Simplemente hacerse una idea de lo que provocaria, incluso jugar con la salud de la gente. Un peque?o ejemplo.
La Sanidad andaluza no puede atender a un emigrante porque su historial médico está en catalán. Noticia firmada por M. Victoria Cobo,en ABC hoy, las negritas son mías. Y, por cierto, la culpa no es de la lengua catalana como quieren hacernos creer los separatistas, no nos equivoquemos. La culpa es del que la utiliza con mala intención premeditadamente:
Antonio Alonso emigró hace casi cuarenta a?os a Catalu?a para darle una vida mejor a sus hijos. Tras pasar allí toda su vida laboral, decidió volver a Granada, su provincia de origen. Pero se encontró con un problema que no esperaba. Y es que este emigrante retornado se ha quedado sin tratamiento por parte del Servicio Andaluz de Salud, porque su historial médico está redactado sólo en catalán. El problema surgió hace una semana, cuando Antonio, de 69 a?os, se dirigió al Ruiz de Alda para contactar con un especialista que le habían recomendado sus anteriores médicos del Hospital Bellvitge de Barcelona. En esta consulta se le pidió el informe médico en el que se detallaba su enfermedad, pues fue operado hace ocho a?os de un problema hepático y recibió un trasplante de hígado, por lo que suele someterse a revisiones cada seis meses.
Ante la petición del médico, Antonio miró en la carpeta en la que guarda sus papeles y extrajo el informe que parecía hacer alusión al trasplante. ?Cuando entregué el documento en la consulta, el especialista dijo que ya me podía marchar que él quería un informe en castellano?, se?ala Antonio, que no llegó a pasar consulta con el médico. ?No llegó a recibirme y claro, en el hospital no tienen traductor de catalán?, explica.
Antonio no entiende por qué le dieron los documentos escritos sólo en catalán, ya que ?la dirección del hospital de Barcelona sabía que me venía a Granada a vivir?. Lo cierto es que Antonio, que comprende que en el hospital granadino no puedan tratarle con garantías al no tener sus antecedentes clínicos, está siendo la víctima de un error o de la falta de coordinación entre los sistemas sanitarios regionales. Antonio envió el pasado lunes un fax al hospital de Bellvitge solicitando que traduzcan los documentos de su historial al castellano. De momento, no han obtenido respuesta.