Ah entonces nada que decir...sí, la administración es una apisonadora.
Y generalmente cabrona.
Muy cabrona. Es una apísonadora de tal modo que se ha tenido que penalizar la conducción de vehículos para evitar que algunos ciudadanos condujesen si permiso, porque las administraciones por si solas no lo conseguían. Tan cabrona que paga 9 millones de pensiones; prestaciones de desempleo, prestaciones no contributivas, educación, sanidad, seguridad, construye y mantiene vías públicas, las ilumina, recoge y trata las aguas residuales, exige normas para evitar actividades contaminantes o reducir sus efectos. Regula actividades económicas para evitar la desaparición de especies, especialmente extractivas, controla su evolución mediante la contratación de biólogos. Regula el comportamiento de los ciudadanos para garantizar una convivencia armónica con normas que limitan la emisión de ruídos, especialmente nocturnos, la conducción de vehículos a motor, la venta de bebidas alcohólicas a menores; que promueve la actividad física y el deporte, que dota a los municipios de bibliotecas y centros socioculturales; de infraestructuras como teatros, pavellones polideportivos...; fomenta la investigación, tanto básica como aplicada en diversos ámbitos del conocimiento... Exactamente lo que tu dices. Apisonadora y cabrona.