Autor Tema: De gamberros, vándalos y convivencias  (Leído 173641 veces)

Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222527
Re: De gamberros, vándalos y convivencias
« Respuesta #620 en: 24 de Agosto de 2019, 06:20:15 am »


La llamada de madrugada de un adolescente permite detener a un pirómano en Móstoles


El supuesto incendiario había cometido seis fuegos e intentó huir por las vías del tren
Compartir en WhatsappOtrosConéctateEnviar por correo
Contenedores incendiados en Madrid, en una imagen de archivo.
Contenedores incendiados en Madrid, en una imagen de archivo.
F. JAVIER BARROSO
Madrid 23 AGO 2019 - 11:05   CEST
La llamada al 091 de la Policía Nacional por parte de un adolescente de 17 años ha permitido detener a un supuesto pirómano, un español de 48 años, acusado de cometer al menos seis incendios en la localidad madrileña de Móstoles. El menor avisó de que se estaba produciendo un fuego al lado de su domicilio y dio la descripción exacta del autor, que llegó a huir incluso por las vías del tren en un intento de no ser arrestado.



El adolescente, también de nacionalidad española, llamó alrededor de las cuatro de la mañana al 091 mientras el presunto pirómano estaba provocando el incendio en las inmediaciones de la avenida Olímpica. Al lugar se desplazaron varios coches patrullas, cuyos agentes comprobaron que había otros cinco incendios en lugares cercanos a negocios, medios de transporte, vehículos y viviendas, según fuentes policiales. Se hallaban en las inmediaciones de la calle del Pintor Velázquez con Educación, junto a una parada de autobús; en el número 25 de la calle de Benito Pérez Galdós, cercano a unos turismos; en la calle de Larra y en el Camino del Obispo.

La descripción de cómo era y cómo iba vestido el autor permitió que fuera localizado por los policías en los alrededores. En ese momento estaba intentando incendiar unos matorrales. Al ver a los agentes, salió corriendo a toda velocidad. Eso sí, fue arrestado al poco junto a la estación de cercanías de Renfe del Soto, pese a intentar huir por las vías del tren, con el consiguiente riesgo para su integridad física.


Los policías le cachearon y le intervinieron diverso material con el que causaba los incendios, como mecheros y cerillas.

Fuentes policiales han confirmado que la investigación permanece abierta y que no se descarta la imputación de más hechos similares al detenido. En los días previos y en la misma franja horaria se produjeron otros incendios similares en la localidad. El detenido carece de antecedentes policiales.



Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222527

Desconectado Celestino

  • Profesional
  • Diplodocus
  • **
  • Mensajes: 19431
Re: De gamberros, vándalos y convivencias
« Respuesta #622 en: 12 de Septiembre de 2019, 16:44:04 pm »
El único hijo de perra es el de la camiseta azul  :Enfadado_1

Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222527
Re: De gamberros, vándalos y convivencias
« Respuesta #623 en: 13 de Septiembre de 2019, 07:00:24 am »

Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222527
Re: De gamberros, vándalos y convivencias
« Respuesta #624 en: 15 de Septiembre de 2019, 06:53:31 am »
Pues será por que al cambiar de dueño el expediente iniciado ha de volver a iniciarse?


Los porteros, en la puerta del local, en Vallecas - ABC
El Patio de VallecasEl «after» infernal que aterroriza a un barrio de Madrid

Los vecinos de Vallecas no entienden cómo el Ayuntamiento no cierra el local, pese a las peleas y agresiones
Seguir
M. J. Álvarez
M. J. Álvarez
@mariajo_abc
MADRIDActualizado:
10/09/2019 13:40h

«No se puede vivir así». «Aquí no hay quien duerma». «No necesitamos despertador». «No hay derecho a soportar esta situación». «Estamos hasta las narices». Eso, entre otras cosas, dice un grupo de vecinos de varios edificios situados en la confluencia de la calle de Santa Julia con Puerto Alto en el casco viejo del distrito de Puente de Vallecas. El motivo de sus protestas y de su hartazgo es un «after» ilegal, denominado El Patio, que, según explican, lleva unos tres años haciéndoles la vida imposible.

Aluden al alboroto, griterío, a las peleas, agresiones con cuchilladas incluidas, robos... Que protagonizan los clientes del establecimiento. Este hace esquina, ya que está enclavado en el número 28 de la calle de Santa Julia y linda con el número 15 del inmueble situado en la calle Puerto Alto. Aunque son los bloques más afectados no son los únicos. «El local tiene licencia de bar-cafetería, pero obviamente no funciona como tal. El horario es restringido: de cinco o seis de la mañana hasta las nueve o diez», dicen.

«Abre unas cuatro horas al día y se ve que ese tiempo es suficiente para que consiga beneficios o hacer negocio, sino no lo entiendo», explica una de las afectadas, que prefiere no decir su nombre. Tienen miedo a las represalias de los encargados del local, todos dominicanos, y de los fornidos vigilantes que aparecen de vez en cuando en cuanto intuyen la presencia de los periodistas.

«Hasta cocinan dentro. Por eso, sabemos cuándo van a abrir, porque durante el día guisan», agrega María, nombre ficticio. El local estaba antes regentado por heavies que no les daban ni un solo problema, indica: «Desde que llegaron los dominicanos no nos falta ninguno».

Aunque han cambiado de dueño y ahora lo regenta una mujer, la situación no ha mejorado, ha ido a peor. «Cada dos por tres está aquí la Policía. El otro día vinieron media docena de coches patrulla y hasta el comisario. Creo que fue cuando se apuñalaron. Hemos denunciado en la Junta Municipal los olores, ya que, como no tienen una salida de humos en condiciones, se cuela por la escalera de uno de los edificios, por el patio interior y la calle, al margen del ruido, pero no hemos conseguido nada», dice esta mujer, resignada. Ella coincide con Pedro: «Les deben de avisar, porque cuando ha llegado el técnico de medioambiente no tenían cocina ni armaban follón»

Para colmo, ahora con el calor apenas pueden dormir. «Cuando te has echado el primer sueño, llegan en manada un grupo grande y se ponen a esperar a que abra el establecimiento. Hablan, gritan, consumen drogas, y así es imposible conciliar el sueño», tercia Manuel. Desde luego, los vecinos lo tienen muy claro. «Nos hacen la vida imposible. Y, si les llamas la atención, toman represalias. A unos que salieron al balcón a recriminar su actitud les lanzaron botellas», agrega Matías.
Consumiendo en la calle

«Yo no sé lo que hay dentro; solo te puedo decir que una mañana vino a primera hora de la mañana un técnico para instalarme la fibra óptica y estaba asustado. Me dijo que había chicos consumiendo drogas en el capó de los coches y peleándose», precisa.

Pedro, otro de los afectados, asevera: «A mí no me molesta que esté abierto. Lo que me molesta es vengan a las 5.30 un montón de chavales, que tiren los contenedores de basura, que pasen con el coche con la música a todo trapo...». Los residentes dicen que la encargada lo niega todo y que lo que ocurre es que les hemos cogido manía y que hay que respetar las diferencias. Y a nosotros, ¿quién nos respeta? No puede ser que nos tengamos que aguantar o que ir nosotros por su culpa después de llevar aquí toda la vida. No hay derecho», espeta Jesús.

Otra vecina dice que, además de trapicheos, las movidas entre los clientes del «after», hacen sus necesidades fuera y lo dejan todo perdido. «Yo no sé lo que hay ahí dentro, pero nada bueno. Hay niñas muy jovencitas», dice otra señora que tilda la situación de «horrorosa».

Tal es así que dice que ha cogido miedo. «En el portal no abrimos a nadie (damos fe de ello) si no estamos seguros de quienes son;no sabemos con quién nos vamos a encontrar. Esta zona está fatal; se ha deteriorado mucho: «Estoy deseando vender el piso e irme. Yeste punto negro –por el «after»– es la guinda al pastel»: «Yo, cuando salgo y vengo tarde, cojo un taxi hasta la puerta de casa y le digo que espere. A ver si el Ayuntamiento hace algo porque esto es inaguantable».



   


Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222527
Re: De gamberros, vándalos y convivencias
« Respuesta #625 en: 15 de Septiembre de 2019, 10:21:46 am »
«Los 'after' usan todo tipo de artimañas para burlar la normativa»
M. J. Álvarez / madrid
Día 11/02/2015 - 10.25h
Los dueños cambian el nombre de las sociedades y dilatan el cierre al máximo

Los «after» son un negocio que proporciona sustanciosos beneficios a sus responsables. En general, suelen cobrar 10 euros por la entrada o por la copa. El público los conoce por el boca oreja y también por los «tarjeteros» que se apostan en la puerta de algunas discotecas. Lo habitual es que un empresario tenga varios negocios de este tipo en las zonas de ocio de la capital. La actividad de estos locales no está regulada por la Ley Regional de Espectáculos Públicos (Lepar), dado que no existe una licencia para este tipo de establecimientos que sirven copas, ponen música y abren sus puertas cuando cierran las discotecas. «Son ilegales», zanja Vicente Pizcueta, portavoz de Noche Madrid y coordinador de la Plataforma por el Ocio, el Turismo y la Hostelería de Madrid.

Para burlar la normativa, una de las prácticas que emplean es crear una sociedad limitada con el capital mínimo permitido, 3.000 euros, a nombre de un testaferro insolvente, que ejerce también como administrador único. A cambio, le pagan una pequeña cantidad. Después, una vez que se amontonan las denuncias y las infracciones, como no tienen fondos en la empresa, no las pagan y prosiguen con su actividad, incumpliendo la normativa en materia de ruido, de horarios, etc., hasta que les llega la orden de clausura, indican fuentes policiales y vecinales. «Se suelen marchar antes, a veces dejando un pufo por el alquiler cuando el local está ya "quemado"».

Otra de las artimañas que emplean es cambiar el nombre de la sociedad y del titular para que el «after» siga funcionando. Con ello evitan tener que pagar las multas al ayuntamiento por las infracciones del anterior responsable.

A veces tienen dos sociedades, una donde facturan, y otra, sin fondos, para no abonar las multas, según las mismas fuentes. «Tienen buenos abogados, se conocen todos los vericuetos legales y los burlan todo lo que pueden», afirman varios residentes, como Manuela y Elías del barrio de Malasaña. «La propia Policía reconoce que ni siquiera puede obligarles a bajar la música. Eso nos causa una gran impotencia».

Esta pareja afirma que tiene constancia de que la Policía Municipal tienen «fichados» varios «after» pero hasta que no finalice el procedimiento que conlleve la clausura, «no hay nada que hacer». La sanciones no implican el cierre, este se produce en función de la gravedad de la infracción cometida.

Lo habitual es que estos establecimientos tengan licencia de bar y por ello, a pesar de las denuncias y de la acumulación de expedientes, su clausura no es rápida a no ser que carezcan de licencia de actividad o cometan una falta muy grave. Entre estas se encuentran superar el aforo máximo permitido cuando conlleve un grave riesgo para personas o bienes, vender alcohol a menores, permitir el consumo de drogas o incumplir las condiciones de seguridad.

Los afectados se quejan de la lentitud del proceso para conseguir el cierre. «El mínimo son dos o tres años. Los encargados de los locales actúan como mafias, alquilan locales de hostelería, van recurriendo todas las sanciones o requerimientos para subsanar deficiencias y así van dilatando el proceso. Luego se buscan otro lugar y vuelta a empezar».

«Tener un “after” debajo de tu casa es como tener un grano en el culo. Nos hacen la vida imposible, se saltan todas las normas a la torera y nos provocan una gran frustración». «Habría que agilizar los trámites para que esta gente no haga lo que quiera», coinciden estos afectados.

Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222527

Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222527

Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222527
Re: De gamberros, vándalos y convivencias
« Respuesta #628 en: 06 de Octubre de 2019, 11:33:22 am »
Lo facil y rápido que es para algunos matar....


https://twitter.com/CPU_Police/status/1180464667971522561?s=19

Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222527
Re: De gamberros, vándalos y convivencias
« Respuesta #629 en: 07 de Octubre de 2019, 12:15:57 pm »


Crece el temor vecinal en Ciudad Lineal tras sufrir 250 incendios en un año


FCO. PELAYO 07.10.2019 - 06:43h
Los fuegos en el distrito se han incrementado en el último año: julio fue el mes más negro con 37 incendios.
La Policía Municipal estableció hace unos meses un dispositivo de vigilancia que finalizó el pasado mes de junio.

Un vehículo quedó calcinado en un incendio en la calle Poeta Blas de Otero.  FRAVM
Ciudad Lineal arde. Esta afirmación no es para nada baladí. En este distrito con 220.000 habitantes no hay semana en los últimos tiempos en la que no se produzca un incendio. La problemática con el fuego en la vía pública comenzó hace tres años, aunque ha sido en el último cuando la situación se ha hecho insostenible. En Ciudad Lineal se han registrado entre el 29 de agosto de 2018 y el 28 de agosto de este año hasta 250 incendios provocados por la quema de contenedores y otros elementos del mobiliario urbano (182), vehículos (38) y zonas verdes (30), según datos del cuerpo de Bomberos del Ayuntamiento de Madrid. El peor mes fue el pasado julio, con hasta 37 fuegos. "Estas cifras solo recogen los incendios en los que ha habido intervención de los bomberos pero se han producido más fuegos de los que tenemos constancia y que no aparecen en la estadística", precisan desde la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM).


Estos actos vandálicos han afectado a todo el distrito, aunque las zonas preferidas por los pirómanos han sido los barrios de Quintana, Pueblo Nuevo, Ascao, La Concepción y San Pascual. "Han pasado ya tres años desde comenzaron los incendios y todo ha ido a peor. ¿Deberíamos crear una brigadas de vigilancia nocturnas? Ya no sabemos qué hacer", afirma con una mezcla de resignación y temor Ana Martínez, presidenta de la asociación vecinal Quintana. "Los vecinos tienen miedo y muchos evitan aparcar por las noches sus coches y motocicletas junto a los contenedores", añade.

El temor ha aumentado desde el incendio que tuvo lugar el pasado 2 de julio en la calle Virgen del Lluc, donde el fuego pudo llegar al interior de las viviendas de no ser por la intervención de un vecino que vive en el bajo. "Teníamos el edificio en obras y prendieron fuego al contenedor en el que había corchopán y otros productos inflamables. Las llamas eran de tres metros y medio. Cualquier cambio de viento hubiese llevado el fuego a la malla de obra primero y luego a toda la fachada", cuenta Ángel Pérez, que logró sofocar el incendio con una manguera tras 12 angustiosos minutos. "No me lo pensé. Mi mujer y mis hijos estaban en la casa. Ahora vivimos un poco atemorizados. Algún día va a pasar algo", reconoce. 


El pasado 27 de septiembre quemaron un contenedor en la calle Elfo, afectando el fuego a una tienda y a la fachada del edificio.

Durante la segunda quincena de agosto y buena parte de septiembre los pirómanos no habían dado señales de vida. Pero a mediados del pasado mes volvieron a quemar un contenedor en la calle Manipa. También ha habido fuegos recientemente en la calle Mandarina, la calle Torrelaguna con Canal de Panamá y la calle Elfo con Alcalde López Casero. "Está claro que los pirómanos se habían tomado unas vacaciones y que ahora han vuelto a actuar. Ocurrió lo mismo en Semana Santa", señalan desde la FRAVM.

El concejal presidente de Ciudad Lineal, Ángel Niño, advirtió el pasado agosto que, según los indicios que se habían ido recabando, se estima que no son hechos puntuales "sino que es algo más organizado". Sin embargo, no hay certeza ninguna sobre sus posibles autores. Tan solo el testimonio de la vecina afectada por el incendio en la calle Virgen del Lluc, que aseguró que vio a dos personas encapuchadas salir corriendo tras arder el contenedor.

La Policía Municipal consideró al principio estos incendios como hechos aislados, pero luego sí estableció un dispositivo policial para intentar dar con los pirómanos. "En su momento hubo una instrucción para que se observase de cerca", señalan a 20minutos fuentes policiales, que confirman que desde el pasado mes de junio el operativo permanece inactivo. Este tipo de incendios está tipificado en el artículo 266 del Código Penal como un delito de daños, para el que se recoge una condena de uno a tres años de prisión. No obstante, la pena podría alcanza los cinco años de prisión si el juez considera que el daño afecta a un bien de dominio público.

Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222527

Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222527
Re: De gamberros, vándalos y convivencias
« Respuesta #631 en: 10 de Octubre de 2019, 09:59:22 am »


Crece el temor vecinal en Ciudad Lineal tras sufrir 250 incendios en un año


FCO. PELAYO 07.10.2019 - 06:43h
Los fuegos en el distrito se han incrementado en el último año: julio fue el mes más negro con 37 incendios.
La Policía Municipal estableció hace unos meses un dispositivo de vigilancia que finalizó el pasado mes de junio.

Un vehículo quedó calcinado en un incendio en la calle Poeta Blas de Otero.  FRAVM
Ciudad Lineal arde. Esta afirmación no es para nada baladí. En este distrito con 220.000 habitantes no hay semana en los últimos tiempos en la que no se produzca un incendio. La problemática con el fuego en la vía pública comenzó hace tres años, aunque ha sido en el último cuando la situación se ha hecho insostenible. En Ciudad Lineal se han registrado entre el 29 de agosto de 2018 y el 28 de agosto de este año hasta 250 incendios provocados por la quema de contenedores y otros elementos del mobiliario urbano (182), vehículos (38) y zonas verdes (30), según datos del cuerpo de Bomberos del Ayuntamiento de Madrid. El peor mes fue el pasado julio, con hasta 37 fuegos. "Estas cifras solo recogen los incendios en los que ha habido intervención de los bomberos pero se han producido más fuegos de los que tenemos constancia y que no aparecen en la estadística", precisan desde la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM).


Estos actos vandálicos han afectado a todo el distrito, aunque las zonas preferidas por los pirómanos han sido los barrios de Quintana, Pueblo Nuevo, Ascao, La Concepción y San Pascual. "Han pasado ya tres años desde comenzaron los incendios y todo ha ido a peor. ¿Deberíamos crear una brigadas de vigilancia nocturnas? Ya no sabemos qué hacer", afirma con una mezcla de resignación y temor Ana Martínez, presidenta de la asociación vecinal Quintana. "Los vecinos tienen miedo y muchos evitan aparcar por las noches sus coches y motocicletas junto a los contenedores", añade.

El temor ha aumentado desde el incendio que tuvo lugar el pasado 2 de julio en la calle Virgen del Lluc, donde el fuego pudo llegar al interior de las viviendas de no ser por la intervención de un vecino que vive en el bajo. "Teníamos el edificio en obras y prendieron fuego al contenedor en el que había corchopán y otros productos inflamables. Las llamas eran de tres metros y medio. Cualquier cambio de viento hubiese llevado el fuego a la malla de obra primero y luego a toda la fachada", cuenta Ángel Pérez, que logró sofocar el incendio con una manguera tras 12 angustiosos minutos. "No me lo pensé. Mi mujer y mis hijos estaban en la casa. Ahora vivimos un poco atemorizados. Algún día va a pasar algo", reconoce. 


El pasado 27 de septiembre quemaron un contenedor en la calle Elfo, afectando el fuego a una tienda y a la fachada del edificio.

Durante la segunda quincena de agosto y buena parte de septiembre los pirómanos no habían dado señales de vida. Pero a mediados del pasado mes volvieron a quemar un contenedor en la calle Manipa. También ha habido fuegos recientemente en la calle Mandarina, la calle Torrelaguna con Canal de Panamá y la calle Elfo con Alcalde López Casero. "Está claro que los pirómanos se habían tomado unas vacaciones y que ahora han vuelto a actuar. Ocurrió lo mismo en Semana Santa", señalan desde la FRAVM.

El concejal presidente de Ciudad Lineal, Ángel Niño, advirtió el pasado agosto que, según los indicios que se habían ido recabando, se estima que no son hechos puntuales "sino que es algo más organizado". Sin embargo, no hay certeza ninguna sobre sus posibles autores. Tan solo el testimonio de la vecina afectada por el incendio en la calle Virgen del Lluc, que aseguró que vio a dos personas encapuchadas salir corriendo tras arder el contenedor.

La Policía Municipal consideró al principio estos incendios como hechos aislados, pero luego sí estableció un dispositivo policial para intentar dar con los pirómanos. "En su momento hubo una instrucción para que se observase de cerca", señalan a 20minutos fuentes policiales, que confirman que desde el pasado mes de junio el operativo permanece inactivo. Este tipo de incendios está tipificado en el artículo 266 del Código Penal como un delito de daños, para el que se recoge una condena de uno a tres años de prisión. No obstante, la pena podría alcanza los cinco años de prisión si el juez considera que el daño afecta a un bien de dominio público.

Pudiera ser...pero es imposible probarlo.


https://twitter.com/policiademadrid/status/1182202144482643968?s=19

Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222527

Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222527
Re: De gamberros, vándalos y convivencias
« Respuesta #633 en: 11 de Octubre de 2019, 07:48:34 am »
Muy posiblemente sea....pero otra cosa es demostrarlo.


Detenido un pirómano acusado de haber quemado decenas de coches en San Blas-Canillejas
10 octubre, 2019 Gacetín Madrid



La Policía Municipal de Madrid ha conseguido detener a un importante pirómano que habría quemado decenas de coches en el distrito de San Blas-Canillejas. La colaboración ciudadana ha sido fundamental para su localización.

Agentes de la Unidad Integral del distrito de San Blas fueron requeridos por la Emisora Central para dirigirse a la calle Rufino González, ya que un individuo que iba en bicicleta había intentado quemar un coche estacionado en esa calle.

A la llegada de los policías, varios vecinos de la zona informaron que había cámaras de vigilancia en un taller de esa dirección y que podían haber captado imágenes del individuo que había echado un líquido sobre un coche y después había intentado prenderle fuego. Los policías observaron en ese vehículo que en el parabrisas se había vertido un líquido que olía a gasolina y que había un papel enrollado a modo de mecha.

Estos agentes se desplazan a una calle paralela, donde varios vecinos habían sofocado el fuego de otro coche con extintores. Se recopiló una serie de imágenes del pirómano, en una comunidad de vecinos de esa calle que también tienen cámaras de seguridad, que se desplazaba en bicicleta y vestía mallot y coulotte negros, informando a la emisora de la descripción del individuo y de la bicicleta.

Un poco más tarde, en el distrito de Ciudad Lineal, un ciclista impactó contra un coche patrulla, dándose a la fuga, por la calle Alcalá, dirección Ventas. los agentes proceden a seguirle dándose cuenta que el pantalón corto que lleva coincidía con el de la descripción del pirómano, siendo alcanzado en la calle Virgen de la Paz.

Se procedió a realizar un registro de la mochila que llevaba, comprobando que portaba ropa que coincidía con la descripción realizada por la emisora, haciendo acto de presencia el coche patrulla de San Blas-Canillejas que había visto las fotos, constatando que coincidían esas prendas.

Esta persona fue detenida y trasladada a dependencias policiales quedando a disposición judicial.






Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222527
Re: De gamberros, vándalos y convivencias
« Respuesta #634 en: 16 de Octubre de 2019, 18:34:59 pm »
La verdad es que la escena se presta a la pregunta...

https://twitter.com/RayDonovan8812/status/1184452899369373696?s=19

Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222527

Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222527
Re: De gamberros, vándalos y convivencias
« Respuesta #636 en: 21 de Octubre de 2019, 14:43:21 pm »



Detenido por tentativa de homicidio el hombre que lanzó un cohete al helicóptero de los Mossos


Comienza el goteo de arrestos conforme la policía identifica a los autores de actos vandálicos
Cohete lanzado por los manifestantes contra el helicóptero de los Mossos.
Cohete lanzado por los manifestantes contra el helicóptero de los Mossos.

 
El Periódico / Barcelona

Lunes, 21/10/2019 - 14:39
Comienza el goteo de detenciones conforme los Mossos d'Esquadra van identificado a los autores de distintos episodios violentos producidos durante los disturbios de la semana pasada.


Uno de los primeros en ser detenido es un individuo que ha sido identificado como el autor del lanzamiento de un cochete contra el helicótero de los Mossos en el cruce entre Gran Via y Balmes. El individuo está acusado de tentativa de homicidio y atentado ya que la acción puso en grave peligro a la aeronave. El lanzamiento del material pirotécnico se produjo cuando el helicóptero estaba volando bajo.


Y no es el único arresto. La Policia de la Generalitat también ha detenido a un joven relacionado con los incidentes del pasado lunes en el aeropuerto de El Prat. Allí hubo cargas policiales de los Mossos y de la Policía Nacional que terminaron con decenas de heridos, y se cancelaron más de un centenar de vuelos.

201 detenidos
Según han informado fuentes policiales, con estos dos arrestos se eleva a 201 la cifra total de detenidos en los últimos días por su presunta relación con los disturbios provocados en las movilizaciones contra la sentencia del Supremo en toda Cataluña.


Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222527
Re: De gamberros, vándalos y convivencias
« Respuesta #637 en: 27 de Octubre de 2019, 14:26:35 pm »


Se extiende la quema de contenedores por los barrios de Madrid



. Los vecinos de Vallehermoso alertan de la reincidencia de estos actos. La Policía Municipal apunta a que, «en la mayoría de casos, los provocan jóvenes de la zona»
Se extiende la quema de contenedores por los barrios de Madrid
Los vecinos asisten atónitos a la quema de un contenedor en la calle Meléndez Valdés
Belén V. Conquero
2019/10/27 | 03:17H.
«Los contenedores arden y poco podemos hacer. No sabemos quién está detrás, ni por qué escogen ciertas calles», afirma Belén Arsuaga, portavoz de la asociación vecinal Chamberí Se Defiende. Ni ella ni sus vecinos son capaces de explicar qué hay detrás de la quema de contenedores que se repite ciertos fines de semana en diferentes calles del barrio. «En cuanto algún vecino alerta de que hay fuego en uno de estos recipientes, llamamos a la Policía y no tardan en personarse. La intervención es rápida, pero identificar a el o los responsables es mucho más difícil», añade.


Lo cierto es que, aunque suelen escoger ubicaciones diferentes, «hay una calle en la que sí que se han repetido varios fuegos y hemos tenido que pedir a la Junta de Distrito que cambiara la ubicación de los contenedores». Se refiere a la calle Rodríguez San Pedro, esquina con la calle Vallehermoso. «Los quemaron varios días seguidos y, lo peor, es que estaban ubicados muy cerca de un portal acristalado y podía afectarle. Por eso pedimos que los trasladaran unos metros. No tardaron ni 48 horas en moverlos».

Desde que empezaron estos incidentes, tanto los agentes, como los vecinos del barrio prestan especial atención a nuevos incidentes. En especial, en zonas aledañas a la calle Escosura, Galileo o Meléndez Valdés, donde ya se han dado varios episodios.

Lo cierto es que, como ha podido confirmar LA RAZÓN, la quema de estos elementos urbanos no es una «moda» nueva, sino que otros distritos llevan desde principios de año lidiando con esta problemática, que no solo representa un coste para cada Junta de Distrito, si no que también perjudica a los residentes de la zona. De ahí, que en áreas como la de Ciudad Lineal, la Policía Municipal lleve meses controlando incidentes relacionados con estos hechos que, en ocasiones, también producen daños en vehículos aparcados en las inmediaciones del fuego.


En Ciudad Lineal, el problema lo llevan acarreando muchos meses, aunque la presión policial ha mejorado la situación. Según fuentes policiales, todo apunta a que los responsables de estos actos «son jóvenes vecinos de la zona». Como tienen registrado los agentes, «el problema empezó en enero en calles principalmente del barrio de La Elipa», reconocen. Durante los meses de enero y febrero «se contabilizaron un total de 13 contenedores ardiendo y varias motocicletas».

Los siguientes meses del año, «las quemas fueron más esporádicas», pero se tradujeron en la detención de cuatro personas «de diferentes nacionalidades» relacionadas con ellos.

A mediados de marzo, vuelven a repetirse los hechos en el barrio de La Elipa –pertenece a Ciudad Lineal–. Se produce un nuevo incendio en la calle María Teresa Sáenz de Heredia y los agentes pudieron identificar a una persona a la que sus propios vecinos «señalaron como presunto responsable y al cual se le intervienen dos sopletes y pastillas incendiarias», lo que llevaron a los agentes a detenerle.

Pero esta identificación normalmente no se produce porque los residentes de la zona se encuentran con el contenedor incendiado y no tienen forma de saber quién es el responsable. Así ocurrió en junio, también en una calle de Ciudad Lineal. Durante este mes se quemaron otros cinco contenedores que, por su proximidad, afectaron a cuatro coches aparcados en la vía pública. Durante estos hechos, «los vecinos solo pudieron confirmar la sospecha de que en el momento del fuego pasó un coche rojo cerca». Sin embargo, no se produjeron detenciones porque no lograron identificar a los responsables.


Como explicaron los propios vecinos del distrito de Ciudad Lineal, durante el mes de julio identificaron un total de 16 casos aseveraron desde la Asociación Vecinal La Merced de Quintana. La mayoría se produjeron cerca de la M-30. Uno de ellos tuvo lugar en la calle Santa Irene, mientras que otro se localizó en la calle Poeta Blas de Otero.

Presión policial

Esta entidad insiste en que, gracias al seguimiento policial, se está controlando el problema. Todos estos hechos, llevaron a que la asociación recopilara información gracias a las denuncias de los propios vecinos y buscaran dar visibilidad al problema en redes sociales con hashtags como #CiudadLinealSeQuema.

El propio Ayuntamiento se ha hecho cargo del problema que existe. La portavoz del Gobierno municipal, Inmaculada Sanz, señaló, durante una visita a la comisaría de Policía Municipal del distrito, que habría que «tener un especial cuidado» ya que, existía «una demanda vecinal» en relación a la oleada de incendios en el distrito. También manifestó su intención de pedir a la Policía Municipal que dé con los responsables de los incendios que, según sus palabras, «pueden poner en riesgo no solo el mobiliario urbano», sino también «la integridad de las personas».

Este mismo año, la Policía Municipal también identificó a un pirómano que actuaba por la zona de Latina y Carabanchel. Este individuo, en una sola madrugada quemó 13 contenedores, cuyas llamas además afectaron a siete vehículos. El detenido no tardaba ni quince minutos en iniciar un nuevo fuego. Fue esta impulsividad y los testimonios de diferentes testigos los que llevaron a los agentes hasta él.


Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222527

Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222527
Re: De gamberros, vándalos y convivencias
« Respuesta #639 en: 11 de Noviembre de 2019, 07:20:40 am »

Acoso a una vecina en la calle de Nicasio Gallego DE SAN BERNARDO

Chamberí: «No podemos vivir acosados en las puertas de nuestras casas»
Vecinos de José Marañón denuncian las amenazas y suciedad que causa un grupo expulsado de un comedor social

M. J. Álvarez
SEGUIR
Actualizado:11/11/2019 01:38h


Han presentado más de un centenar de firmas a la Junta Municipal de Chamberí. Están indignados por la situación que llevan sufriendo desde hace un año y cuatro meses y que algunos han denunciado. ¿El motivo? Un grupo de personas conflictivas que les amenazan, beben, hacen sus necesidades en plena calle, piden limosna de forma intimidatoria y hasta alguno ejerce de gorrilla. En caso de que se nieguen a darles dinero por la plaza de aparcamiento o les recriminen su actitud, toman represalias, indica un grupo de residentes.

Vacían las papeleras y extienden la basura por las aceras, estampan botellas de cristal contra el suelo para asustarles, les rompen los retrovisores o las jardineras de sus ventanas, duermen en la calle y guardan sus enseres sucios en una alcantarilla, entre otras cosas, afirman José y Joaquín. Todo ello ocurre en las calles de José Marañón y Nicasio Gallego, esquina a Santa Engracia y Covarrubias.

«Esto es insufrible; antes eran tres –dos hermanos y otro muy agresivo–; ahora han venido refuerzos y a veces son seis, ocho... Condicionan tu vida. Yo no quiero que cada vez que entre o salga de mi portal sola me dé miedo porque cinco borrachos estén ahí apostados, te insulten o lo qué les dé por hacer si eres mujer», dice Mónica.

Estos acosadores frecuentaban el Comedor Social del Centro de Día Luz Casanova, situado en el número 15 de la calle de José Marañón. Antes lo regentaban unas monjas, pero a raíz del cambio de titularidad, en julio de 2018, comenzaron las complicaciones. «No estamos en contra de las personas que van al comedor. No es aporofobia. Estamos en contra de los incívicos que nos hacen la vida imposible», recalca Juan.
«No tengas miedo»

Las personas conflictivas no pueden pisar el comedor. Fueron sancionadas de forma indefinida. «Como logran dinero han acampado aquí. Uno, el violento, tiene una orden de alejamiento que se salta cuando quiere; el jueves, sin ir más lejos. Al verme, me dijo de todo y le he denunciado por amenazas», relata Mónica. No es la primera vez ni la única que lo ha hecho.

«¿Qué te pasa? No tengas miedo. ¿No me vas a dar nada? Me soltó el más agresivo del grupo», explica Andrea. «Se abalanza hacia ti de tal modo que parece que te va a hacer algo. Una vez me agarró del tobillo. Mi sobrina llega tarde y temo por ella».

Todo ello se traduce en inseguridad, insalubridad y temor. «Los mayores evitan salir cuando están ellos; los padres, cuando van con sus hijos, les esquivan; las chicas temen que se metan con ellas. ¡Estamos estresados! Las navidades pasadas hasta hicieron hogueras en la calle», recalcan los afectados.

En septiembre entregaron las firmas que recogieron en verano al concejal presidente de la Junta Municipal de Chamberí, Javier Ramírez (PP), para que tome cartas en el asunto, tras la ignorancia del equipo de gobierno anterior. Ya se han reunido dos veces:el 9 y el 24 de octubre «Estamos esperanzados. Ahora hay más limpieza. Baldean a diario y la Policía Municipal y Nacional pasan cada dos por tres. Por eso están más nerviosos y alguno está perdiendo los papeles», agregan Tina y Marcelino.

Solicitan que se acabe con el asentamiento: «Ellos se niegan a ir a un albergue y no se les puede obligar, pero nosotros no tenemos porqué soportar esto. El comedor debería hacer algo». Mientras, afirman que van a dar un oportunidad a la Administración.