 8 metros cuadrados, la de atención a las víctimas de violencia familiar, apenas mide cuatro metros y en ella han de apañarse dos agentes y los ciudadanos y los vestuarios para los agentes carecen de taquillas suficientes y algunos de ellos han optado por comprar una de lona". En cambio, afirman, "las oficinas de los oficiales miden entre 20 y 30 metros cuadrados, con todas las comodidades en mobiliario, aire acondicionado, transmisiones y ordenadores".