El violador de Igualada se llevó el abrigo, el vestido y la ropa interior de la menor tras agredirla
Los Mossos lo cercan por la geolocalización de su teléfono, imágenes de su seguimiento a la víctima y restos de ADN de la joven en una chaqueta
GERMÁN GONZÁLEZ | BARCELONA
29/04/2022 08:00
"Lleva una vida solitaria, sin apenas contactos con otras personas o lazos sociales estables». De esta forma el Juzgado de Instrucción número 4 de Igualada describe a Brian Raimundo C.M., el principal sospechoso de la brutal violación e intento de asesinato de una menor a la salida de la discoteca Épic de la localidad la madrugada del pasado 1 de noviembre. Un cazador solitario que necesitaba sus trofeos, como así consta en el auto con el que el juez ordenó la prisión para el imputado. Y es que según consta en el sumario tras la brutal agresión que acabó con la víctima inconsciente en un descampado de un polígono industrial el sospechoso presuntamente se llevó su abrigo, que regaló a su entonces pareja, su vestido y la ropa interior dejándola desnuda en un lugar "inhóspito" y de poco tránsito.
Así la encontraron unos camioneros que pensaron en un principio que estaba muerta, aunque llamaron a los servicios de emergencia que la llevaron rápidamente al hospital. De no haberlo hecho con "celeridad y prontitud" el "resultado no hubiera sido otro que su muerte», explica el juez. La menor estuvo más de un mes ingresada en el hospital, fue intervenida quirúrgicamente varias veces por las heridas y le han quedado varias secuelas como pérdida de oído y visión.
El auto judicial es una muestra de cómo los Mossos estrecharon el cerco sobre el sospechoso durante meses. Entre las pruebas presentadas está el ADN de la menor encontrado en una chaqueta que el detenido tenía en su habitación, la ropa que usó esa misma noche y con la que aparece en varias imágenes de numerosas cámaras de seguridad de varios locales comerciales de la zona y la geolocalización de su teléfono móvil.
Sin embargo, fue a partir de una denuncia por daños en un vehículo que los Mossos revisaron las imágenes cerca de la zona de la discoteca como encontraron el sospechoso y pudieron realizar una reconstrucción de su recorrido, en las que incluso se ve cómo siguió a la víctima, quien también aparece. Iba con ropa que se encontró en su habitación y con la capucha de la sudadera puesta para evitar ser reconocido. El juez señala que atacó "sorpresivamente" a la menor y actuó solo, como remarcaron los Mossos en su informe.
La localización del móvil del sospechoso, que se conectó a varias antenas, indica que asaltó a la víctima entre las 6:20 y las 7:25 de la madrugada y que la violó y agredió durante 20 minutos, sin que ella pudiera defenderse. El acusado, de 20 años, tiene antecedentes por un abuso sexual a su hermana de siete años, una causa que se tramitó en los juzgados de menores de Girona, y por un presunto maltrato a su ex pareja. Por eso, el juez hace referencia a un informe aportado al procedimiento que alerta de su "alta peligrosidad y probabilidad de que vuelva a delinquir".
Hace seis años que llegó a España procedente de Bolivia por lo que el juzgado destaca hay riesgo de fuga ya que no tiene arraigo social y está en situación irregular en España. Por eso se ordena su ingreso en prisión ya que la pena de cárcel a la que se enfrenta puede superar los 30 años y existe la posibilidad de destruir pruebas, ya que no apareció la ropa de la víctima que se llevó. Según el juez, "es evidente que el hecho reviste la suficiente gravedad" para que entre en la cárcel de Brians, de forma provisional, y de momento bajo vigilancia ya que hay riesgo de suicidio según fuentes penitenciarias.
