Pero de esto siempre ha habido.
Desde, el confite, el chivato, el alcahuete, el que se aburre e informa de todo lo que ve con sus primáticos, el Policía frustrado, la Asociación de vecinos que te pone al tanto de las cosas chuscas del barrio.
A eso se le llama colaboración con las fuerzas del orden; que muchas veces viene muy bien.
Antiguamente existían los somatenes. Vecinos de una localidad afectos al régimen, que podían portar armas y en cierto modo ponían al tanto de lo que ocurría en el barrio o la ciudad a las autoridades.
Por cierto, sobre los somatenes, un miembro ejecutivo de Protección Civil autonómica se puso a bucear entre papelotes antiguos y se encontró un reglamento con su correspondiente organigrama que diseccionaba un Cuerpo de somatenes locales. Este miembro de P.Civil, me comentó que era una auténtica obra de arte.
Hablaba del modo de distribuirse en caso de calamidad pública, la forma de avisar a los ciudadanos para prevenirles de una catástrofe, sistema organizativo en caso de evacuación y de sustento de la población desplazada, etc.
Aparte de esto estaba la cuestión de colaborar con la Policía cuando se mosqueaban ante la presencia, desde un insurgente político, a un delincuente, etc.
Es decir los precursores de Protección Civil ( si se excluye la cuestión de informadores políticos ), pero sin los medios y movilidad que tienen ahora.