El disparo en la Puerta Sol me ha destrozado la vida»
Antonio está arruinado por los gastos que le ha supuesto perder el ojo por una bala rebotada en un incidente en Madrid
TATIANA G. RIVAS / MADRID
Día 11/03/2012 - 10.07h
ABC / F.G.
El 6 de mayo de 2010, Antonio Castro Pimentel, su mujer y su hija paseaban por el centro de Madrid después de visitar una feria de muestras de ventanas. Eran las 20.45 de la tarde, «imposible no recordar esa hora», señala Antonio. «Nos íbamos a tomar unos refrescos en la terraza que hay nada más comenzar la calle Arenal. Nos dirigimos hacia el bar desde La Mallorquina. Cuando asomamos por Arenal escuchamos tres disparos. Giré la cabeza hacia la izquierda y vi cómo venía hacia mí una bala».
Mala fortuna Un disparo de un Policía que reducía a un hombre penetró por su ojo izquierdo en mayo de 2010
Un agente municipal —que fue absuelto— disparó tres veces contra un hombre que se abalanzó hacia él. El proyectil atravesó el cuerpo del objetivo, la bala cayó al suelo de pico, se inclinó hacia arriba y penetró por el ojo izquierdo de Antonio. Un fuerte dolor se adueñó de él. «Gritaba que me habían matado», rememora. Desde ese momento, su vida cambió. «El disparo me ha destrozado la vida. Estoy arruinado. No he vivido nada más duro», lamenta.
Antonio permaneció durante cinco días en coma inducido después de someterse a una operación de seis horas para extraerle el ojo y la bala de la cabeza. Ya ha perdido el gusto y el olfato a consecuencia del incidente. Ahora tiene que volver a pasar por quirófano sumando su quinta operación: «Me tienen que rehacer la órbita del ojo; se me ha hundido». Este hombre tiene en Priego de Córdoba, donde reside, una empresa de carpintería de ventanas. «Ahora estoy sin cobrar nada y asumiendo todos los gastos desde que se produjo el accidente, 18.000 euros», apunta. Su pérdida de visión no le permite desarrollar las funciones que antes realizaba. Además, al ser autónomo, «en 2010 no me concedieron la invalidez y no tengo derecho a cobrar indemnización».
Antonio reclamó al Ayuntamiento mediante responsabilidad patrimonial 570.000 euros por daños y perjuicios. El pasado 3 de febrero, la Audiencia Provincial absolvió al policía municipal que disparó. La sentencia ya es firme, pues no la han recurrido. A partir de ahora, el Consistorio se ha de pronunciar al respecto. Desde el Área de Hacienda informan de que su intención es agilizar al máximo la resolución para darle respuesta.