La jueza manda a juicio a la mujer que acusó de violación a un famoso DJ de Ibiza
La mujer de 38 años, residente en Ibiza, que acusó en 2022 al conocido DJ Guy Gerber de drogarla mediante sumión química y violarla durante una fiesta celebrada en 2013 se sentará en el banquillo de los acusados, según ha sabido CASO ABIERTO, el canal de investigación y sucesos de Prensa Ibérica. La magistrada del juzgado de instrucción 3 de Ibiza ha ordenado que se abra juicio oral contra ella por un delito continuado de calumnias con publicidad.
El DJ israelí, popular por su trabajo en locales exclusivos de Ibiza, Londres, Los Ángeles y Nueva York, pide para ella dos años de cárcel y una indemnización de 150.000 euros por los daños morales que le han causado las publicaciones que la acusada hizo en 2022 a través de Instagram y Facebook, donde incluso invitaba a otras mujeres a que denunciaran, de manera anónima, posibles agresiones sexuales por parte del DJ.
Actuaciones canceladas
También le solicita 748.446 euros por el perjuicio económico que le ha causado, ya que como consecuencia de sus acusaciones, que nunca denunció ante la policía o la justicia, diversas discotecas y salas de Ibiza, Nápoles, Viena y Londres, entre otras, cancelaron las actuaciones que ya le tenían contratadas, de acuerdo con el escrito de acusación del DJ, representado por el abogado Jaime Campaner.
El DJ pide una indemnización de 150.000 euros y otros 748.446 euros por el dinero que ha dejado de ganar. Tras las acusaciones de la mujer, discotecas de Ibiza, Nápoles, Viena y Londres cancelaron sus actuaciones
"Sus afirmaciones, manifiestamente falsas, han generado un importante perjuicio reputacional al señor Gerber. La acusada, que nunca denunció formalmente los hechos, puso en marcha su campaña difamatoria a apenas unas horas de la fecha prevista para la inauguración del show Mirror Games en el Club Chinois de Ibiza, donde Gerber iba a actuar como residente desde junio hasta octubre de 2022".
Según la acusación, la mujer "incluso llegó a enviarle un correo al encargado del club en el que explicaba que, tras haberse mudado a la isla sentía que denunciar los hechos e iniciar una campaña mediática contra Gerber era lo correcto para poder alcanzar su paz interior".
Como ya adelantó CASO ABIERTO, la mujer asegura que coincidió con Guy Gerber en la casa de una amiga común en la isla griega de Mykonos, donde el productor pinchaba aquel 27 de julio de 2013.
Una raya
"Él estaba terminando de pinchar, así que me acerqué a sentarme a su lado y fue entonces cuando me ofreció, según me dijo, una raya de droga estimulante y un trago de alcohol. Como estaba obria, pensé que no sería tan mala idea", afirmó ella en sus cuentas de Instagram y Facebook.
"Unos 10 o 15 minutos después, vi que él se inclinaba para besarme. Me sentí totalmente impactada e inmediatamente quise apartarlo, pero ya no podía mover lo brazos, aunque mi cabeza gritara. Lo siguiente y último que recuerdo es que me rodeó con su brazo y me acompañó a su habitación mientras mi conciencia se apagaba hasta la oscuridad total como si fuera un interruptor de luz", añadía la mujer, que inició en la red una campaña contra el DJ titulada "Nuestro tiempo es ahora" coincidiendo con que el productor arrancaba temporada y gira musical en una famosa discoteca de Ibiza.
Desnuda, con hematomas
"Recuperé la conciencia unas cuatro o cinco horas más tarde, me desperté totalmente confundida, junto a él, desnuda en la cama, sin recuerdos de lo que había pasado y con un dolor intenso entre las piernas. Unos hematomas que se mantuvieron durante casi tres días y que aún recuerdo vívidamente nueve años después. Conseguí recomponerme (...) y volver al barco donde me alojaba, huyendo lo más rápido posible", relataba.
Rohypnol
La mujer explica que no denunció entonces la presunta agresión sexual a la policía porque no recordaba lo ocurrido y apunta a que el DJ la adormeció con "Rohypnol", un fármaco empleado en muchas violaciones para anular la voluntad de las víctimas: "Cuando llegué hasta donde (estaban) mis amigos, inmediatamente empecé a tener un colapso emocional, ya que me sentía realmente confundida y desorientada. En ese momento no tenía ni idea de lo que era el Rohypnol ni de cómo funcionaba, así que tuve que hacer memoria para dar sentido a cómo pasé de estar sobria y consumir un estimulante a acostarme con alguien que no deseaba y no tener ningún recuerdo de ello".
Afirmaba que "mi novio de entonces me llamó y me dijo que estaba teniendo horribles pesadillas sobre mí y me preguntó si había pasado algo malo. Le conté lo ocurrido… y pronto la disociación y la represión entraron en acción como defensa y, como muchas mujeres que han tenido estas experiencias, decidí hacer como si no hubiera pasado y seguir la vida como siempre. Tanto es así que incluso cuando volví a ver a Guy actué como si no hubiera pasado nada".
Explica su motivo para hacer pública ahora la agresión: "mi intención de seguir adelante con esto es evitar que más mujeres sean violadas como yo, y ayudar a Ibiza a convertirse en líder en tomar una posición contra esta cultura tóxica".
Sexo consentido
Guy Gerber difundió un comunicado en su cuenta de Instagram explicando su versión: "Esa noche estuve pinchando hasta muy tarde y sí, recuerdo a (nombre de la mujer), ya que ella se me acercó varias veces, tratando de llamar mi atención. Me pareció raro porque estaba con otro chico. La fiesta siguió, y en algún momento la mayoría de la gente se fue. Ella se quedó a mi lado y esperó a que todos se fueran a dormir".
El hombre añadía: "Terminamos yendo a una de las habitaciones de la villa y tuvimos sexo hasta que nos quedamos dormidos. Cuando nos despertamos, me dijo que se sentía culpable por su novio. Me sorprendió un poco porque ella me había dicho que estaban en una relación abierta. Después de eso, nunca mantuvimos contacto, pero la vi, al menos una vez, durante uno de mis shows".
Gerber, que afirma haber vivido "un infierno" estos años, asegura que la mujer era "totalmente consciente de sus actos" cuando tuvieron relaciones sexuales y prometió que lo demostraría en el juzgado. Ahora es ella quien deberá sentarse ante el juez, acusada de calumniar en redes, sin pruebas, al conocido DJ.