Autor Tema: ELECCIONES  (Leído 1041348 veces)

Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222546
Re: ELECCIONES
« Respuesta #15700 en: 13 de Abril de 2022, 12:48:59 pm »

El PP de Feijóo sube en 3,4 puntos en el sondeo del CIS


BARÓMETRO DE ABRIL DEL CIS

El Partido Popular se sitúa en una intención de voto del 27,2% mientras que el PSOE pierde algo más de un punto y se queda en el 30,3%
Alberto Núñez Feijóo
Alberto Núñez Feijóo EFE/ Chema Moya

La Vanguardia

Barcelona

13/04/2022 12:43Actualizado a 13/04/2022 12:44
El PP remonta claramente según el último barómetro del CIS del mes de abril. El sondeo señala que el cambio en la dirección ha reportado más de tres puntos en el voto estimado hasta alcanzar el 27,2% según el institutito que dirige José Félix Tezanos. Por el contrario, el PSOE habría perdido algo más de un punto en esta estimación.

En el último barómetro publicado por el CIS, el PSOE y el PP obtenían el 31,5% y el 23,8% de estimación de voto, respectivamente, con una subida de más de dos puntos en ambas formaciones.

El sondeo de marzo fue el primero en el que se incorporó el nuevo modelo de cálculo anunciado por el presidente del CIS, José Félix Tezanos, el mismo que se ha utilizado también en esta nueva muestra de abril.


En marzo Vox ocupaba el tercer puesto, con un 16,3% de intención de voto y una subida de 1,5 puntos. Por el contrario Unidas Podemos se situaba por debajo de sus resultados de marzo con el 11,8% y Ciudadanos continuaba su descenso con un 3,2%.

Los grupos aliados del Gobierno, ERC, PNV y Bildu se mantenían estables sus resultados dentro de las variaciones técnicas de cada encuesta. Por bloques, la suma de los conservadores, esto es, Vox, PP, Ciudadanos, subía hasta el 43,3% mientras que el bloque progresista –PSOE, UP y Más País- se situaban en el 45,3%


Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222546
Re: ELECCIONES
« Respuesta #15701 en: 13 de Abril de 2022, 13:28:31 pm »
Como podemos observar el CIS sigue sin coincidir con el resto.

Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222546
Re: ELECCIONES
« Respuesta #15702 en: 13 de Abril de 2022, 14:23:20 pm »
Nunca entenderé que un tipo con una valoración baja sea el presidente de lo que se constituye como tercera fuerza política.

Desconectado Celestino

  • Profesional
  • Diplodocus
  • **
  • Mensajes: 19432
Re: ELECCIONES
« Respuesta #15703 en: 13 de Abril de 2022, 17:04:07 pm »
Espero que Feijoo valga tanto como le adulan los suyos y apague el ardor fascista de Vox y Ayuso.

Desconectado Ragnar

  • Experto I
  • **
  • Mensajes: 3981
Re: ELECCIONES
« Respuesta #15704 en: 14 de Abril de 2022, 00:42:32 am »
Y eso lo dice un panfleto de extrema izquierda...


No parecerse a la extrema derecha


Una de las causas del crecimiento del voto a Le Pen en Francia está relacionada con la asunción de vocabulario y de postulados de la extrema derecha por sectores institucionales no pertenencientes a ella

Olga Rodríguez

12 de abril de 2022 22:05h

Actualizado el 13/04/2022 09:27h


El resultado de la primera vuelta electoral en Francia, con Macron y Le Pen como finalistas, obliga a reflexionar de nuevo sobre el crecimiento de la extrema derecha en Europa y cómo sus postulados han sido en parte normalizados en diferentes espacios públicos. También el doble rasero hacia las personas refugiadas en función de su procedencia invita a preguntarse si los principios basados en la defensa de la democracia y la solidaridad son verdaderamente los únicos que operan en Europa.

El aumento de los apoyos electorales a la extrema derecha en Europa obedece a múltiples factores. Determinados medios de comunicación que dan cabida diaria en prime time a discursos racistas, de odio o deshumanizadores han contribuido a este escenario. Pero sería hipócrita ignorar el efecto de las políticas institucionales europeas que desde hace tiempo estigmatizan a las personas migrantes, encarcelándolas por el simple hecho de ser extranjeras, maltratándolas, deportándolas, negándoles derechos y tratándolas como un peligro.


Son prácticas racistas tan cotidianas que están ya normalizadas: redadas discriminatorias, arrestos arbitrarios, expulsiones, explotación, abusos laborales, persecución y señalamiento. Las políticas oficiales de los gobiernos europeos contribuyen a reforzar los discursos de la extrema derecha desde el momento en el que aceptan la elevación de los muros y la persecución para negar derechos humanos a los otros, o conceptos como guerra híbrida para referirse a la llegada a Polonia de personas procedentes de Afganistán, Siria o Irak, a quienes el Gobierno de Varsovia estigmatiza acusándolos de practicar zoofilia, de ser pedófilos y terroristas. Este tipo de marco normaliza un discurso que deshumaniza a las personas migrantes y que las concibe solo como armas arrojadizas.

El mensaje oficial aceptado por la Unión Europea a través de sus políticas migratorias es que la población extranjera –y sobre todo la negra, árabe o musulmana– es una potencial amenaza. En la diferencia de trato entre ucranianos y gente que huye de otras guerras hay un espaldarazo a la máxima racista de Vox o de Le Pen: unos son buenos, otros suponen un riesgo ante el cual hay que levantar muros y vallas de concertinas. Si la oficialidad europea lleva años admitiendo en sus prácticas parte de lo que la extrema derecha afirma –que los migrantes son un peligro–, ¿cómo no van a asumir ese racismo las sociedades?

Una de las causas del crecimiento electoral de la extrema derecha en Francia está relacionada con una asunción del vocabulario y de ciertas posiciones de la extrema derecha por sectores no pertenecientes a ella. Hace ya algunos años Macron declaró lo que llamó una guerra contra el separatismo islámico. Aquella declaración no vino acompañada de pedagogía antirracista, contribuyó a estigmatizar a una parte de la sociedad francesa –la musulmana– y a legitimar el desprecio hacia ella. Una vez normalizado un discurso que señalaba a los musulmanes como terroristas potenciales, ¿por qué iba a provocar indignación la islamofobia de Le Pen? Como recordaba una periodista francesa el pasado viernes en Hora 25, cuando los talibanes tomaron Kabul el pasado mes de agosto, las primera palabras de Macron “no fueron para los pobres afganos, sino para advertir sobre los peligros de la inmigración irregular, que es lo que un político de extrema derecha diría”.

El ministro del Interior de Macron, Gérald Darmanin, ha hecho de ello parte de su estrategia, posiblemente con la voluntad de robar electorado a Le Pen, sin importarle el riesgo que ello implica. Darmanin habla de la existencia de salvajismo en la sociedad de Francia –una terminología que emplea la extrema derecha–, ha cerrado decenas de mezquitas y señala la existencia de un “enemigo interior”, en referencia al islamismo. Hace año y medio accedió a protagonizar un debate televisivo con Marine Le Pen, en el que la acusó de ser demasiado blanda por haber dicho que no consideraba que el Islam en sí fuera un problema.

Miles de personas que huyen de guerras y de la pobreza son condenadas por Europa a recorrer rutas cada vez más peligrosas, diseñadas como tétricas yincanas que impiden trayectos seguros, externalizando fronteras para que mueran lejos de nuestros países y de nuestra conciencia. El camino a la justificación del crimen contra las personas migrantes está allanado. El racismo y el desprecio hacia ellas se consolida con las políticas institucionalizadas que las estigmatiza y discrimina. Ese es el mensaje claro y contundente que se está enviando a nuestra sociedades desde hace años y que requiere de un enorme despliegue de pedagogía y antirracismo para hacerle frente.

Combatir a la extrema derecha exige demostrar que sus postulados son dañinos, no asumirlos. Para evitar que la extrema derecha penetre en nuestras sociedades es imprescindible no parecerse a ella en ninguno de sus aspectos. Ese es uno de los mayores retos de este tiempo: conseguir que las instituciones no contribuyan a la banalidad del mal.

Desconectado Ragnar

  • Experto I
  • **
  • Mensajes: 3981
Re: ELECCIONES
« Respuesta #15705 en: 14 de Abril de 2022, 00:43:47 am »
Que raro  :partirse

Como podemos observar el CIS sigue sin coincidir con el resto.

Desconectado Ragnar

  • Experto I
  • **
  • Mensajes: 3981
Re: ELECCIONES
« Respuesta #15706 en: 14 de Abril de 2022, 00:45:44 am »
Nunca entenderé que un tipo con una valoración baja sea el presidente de lo que se constituye como tercera fuerza política.

El mismo CIS que decía que la izquierda ganaría en las elecciones de la CAM...

Desconectado Ragnar

  • Experto I
  • **
  • Mensajes: 3981
Re: ELECCIONES
« Respuesta #15707 en: 14 de Abril de 2022, 00:46:24 am »
Espero que Feijoo valga tanto como le adulan los suyos y apague el ardor fascista de Vox y Ayuso.

Tú sí que eres fascista.

Desconectado Ragnar

  • Experto I
  • **
  • Mensajes: 3981
Re: ELECCIONES
« Respuesta #15708 en: 14 de Abril de 2022, 01:50:13 am »
El Presidente del PP europeo que tome nota de lo ocurrido en Francia y se piense el criticar pactos de los suyos en los distintos países de la UE, que sólo hay que ver como le va a los suyos en su país y recientemente en Francia...

Citar
Conservadores y socialistas se hunden por debajo del 5% y certifican el fin del bipartidismo en Francia

El Partido Socialista ha recibido el 1,75% de los votos y Los Republicanos un 4,78%

https://amp.rtve.es/noticias/20220411/elecciones-francia-republicanos-partido-socialista-hunden-piden-voto-macron/2330100.shtml

Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222546
Re: ELECCIONES
« Respuesta #15709 en: 15 de Abril de 2022, 07:45:45 am »

Una ex diputada de Vox y la rival de Marín en las primarias de Ciudadanos crean dos partidos justo antes de las andaluzas


Luz Belinda Rodríguez, parlamentaria expulsada del grupo ultraderechista que ahora representa en la Cámara el programa de Falange Española, inscribe el partido Libres; y Elena Bago, ex de Ciudadanos, registra Somos Futuro


Luz Belinda Rodríguez "cierra capítulo" con Vox y se centra en "cumplir el compromiso" con sus votantes
Daniel Cela

14 de abril de 2022 21:45h

Actualizado el 15/04/2022 05:30h

Dos nuevos partidos políticos podrán concurrir a las próximas elecciones andaluzas: uno nace de la guerra interna en el grupo parlamentario Vox Andalucía y el otro de la guerra interna en Ciudadanos, socio del Gobierno de Juan Manuel Moreno. El primero se llama Libres (LB) y ha sido inscrito hace un mes en el registro de partidos políticos del Ministerio de Interior por la ex diputada de Vox, Luz Belinda Rodríguez, cabeza de lista por Almería en 2018.

Rodríguez abandonó Vox en enero de 2020 acusando a sus compañeros de acoso laboral (en paralelo, la dirección del grupo formalizó su expulsión, reprochándole que “no aportaba nada”). Desde entonces es parlamentaria no adscrita, junto a otros 11 diputados expulsados de Adelante Andalucía, y representa las consignas de Falange Española en el Parlamento andaluz.

El segundo partido recién creado se llama Somos Futuro y fue registrado también en el mes de marzo por Elena Bago, afiliada onubense de Ciudadanos que disputó la candidatura naranja en las últimas elecciones andaluzas -y en las primarias a la dirección del partido- al vicepresidente de la Junta y líder regional, Juan Marín. Bago, ingeniera industrial de Huelva, logró un 23% de apoyos de los afiliados de Ciudadanos en las primarias de 2018, siendo prácticamente una desconocida, frente al candidato impuesto por el líder nacional, Albert Rivera.


Elena Bago, ex de Ciudadanos

En 2021 volvió a presentarse a unas primarias exprés de Ciudadanos para elegir al candidato a las autonómicas de este año -2.264 afiliados con derecho a voto-, pero esta vez apenas obtuvo 74 papeletas, un 5,2% del sufragio. Aquel proceso fue en diciembre del año pasado y al poco tiempo Bago inició la andadura para montar su propia formación política, ya desmarcada de Ciudadanos.

Ambiente electoral

Estos dos nuevos partidos políticos aparecen en el registro de Interior el mismo día, 31 de marzo, aunque nada tienen que ver entre sí. Los dos se inscriben en el “ámbito territorial nacional”, pero a las puertas de las elecciones en Andalucía, que aún no están convocadas pero que forzosamente tocan este año. El presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno, baraja el mes de junio, para lo cual deberá disolver el Parlamento después de Semana Santa, o bien esperar ya a otoño y finiquitar la legislatura en este periodo de sesiones, que termina antes de verano.

La ex diputada de Vox Andalucía consta como presidenta y representante legal del partido Libres, con sede social en Córdoba, una provincia distinta a la suya. La ex afiliada de Ciudadanos es la presidenta y representante legal de Somos Futuro, cuyo nombre completo es Somos Fuerza, Unión, Trabajo, Utilidad, Regeneración y Oportunidad. Su sede social está en Huelva, donde trabaja Bago.

La irrupción de dos nuevas formaciones en la arena política andaluza ahonda en la fragmentación actual del escenario, en la que concurren más partidos que nunca, la mayoría fruto de divisiones previas. Vox irrumpió en el Parlamento andaluz en 2018 con 12 diputados, pero apenas dos años después sufrió una crisis interna que se saldó, primero, con la dimisión de su líder y candidato, el juez Francisco Serrano, inmerso en una causa judicial por un supuesto delito de fraude, y posteriormente con la pérdida de una parlamentaria.

“Las mujeres estamos anuladas en Vox”
La expulsión de Rodríguez del grupo se produjo en medio de una bronca interna monumental. La almeriense acusó a sus compañeros de “misoginia” y “falta de democracia interna”, y llegó a denunciar ante la Policía que le habían abierto la correspondencia personal. “Cuando era portavoz adjunta era un cero a la izquierda. Solamente los hombres pueden hablar en Vox y solamente los hombres pueden estar en todos lados, las mujeres estamos un poco anuladas. Me voy porque no me dejan trabajar”, sostuvo en enero de 2021.

El entonces portavoz de Vox en el Parlamento andaluz, Alejandro Hernández, le respondió con una dura crítica: “Se va un minuto antes de que el partido la eche. Cuantitativamente no era una persona que destacara y por su entrega y su capacidad humana era cuestionable. No lo considero una gran pérdida”.

Sector crítico en Ciudadanos
En el caso de Elena Bago, nacida en Jaén y residente en Huelva, su peso orgánico dentro de Ciudadanos era exiguo. Nunca tuvo un puesto en el partido ni ocupó un cargo público. En febrero de 2017 se presentó como compromisaria a la cuarta asamblea nacional de la formación naranja, la única aspirante al margen de la corriente oficial que lograría un asiento. La ahora presidenta de Somos Futuro siempre fue crítica con el liderazgo de Juan Marín, “teledirigido por la dirección nacional de Ciudadanos”.

La formación naranja afronta unos comicios difíciles, con todos los sondeos en contra. Marín confía en lograr unos resultados por encima de los que ha obtenido Ciudadanos en otras comunidades que ya han pasado con las urnas, recientemente en Castilla y León, donde salió del Gobierno de coalición con el PP al único escaño que ha mantenido en la Cámara autonómica. La alianza entre populares y naranjas en Andalucía ha disfrutado de una sintonía excepcional en estos tres años de legislatura, y tanto Moreno como Marín han declarado públicamente que su interés es reeditar el pacto y continuar gobernando juntos.

Desconectado Heracles_Pontor

  • Moderador
  • Tyranosaurius Rex
  • ***
  • Mensajes: 50997
  • Verbum Víncet.
Re: ELECCIONES
« Respuesta #15710 en: 15 de Abril de 2022, 09:59:43 am »
Como sino lo hacen. . . se van a comer un mojón. . .

Enviado desde mi Mi A2 Lite mediante Tapatalk


"No hay hechos, sino interpretaciones" Nietzsche

Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222546
Re: ELECCIONES
« Respuesta #15711 en: 16 de Abril de 2022, 07:09:35 am »

Vox pide a concejales de Ciudadanos que dejen el partido ya si quieren ir en sus listas en 2023


Algunos ediles naranjas han sondeado a Vox para ir en sus listas en las municipales del 2023. El partido de Santiago Abascal dice que son casos aislados, y que no hay una operación a nivel nacional

Vox pide a concejales de Ciudadanos que dejen el partido ya si quieren ir en sus listas en 2023 La líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, y el de Vox, Santiago Abascal, en el Congreso. EFE

JORGE SÁINZ
 

PUBLICADO 16/04/2022 04:45
Vox ha pedido a los concejales de Ciudadanos que llaman a su puerta que dejen el partido ya si quieren ir en las listas del partido de Santiago Abascal en las municipales del 2023. Vox, según ha sabido Vozpópuli, no quiere reproducir la estrategia de la anterior dirección del PP de permitir saltos desde el partido naranja de un día para otro, pero no se cierra la puerta a fichajes puntuales ni de Ciudadanos ni de ningún otro partido. Eso sí, con un margen entre uno y otro movimiento.

Fuentes de Vox explican a este diario que se trata de "casos puntuales". Y admiten que algún coordinador local "haya dado esa respuesta", la de dejar su partido ahora con vistas a sumarse a Vox en alguna lista en el futuro. En todo caso, insisten en que no es un "tema generalizado".

"Si estuviera siendo un tema generalizado, se habría tratado en las reuniones de los responsables de área, pero al no haberse producido es porque no se considera un tema amplio y menos a esta distancia de las elecciones", dicen desde Vox. "Es una cuestión que se deberá tratar caso por caso, no de forma general".

Desbandada en Ciudadanos
Ciudadanos obtuvo casi 2.800 concejales en las elecciones municipales de mayo del 2019, siendo la tercera lista más votada en todo el país. Las perspectivas electorales del partido naranja para dentro de un año les dejan fuera de una gran parte de los Ayuntamientos del país.

La crisis de Ciudadanos tras el fiasco de la moción de censura en Murcia ya provocó una salida masiva de cargos hacia el PP. Casi un centenar de concejales y diputados autonómicos o bien se han cambiado de partido, han abandonado sus filas y se han pasado al grupo mixto o bien están en la órbita de otras formaciones políticas, incluso de la España vaciada.

La puerta de Génova se ha cerrado de par en par tras la salida de Pablo Casado y Teodoro García Egea, que de la mano del ex de Ciudadanos Fran Hervías lideraron la opa contra Ciudadanos. La formación de Inés Arrimadas y el nuevo presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, han abierto un periodo de convivencia pacífica con la salida de Hervías de Génova.

Algunos concejales que quieren seguir en el cargo han dirigido la vista ahora hacia Vox. Los de Abascal siempre han dicho que hay mucha gente llamando a su puerta, pero la gestión de estos cambios ni ha sido masiva, ni desde luego se le ha dado publicidad como hizo en su momento el PP. Vox también ha perdido decenas de concejales y diputados autonómicos en todo el país. Y ha habido acusaciones de unos contra otros por estos episodios.

Vox se carga las primarias
La premura con la que Vox tuvo que montar sus candidaturas autonómicas y municipales en 2019 está detrás de estos problemas. Por eso, la formación de Abascal ha modificado recientemente sus estatutos con la eliminación de las primarias internas para la elección de candidatos. Esta decisión refuerza el poder de la dirección nacional, que asegura busca "protegerse" de "arribistas" que quieran dañar al partido.

El Comité Ejecutivo Nacional de Vox tendrá la potestad para elaborar las listas al Congreso, el Senado y el Parlamento Europeo. Las candidaturas autonómicas y municipales también serán ratificadas por el Comité Ejecutivo a propuesta de los órganos provinciales.

Además, amplía a cuatro años el mandato de este Comité Ejecutivo y le da competencias para contratar a todo el personal del partido y los grupos parlamentarios, supervisar a los cargos institucionales y "dirigir y supervisar" sus iniciativas y propuestas, algo que de facto ya ocurre.

Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222546
Re: ELECCIONES
« Respuesta #15712 en: 17 de Abril de 2022, 08:01:17 am »

Radiografía del voto a la extrema derecha en Europa: dónde crece, qué países son excepciones y en qué se diferencian los partidos


Reino Unido, Irlanda, Luxemburgo e Islandia están entre los países donde la extrema derecha no tiene representación parlamentaria, mientras Hungría y Polonia concentran ahora el alza. España ocupa el puesto 11 de los países con más presencia de partidos de este tipo


Raúl Sánchez / Javier Biosca Azcoiti

16 de abril de 2022 21:41h

Actualizado el 17/04/2022 05:30h

La división de la derecha radical populista en Francia no ha impedido a Marine Le Pen pasar a la segunda vuelta de las elecciones presidenciales para enfrentarse al presidente Emmanuel Macron el próximo 24 de abril. Mientras tanto, el pasado 3 de abril, el primer ministro de Hungría, el ultraconservador Víktor Orbán, ganó las elecciones parlamentarias por cuarta vez consecutiva y pese a la unión de prácticamente toda la oposición húngara, incluida la formación de extrema derecha Jobbik. Orbán incluso mejoró su resultado anterior con 135 de los 199 escaños y el bloque opositor se quedó muy lejos, con 56.

A principios de año, en enero, también hubo elecciones generales en Portugal y el porcentaje de voto a la extrema derecha, encarnada en el partido Chega, se multiplicó por cinco, pasando del 1,4% al 7,4%. Portugal era uno de los principales países europeos en el que la ultraderecha aún no tenía una presencia significativa en el Parlamento.

elDiario.es ha analizado el porcentaje de voto que han recibido las formaciones populistas de derecha radical en los principales países europeos en las elecciones legislativas y su evolución en los últimos años.

En un extremo está Hungría, con un 60% (53,29% para Fidesz y 6,15% del Movimiento Nuestra Patria, creado por rebotados de Jobbik –cuyo porcentaje no se puede añadir por su inclusión en la alianza opositora–). En el otro, Irlanda, donde la extrema derecha es prácticamente inexistente (0,2%).

Reino Unido e Irlanda ya son los únicos dos países de los grandes de Europa donde la extrema derecha es inexistente o no tiene representación parlamentaria. Otros más pequeños como Luxemburgo e Islandia, viven una situación similar.

En Reino Unido, la extrema derecha no tiene presencia parlamentaria, en parte por su sistema electoral de mayoría simple que favorece el dominio de los grandes partidos, que siguen siendo laboristas y conservadores, aunque en la actual Cámara de los Comunes también están representados partidos más pequeños como los liberaldemócratas y varios partidos nacionalistas. En las elecciones parlamentarias de 2019, el partido del Brexit de Nigel Farage, la principal voz de la extrema derecha británica, no obtuvo ningún escaño (sólo consiguió una victoria simbólica en las elecciones de ese año al Parlamento Europeo, donde estaba claro que la presencia de eurodiputados británicos sería de unos pocos meses por la salida entonces en proceso de su país de la UE).

“La razón del caso irlandés es que el voto populista ya está cubierto en la izquierda por el Sinn Féin. Tienen muchos votantes descontentos con el sistema y a los que aspiraría un partido populista de derechas. Además, a diferencia de la mayoría de partidos de izquierdas, son una formación nacionalista, lo que de nuevo cubre una base de posibles votantes para los populistas de derechas”, señala Duncan McDonnell, politólogo irlandés experto en populismo.

El caso de Lituania es diferente porque la lista de partidos utilizada para este análisis se actualizó por última vez en enero de 2020 y en marzo, meses antes de las elecciones, se formó el partido Alianza Nacional, que recibió el 2,2% de los votos (ningún escaño). Según el informe ‘State of hate: far-right extremism in Europe’ de 2021 elaborado por las organizaciones Hope not Hate, Amadeu Antonio Stiftung y Expo Foundation, esta nueva formación es de derecha radical, admira a Marine Le Pen y ha invitado a varios eventos a políticos del partido Alternativa para Alemania.

Polonia es el segundo país del continente que concentra más voto ultra (50,4%) y se divide entre el gobernante PiS (43,6%) y la suma de varias formaciones radicales más (6,8%). Le siguen otros cuatro países que se mueven entre el 20% y el 30%: Bélgica, Suiza, Eslovaquia e Italia. España, con el 15% de Vox, se sitúa en el puesto número 11 de todos los países analizados.


¿Qué tienen en común?

Aunque estas formaciones difieren mucho unas de otras, como por ejemplo Vox y el partido independentista belga Interés Flamenco, sí comparten unas características similares que sitúan a todos en la familia política de la derecha radical populista. El académico Cas Mudde identifica tres grandes elementos comunes en todos ellos: nativismo, autoritarismo y populismo.

Nativismo definido “como ideología que sostiene que los Estados tienen que estar habitados exclusivamente por miembros del grupo nativo y que elementos no nativos (personas e ideas) amenazan el Estado nación homogéneo. Incluye una combinación de nacionalismo y xenofobia”, señala Mudde en su libro ‘Populist radical right parties in Europe’ (2007). “Autoritarismo como la creencia en una sociedad rigurosamente ordenada en el que las violaciones a la autoridad se castiguen severamente. Según esta interpretación, incluye ley y orden y moralismo convencional punitivo, pero no implica necesariamente una actitud antidemocrática”. Por último, el populismo entendido como “ideología que considera que la sociedad se divide en dos grupos homogéneos y antagónicos, ‘el pueblo puro’ frente a la ‘élite corupta’ y que sostiene que la política debe ser una expresión de la voluntad general del pueblo. En la democracia populista, nada es más importante que la ‘voluntad general del pueblo’, ni siquiera los derechos humanos o las garantías constitucionales”.

Para este análisis se ha seleccionado la lista de formaciones de derecha radical elaborada por Popu-list, un proyecto de cooperación entre académicos y periodistas iniciado por The Guardian que analiza 31 Estados europeos y que han ganado al menos un escaño o el 2% de los votos desde 1989. La lista ha sido revisada por más de 80 académicos. Para analizar el histórico de datos y partidos así como el porcentaje de votación a las otras familias políticas en cada país, la información se ha cruzado con la base de datos de ParlGov, que incluye aproximadamente 1.700 partidos y está liderada por académicos de la Universidad de Bremen. A ello se ha sumado un análisis propio de este medio para las formaciones muy minoritarias o de reciente creación que no aparecen en Popu-list. Además, hay que tener en cuenta que en muchos casos los partidos no permanecen fijos en el eje izquierda-derecha, sino que van evolucionando y moviéndose según las circunstancias y el contexto.

De acuerdo con Popu-List, el voto en Europa a la derecha radical en 2004 era del 5% y en 2019 pasó al 15%. Mette Wiggen, profesora de la Universidad de Leeds especializada en movimientos de extrema derecha en países escandinavos dice que lo importante no es analizar solo sus resultados electorales, sino “ver su éxito en cómo han fijado la agenda y cómo han influido sobre los partidos tradicionales. Mira la UE, cerrar fronteras y mantener fuera a refugiados e inmigrantes ha sido más importante que salvar vidas. Hay un amplio consenso sobre la ‘securitización’ de la migración”, dice.

“Muchos de estos partidos han estado ahí desde hace más de una década, como en el caso del Frente Nacional en Francia, y han sido bastante poderosos. Yo hablaría de una ola de la derecha radical populista en términos de influencia y expansión territorial en los últimos años”, dice Annika Werner, politóloga experta en derecha radical europea y profesora en la Universidad Nacional de Australia. “Entran en gobiernos más a menudo y tienen más influencia sobre otros partidos tradicionales, especialmente los conservadores”.

Haciendo un análisis de la evolución del voto de las formaciones de derecha radical en los principales países europeos se puede observar que España y Portugal han sido los últimos en los que han emergido fuerzas de extrema derecha.

“Vox y Chega al final han sabido emerger a partir de un partido de centroderecha más respetable. No son fuerzas que nacen de partidos aún más radicales de extrema derecha que existen en ambos países. Hay todo un estigma hacia esos partidos por la dictadura. Vox y Chega no tienen tanto ese problema”, dice a elDiario.es la politóloga Mariana Mendes.

“Los partidos de centroderecha en Portugal tendían a no definirse como formaciones de derechas porque tenían miedo de la etiqueta y la relación con la dictadura. Aquí es aún más destacado que en España porque allí fue una transición pactada, pero aquí fue por ruptura y revolución”, explica Riccardo Marchi, autor del libro ‘La nueva derecha antisistema: el caso de Chega’.

En los dos países, ese crecimiento de la derecha radical populista se produce a expensas del porcentaje de voto de los conservadores. Un fenómeno que se repite en muchos otros Estados. “Las primeras víctimas [del auge de la extrema derecha] han sido los partidos conservadores tradicionales, que siempre habían sido los partidos dominantes en la derecha y de pronto les surge competencia por ese extremo”, dice Werner.

“Hay principalmente dos estrategias para abordar esta competición: una consiste en rechazarlos completamente e intentar aislarlos, lo que a menudo les ha ayudado porque encaja con su narrativa. La otra estrategia consiste en intentar mantener pequeña esa competición adoptando algunas de sus políticas. Hemos visto muchos partidos conservadores que se han convertido cada vez más antiinmigración y menos eurófilos”, añade.

En el caso de Grecia, por ejemplo, se ve como el auge y posterior caída de la extrema derecha ha influido directamente en los resultados obtenidos por los conservadores de Nueva Democracia. En Francia, el relativamente nuevo fenómeno Macron tiene un impacto importante, al igual que sucede en Italia con el Movimento 5 Stelle.

Muchas de estas formaciones de derecha radical populista ya se han consolidado “y están aquí para quedarse”, dice Werner. Por su parte, Wigen explica: “Ya no recogen solo votos protesta. Son formaciones establecidas con amplios programas políticos que cubren áreas como los partidos tradicionales, pero de forma muy diferente. Algunos son neoliberales, incluso libertarios, pero la tendencia es a ser favorable al sistema de bienestar y al intervencionismo estatal para asegurar que la población etnonacional reciba prioridad en el mercado de trabajo, vivienda, sanidad y bienestar”.

“La xenofobia y el sistema de bienestar chovinista han sido normalizados. Incluso partidos socialdemócratas a la izquierda lo promueven. El peor ejemplo es Dinamarca, el que fuera el país más tolerante de Europa tiene una primera ministra socialdemócrata y populista que renuncia a sus obligaciones internacionales para devolver a solicitantes de asilo a Siria. También acordaron quitar a los refugiados sus pertenencias para contribuir al coste de su estancia”, dice Wigen, experta en el auge de la extrema derecha en países nórdicos.

La influencia de estos partidos ha aumentado notablemente en los países nórdicos, dice Wigen. “En Dinamarca, la extrema derecha tiene poder desde hace dos décadas y ha pedido políticas más estrictas de inmigración a cambio de apoyar coaliciones minoritarias. Ya en 2021 estaba en vigor un sistema de bienestar chovinista en el que tus derechos dependen de tu estatus de ciudadanía”.

“El año pasado, el Partido del Progreso en Noruega celebró que el Parlamento aprobase su propuesta de aumentar de tres a cinco los años para tener acceso a la ciudadanía. El partido estuvo en el Gobierno entre 2013 y 2020, tan solo dos años después del ataque de extrema derecha cometido por Anders Breivik”, dice Wigen. “Prometieron cambiar su retórica contra los inmigrantes, pero solo ha empeorado. Además, el atacante había sido miembro del partido”.

“En Suecia ningún partido quería colaborar con Demócratas de Suecia, pero el año pasado dos partidos tradicionales dijeron que estaban dispuestos a hacerlo. La formación ultra consiguió casi el 18% en 2018, la tercera fuerza, y probablemente es buena idea empezar a tomarse en serio a sus votantes. Los socialdemócratas cerraron las fronteras con Dinamarca en 2016 para parar el flujo de refugiados, lo que se vio como una victoria de Demócratas de Suecia, que llevaban tiempo pidiéndolo”.

Metodología

Para esta información, se han obtenido los resultados de todas las elecciones parlamentarias ocurridas en todos los países europeos del proyecto ParlGov que incluyen todos los comicios hasta el año 2021. Además, se han incluido los resultados de las elecciones generales celebradas en 2021 en Alemania, Islandia, República Checa, Países Bajos, Noruega y Bulgaria (tres repeticiones electorales), y los comicios celebrados en 2022 en Portugal y Hungría.

Hemos identificado las formaciones de derecha radical a partir de la lista elaborada por Popu-list, un proyecto de cooperación entre académicos y periodistas iniciado por The Guardian que analiza 31 Estados europeos y que han ganado al menos un escaño o el 2% de los votos desde 1989. La lista ha sido revisada por más de 80 académicos.

Esta base de datos identifica como extrema derecha hasta 80 formaciones y alianzas electorales que se han presentado a elecciones generales en Europa en los últimos 30 años. Para completar el listado, este medio ha identificado como partidos de extrema derecha a distintas formaciones que no estaban incluidas en el listado de Populist por ser muy minoritarios o ser partidos o alianzas de creación reciente (la última actualización de Popu-list es de enero de 2020) confirmando caso por caso. Para el análisis histórico, también se han incluido partidos ya desaparecidos de años anteriores que sí están calificados como derecha radical populista en ParlGov.

En Bulgaria hemos incluido los siguientes partidos: Balgarska Natsionalnoradikalna Partiya (BNRP), Vazrazhdane (R), Bŭlgarskite patrioti (BP), NFSB-Volya. En Croacia, Hrvatski blok (HB), Hrvatska Stranka Prava (HSP) y Domovinski pokret Miroslava Škore (DPMS). En República Checa, Česká národně strana socialistická (CNSP) y Dělnická strana sociální spravedlnosti (DSSS). En Dinamarca, Stram Kurs (SK). En Francia, Mouvement national républicain (MNR) y extrême droite (ex-dro). En Alemania, Die Republikaner (Rep), Deutsche Volksunion (DVU) y Nationaldemokratische Partei Deutschlands (NPD). En Países Bajos, Centrumpartij (PJ) y Juiste Antwoord 2021 (JA21). En Polonia, Konfederacja Polski Niepodległej (KPN). En Rumanía, Alianța pentru Unirea Românilor (AUR). En Eslovaquia, Vlasť (V). En Reino Unido, British National Party (BNP) y Brexit Party (BP). En Lituania, Nacionalinis Susivienijimas (NS).

Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222546
Re: ELECCIONES
« Respuesta #15713 en: 18 de Abril de 2022, 07:32:40 am »

Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222546
Re: ELECCIONES
« Respuesta #15714 en: 18 de Abril de 2022, 07:58:52 am »
Curioso, la encuesta hace bajar a Vox y subir a UP.


Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222546
Re: ELECCIONES
« Respuesta #15715 en: 20 de Abril de 2022, 15:12:31 pm »
La prueba de su racismo.

Desconectado FFTR80

  • Master
  • ****
  • Mensajes: 1312
Re: ELECCIONES
« Respuesta #15716 en: 20 de Abril de 2022, 17:18:33 pm »
Curioso, la encuesta hace bajar a Vox y subir a UP.



Últimamente se ven muchas encuestas pagadas desde Génova para ensalzar al nacionalista gallego Feijoo.

Desconectado Celestino

  • Profesional
  • Diplodocus
  • **
  • Mensajes: 19432
Re: ELECCIONES
« Respuesta #15717 en: 21 de Abril de 2022, 19:22:30 pm »
Espero que Feijoo tenga la mejor de las suertes y vuelva a poner en el panorama político un partido conservador moderado y que Ayuso le deje trabajar. Sería muy positivo para la Democracia española que el partido fascista Vox se vaya apagando.

Desconectado FFTR80

  • Master
  • ****
  • Mensajes: 1312
Re: ELECCIONES
« Respuesta #15718 en: 21 de Abril de 2022, 20:16:45 pm »
Espero que Feijoo tenga la mejor de las suertes y vuelva a poner en el panorama político un partido conservador moderado y que Ayuso le deje trabajar. Sería muy positivo para la Democracia española que el partido fascista Vox se vaya apagando.

Feijoo es de los vuestros, un nacionalista gallego vestido de españolista. El PSOE de azul.

Desconectado 47ronin

  • Administrador
  • Tyranosaurius Rex
  • ****
  • Mensajes: 222546
Re: ELECCIONES
« Respuesta #15719 en: 22 de Abril de 2022, 07:35:26 am »

Le Pen pierde el debate decisivo ante un Macron firme y arrogante


Si la contienda televisada y demasiado cuadriculada puede decidir el voto de algún indeciso o abstencionista se podría asegurar que Le Pen no atrapó anoche muchas adhesiones

LUIS RIVAS

PUBLICADO 21/04/2022 08:38
ACTUALIZADO 21/04/2022 10:48
Marine Le Pen deja escapar su última oportunidad de ganar un debate a Emmanuel Macron en su duelo para la Presidencia francesa que se dirime el próximo domingo. Demasiado a la defensiva y obsesionada por no repetir los errores cometidos en su desastrosa actuación de 2017, la aspirante es la perdedora del enfrentamiento televisivo.

Si la contienda televisada y demasiado cuadriculada puede decidir el voto de algún indeciso o abstencionista se podría asegurar que Le Pen no atrapó anoche muchas adhesiones. Y si el presidente-candidato no gana por una gran diferencia es por su actitud arrogante y algo despreciativa hacia la contrincante. Una postura que forma parte de la personalidad de Macron y que se le ha reprochado desde la crisis de los chalecos amarillos.

Le Pen pretendía “presidencializarse” y preparó un combate como si delante de ella no existiera oponente. Ello le restó frescura y, sobre todo, le retuvo para responder y reaccionar ante las flechas bien envenenadas de Macron. Muchos esperaban que el capítulo del poder adquisitivo, ante la crisis que viven los franceses, iba a suponer un calvario para el candidato que defendía su mandato. Pero en ese terreno, medirse a un enarca (Escuela Nacional de Administración), inspector de impuestos y exministro de economía y finanzas utilizando su mismo lenguaje y sin bajar al terreno popular e, incluso, al lodo populista, es un billete al precipicio. Macron tiene la suficiente experiencia para inundar de cifras y acudir al lenguaje tecnocrático y aplastar cualquier intento de igualarle en ese terreno,  si no se le  obliga a bajar al barro.

“Usted depende de Putin”
Le Pen tampoco se esperaba que Macron contraatacara como lo hubiera hecho cualquier periodista crítico. “Usted depende de Putin”, le asestó, cuando recordó a la audiencia que la representante de Agrupación Nacional pidió en 2015 un crédito a un banco checo-ruso. En plena guerra de Ucrania, responder a un jefe de Estado recordándole sus encuentros con Vladímir Putin no podía servir para defender una iniciativa obligada, eso sí,  porque el “establishment” bancario de su propio país rechazó concederle un crédito. Un claro ejemplo, y nada democrático, de un cordón sanitario financiero. En ese momento crítico, ni siquiera Le Pen respondió utilizando el escándalo MacKinsey, los más de mil millones de euros libres de impuesto gastados por los ministerios de Macron en consultores privados y que ha ensombrecido la campaña presidencial en las últimas semanas.

Cuando Le Pen le atacó por los 600 mil euros de deuda del mandato que acaba, Macrón, que la justificó por la necesidad de colmar el desastre del Covid, le respondió inquiriendo qué hubiera hecho ella para luchar contra la pandemia. La aspirante no supo responder concretamente.

La UE contra la Europa de los pueblos
A cada referencia de Le Pen a “los vulnerables”, “los pobres” o “los olvidados”, es decir, su base electoral, Macron respondía con datos que siempre pueden ser interpretados, pero que no encontraban contrataque alguno, cifrado o no. En el apartado Unión Europea versus “la Europa de los pueblos”, Macron obligó en un, primer momento a Le Pen a afirmar que ella no quería dejar la UE. Le Pen defendió querer reformar a fondo el club comunitario en beneficio de los franceses, frenando los acuerdos de libre cambio, aumentando la producción agrícola o abandonando el mercado europeo de la energía. Le Pen reiteró que apoya las sanciones europeas a Moscú, a excepción de la renuncia al petróleo y gas ruso, para que los consumidores franceses, insistió, no sufran las consecuencias. Macron resumió el programa de su contrincante afirmado que su puesta en práctica significaba la salida de Francia de la UE. Reparto de puntos entre ciudadanía no apasionadamente eurófila, como la francesa.

Tampoco hubo vencedor claro cuando se abordaron los asuntos de ecología. Le Pen subrayó la conversión de Macron al átomo y conservó votos en su ataque contra la energía eólica, un asunto que electriza los ánimos de la Francia rural. Cuando llegó el tiempo para entrar en el terreno favorito de Marine Le Pen - inseguridad, laicismo, educación -,  la única representante de la derecha francesa tampoco fue capaz de llevar contra las cuerdas a un presidente que en ese campo no puede vanagloriarse de progresos. En ese momento, muchos lepenistas echarían de menos los argumentos de Éric Zemmour.

Ni alarma antifascista ni cordón sanitario
A Macron, que no necesitó en ningún momento recurrir “a la alarma antifascista” ni al inservible “cordón sanitario”, le bastó con rebatir uno por uno los postulados de Le Pen, que no supo defender claramente su polémica promesa de prohibir el velo islámico en las calles. Aparte alguna acusación de deshonestidad o de falsedad, el lance se desarrolló con respeto y sin la tensión de 2017.

Solo al final de las dos horas y cincuenta minutos de debate, Marine Le Pen mostró algo más de empuje, en su defensa del “Referéndum de Iniciativa Ciudadana”, al que Macron se opone, y prometiendo la introducción del sistema proporcional en las futuras elecciones, una vieja promesa del candidato Macron en 2107 que no ha llevado a fin en cinco años.

Un debate no hace variar la opinión de los convencidos, pero puede hacer ganar o perder un pequeño porcentaje a los indecisos o abstencionistas. Le Pen no perdió anoche por paliza, como hace cinco años, pero cuando todos esperaban que mostrara sus nuevas garras, fue frenada en el fondo de la pista por los raquetazos de Macron. En todo caso, no hubo guiños de ninguno de los contendientes a los votantes de la izquierda más extrema que dudan entre ir a pescar, frenar a Le Pen o abstenerse y que sea lo que las urnas quieran.