Pueden irse los 2 de cena de empresa....así van limando
Condenan a un guardia civil por mandar «a tomar por culo» a su capitán
TRIBUNALES
La sentencia impone al acusado, que es cabo primero, una pena de tres meses y un día de prisión por haber cometido un delito de desobediencia
Francisco José Fajardo
FRANCISCO JOSÉ FAJARDO
Las Palmas de Gran Canaria
Domingo, 18 diciembre 2022, 01:00
Un cabo primero de la Guardia Civil ha sido condenado a tres meses y un día de cárcel por haber cometido un delito de desobediencia cometido sobre su capitán jefe. La sentencia, dictada de conformidad después de que el acusado reconociera los hechos, describe como este faltó al respeto a su superior en varias ocasiones en la Comandancia de Las Palmas de Gran Canaria y, entre otras expresiones, lo mandó «a tomar por culo», describe el Tribunal Territorial Militar.
Los hechos ocurrieron en el mes de octubre de 2020, cuando el capitán denunciante ejercía de jefe de la Unidad Orgánica de la Policía Judicial (UOPJ) de la capital grancanaria, con sede en la comandancia situada en la Vega de San José.
A las 14.36 horas del día 9, el mando recibió una llamada en su teléfono corporativo, desde el número fijo del acuartelamiento, que realizó el cabo primero condenado quien, acto seguido y sin mediar palabra -determina la sentencia-, comenzó a gritarle. El fallo revela que el acusado le dijo que qué era «eso del Ipecguci que me ha encargado», en referencia a los Informes Personal de Calificación del Guardia Civil que el capitán le había mandado a realizar. «¿Por qué tengo que hacerlo yo cuando hay un suboficial y a mí no me corresponde?», le preguntó, gritándole que «ya está bien de tocarme los cojones», «estoy hasta los huevos de que me esté puteando» y que él no iba a ser el responsable de los Ipecguci». También le exclamó que «todo» lo tenía «que hacer él» y que había «un brigada que es el jefe de la plana y a quien corresponde hacerlo», añadió. Todo esto después de que esa misma mañana el capitán hubiera realizado un despacho de correspondencia en el que ordenaba el nombramiento de un gestor para los Ipecguci de la unidad y decidiera que el responsable de los mismos tendría que ser el cabo primero.
Tras la llamada, el acusado «se negó rotundamente a cumplir con la orden», teniendo que nombrar el capitán a otro agente de la plana mayor para que realizara dicho cometido.
Ante esta situación y «por razón de la intensidad que estaba tomando la conversación telefónica», el capitán jefe indicó al cabo primero que «hablase con corrección y respeto, porque iba a tener que dar cuenta de este hecho a la superioridad», a lo que este último le respondió: «¿Qué me va a corregir? Pues venga que aquí lo espero. A ver si tiene huevos. No me toque los cojones mi capitán», cortando la llamada no sin antes gritarle «váyase a tomar por culo, a tomar por culo todo el mundo, que estoy hasta los cojones de todo el mundo».
Con la misma tónica
Ese mismo día 9 de octubre, a las 18.20 horas, el capitán jefe se personó en la oficina de la plana mayor de la Policía Judicial junto con un teniente «con intención de pedir explicaciones del motivo de su conducta al cabo primero», relata la sentencia. Pero el acusado «continuó en una actitud desafiante», alegando las mismas razones para no querer cumplir con la orden dada, e incluso «llegando a menospreciar a una de las guardias civiles de la plana mayor», de la que dijo que «no daba para más».
De estos hechos fueron testigos otros cuatro guardias civiles que se encontraban de servicio en ese momento y que declararon en calidad de testigos en este procedimiento.
Hay que destacar que consta en el sumario un informe médico-pericial del servicio de Psiquiatría del hospital central de la Defensa, Gómez Ulla, que determina que el acusado presentaba un trastorno depresivo mayor, cuyo inicio fue «previo a los presuntos hechos delictivos que se le imputan». Dicho trastorno persiste en la actualidad, por lo que el agente continua de baja médica.
Por este último motivo, la Sala entendió que el cabo primero tenía limitadas sus facultades volitivas y le aplicaron una rebaja en la condena.