Lavapiés se subleva contra la Policía al arrestar a unos supuestos traficantes de drogas
Redacción - sábado 17 de marzo de 2012 a las 14:12 horas
Agentes de la Policía Nacional procedieron ayer a la detención de dos personas que impidieron el arresto, en el barrio de Lavapiés, de varios individuos que estaban siendo investigados por un delito contra la salud pública. Los detenidos participaron en un altercado, en el que llegaron a congregarse un centenar de personas para insultar y agredir a los policías actuantes. Cuatro de ellos resultaron heridos.
Los hechos sucedieron a las 23:30 horas del 16 de marzo en la plaza de La Corrala, de Lavapiés. Agentes especializados en la lucha contra la venta y el consumo de sustancias estupefacientes del distrito de Centro localizaron a un grupo de personas a las que estaban investigando con anterioridad. Los policías, que se encontraban sin uniformar, observaron durante varios minutos la actividad de este grupo, pudiendo comprobar y constatar que vendieron sustancia estupefaciente a varias personas, identificando incluso a uno de los compradores e incautándole la sustancia.
Ante las evidentes pruebas de la comisión de un delito, los agentes se acercaron al grupo de individuos, identificándose como funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía con su carné profesional y su placa emblema, para proceder a su detención. En este momento, las personas que allí se encontraban presentes comenzaron a alterarse y a convocar a más gente. El varón que había vendido la sustancia estupefaciente aprovechó el momento y consiguió huir del lugar.
Insultos y arengas para agredir a los agentes
Mientras, en la plaza ya se habían congregado casi un centenar de personas, que insistentemente proferían insultos a los policías actuantes observando los agentes como una de esas personas comenzó a arengar al resto para que atacaran a los agentes con frases como “si vamos todos juntos no podrán hacernos nada”, “Policía fuera del barrio” y diversos insultos. Los policías solicitaron apoyo a la Sala del 091 para que se personaran en el lugar diversos indicativos uniformados incluida la Unidad de Intervención Policial.
Otra de las personas allí presentes comenzó a golpear uno de los árboles que había en la plaza hasta que, pese a los avisos por parte de los policías de que depusiera su actitud, consiguió doblarlo, golpeando a uno de los agentes actuantes en la cabeza. Los policías procedieron entonces a su detención, informándole del motivo y de los derechos que le asisten como tal, pese a que los allí presentes intentaron evitarla interfiriendo en la intervención. Finalmente se detuvo a este hombre, indocumentado, P. A., de 37 años, natural de Senegal, con 18 antecedentes, la mayoría por delitos contra la salud pública, y al que en los archivos policiales le constan seis identidades diferentes. Además, tenía en vigor una reclamación dictada por el Juzgado Penal número 2 de Madrid, con fecha 8 de marzo.
“Vamos a machacarles”, gritaba uno de los detenidos
Cuando los agentes se disponían a abandonar el lugar observaron nuevamente al mismo varón de antes, que comenzó otra vez a incitar al resto de personas a agredir a los policías actuantes gritando frases como “todos juntos podremos con ellos, vamos a machacarles”, golpeando al tiempo las placas de metal que estaban en la plaza. El hombre siguió a los agentes y en un momento en el que se alejó de la muchedumbre los policías le solicitaron su documentación. A lo que el hombre se negó en reiteradas ocasiones, intentando marcharse del lugar.
Cuando uno de los agentes evitó que el hombre abandonara el lugar, éste se revolvió y agredió a uno de los policías actuantes, provocándole una fisura en el dedo, tirándole al suelo y propinándole mordiscos en los brazos. Una vez fue reducido y detenido, intentó autolesionarse, golpeándose la cabeza contra el suelo, lo que fue evitado por los agentes.
Ya en dependencias policiales, F.J.S.G. de 32 años y español, presentó como único documento de identificación, una tarjeta de crédito tipo Visa de una entidad bancaria y una universidad madrileña.
Los dos detenidos fueron trasladados a la Comisaría del Distrito Centro, ubicada en la calle Leganitos, donde minutos después se congregaron unas cincuenta personas lo que provocó que los agentes encargados de la seguridad de dicha dependencia policial tuvieran que pedir apoyo de la Unidad de Intervención Policial ante el evidente riesgo de producirse altercados.
A los detenidos se les imputan diversos delitos de lesiones, atentado contra agente de la autoridad y resistencia y desobediencia. Cuatro funcionarios policiales tuvieron que ser atendidos de diversas heridas y uno de ellos, con una fisura en un dedo, traslado a un centro hospitalario.
