LA TRAGEDIA DE LA FIESTA DE HALLOWEEN »
De Guindos culpa a una concejal del operativo policial del Madrid Arena
El exdelegado de Seguridad admite que hubo un botellón en los exteriores del recinto
Dice que la Policía Municipal no actuó "por falta de medios" y porque estaban "tranquilos"F. Javier Barroso Madrid 13 MAR 2013 - 14:11 CET9
Antonio de Guindos, a su llegada a los juzgados de la plaza Castilla. / CRISTÓBAL MANUEL
El exdelegado de Seguridad, Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, Antonio de Guindos, ha descargado esta mañana toda la responsabilidad del operativo policial montado para vigilar la fiesta del Madrid Arena en su exnúmero dos y entonces concejal de Seguridad, Fátima Núñez, hoy concejal-presidente del distrito de Carabanchel, según han avanzado los abogados de las acusaciones particulares. De Guindos, que dimitió tras ser imputado, ha declarado desde las diez de la mañana hasta alas 13.50 ante el juez Eduardo López-Palop, que investiga la muerte de cinco jóvenes en el evento celebrado en el pabellón municipal el 1 de noviembre.
En un receso, María José Siñériz, la abogada de la familia de una de las víctimas, Cristina Arce, y Abdon Núñez, letrado de los familiares de otra de las fallecidas, Belén Langdon, han indicado que De Guindos ha asegurado que desconocía los detalles del dispositivo policial porque las responsabilidades de seguridad estaban delegadas en Núñez. Según su testimonio, lo conoció con posterioridad, al leer los informes sobre dicha noche.
El exdelegado de Seguridad ha reconocido que se produjo un multitudinario botellón en los exteriores del recinto y que no se actuó "por falta de medios" y porque los jóvenes estaban "tranquilos". Ha admitido, como ya han apuntado muchos de los imputados, que no había policías suficientes para atajar la situación. Las imágenes de las cámaras de seguridad revelan que tan solo hubo cuatro coches de la Policía local.
El hermano del ministro de Economía no sabe cómo se pasó a un nivel alto de seguridad durante la noche, pero ha matizado que suelen ser "órdenes verbales" que se dan durante los eventos. De Guindos ha admitido así mismo, como ya explicó otro imputado, que no hubo una reunión preparatoria entre Ayuntamiento y Delegación del Gobierno, como sí se suele hacer con eventos similares.
Además del asunto del botellón, los abogados esperan que aclare por qué "no se hizo nada" para que la entrada de jóvenes al Madrid Arena fuera ordenada, como demuestran las imágenes grabadas por las cámaras de vigilancia del recinto. El exdelegado de Seguridad podrá detallar además quién inspeccionó el pabellón y por qué la empresa organizadora del evento, Diviertt, recibió "un trato especial", ya que se le cedió un espacio público, pero nadie comprobó las deficiencias del pabellón en materia de seguridad, ha resaltado Siñériz.
Las acusaciones particulares tienen previsto preguntarle por las llamadas al 112 realizadas por jóvenes particulares asistentes a la fiesta, que se quejaban de que había más gente de la que cabía en el Madrid Arena, decían que la gente se estaba ahogando y aseguraban que había una joven muerta. Siñériz ha indicado que la primera de estas llamadas al 112 se produjo a las 3.45 y en algunos casos recibieron por respuesta que se trasladaba el aviso a la Policía, por lo que se ha preguntado "por qué no acudieron".
De Guindos dimitió el 4 de febrero de su cargo de delegado de Medio Ambiente, Seguridad y Movilidad tras ser imputado por el suceso. En la comisión de investigación, el exdelegado avanzó que lo haría en el caso de que era imputado. En un recurso, el Consistorio impugnó la imputación de la cúpula de seguridad, pero el juez lo rechazó el 4 de marzo al estimar que hubo un fallo clamoroso en las medidas de seguridad.