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La culpa, siempre de otro. De manual.
En 2013 se suprimió la inversión en mantenimiento
¿Quién es el responsable de los baches y socavones de Madrid?El Ayuntamiento aprobó un plan de choque de 48 millones de euros para iniciar las obras en octubre tras criticar la herencia recibida. Los populares reprochan la "improvisación" de la alcaldesa Carmena
23.09.2016 – 18:55 H.
El anunciado Día sin Coches trajo a Madrid dos consecuencias: atascos y cruce de acusaciones vía Twitter. Antes de que mil bicicletas ocuparan el jueves la Castellana, el grupo municipal del Partido Popular compartió un vídeo en la red social titulado 'Carmena, no mires al cielo; mira al suelo', en el que un anónimo ciclista recorre los socavones y baches del castigado cemento madrileño. La denuncia de los populares topó con más de un detractor, que afeó al partido de la oposición la gestión del mantenimiento de las calles en su anterior etapa al frente del consistorio de la capital.
La popularmente conocida como operación asfalto aprovechaba cada verano las vacaciones de los madrileños para asfaltar las calles más perjudicadas. Este año se retrasaron las obras hasta casi entrado el otoño, como denunció el miércoles el grupo municipal socialista, luego de que el Gobierno municipal de Manuela Carmena decidiese destinar 48 millones de euros al plan de mantenimiento. La partida supera en 18 millones la anterior, ejecutada bajo su mandato aunque aprobada por la anterior regidora, la popular Ana Botella, en los presupuestos que cerró el 19 de diciembre de 2014.
La Junta de Gobierno de Madrid aprobó en junio el presupuesto de 48 millones de euros para la ejecución de las obras. La portavoz municipal, Rita Maestre, anunció entonces que las obras se iniciarían después de “años sin inversión” en mantenimiento.
"La herencia que nos dejó el Partido Popular es nefasta", señala el Ayuntamiento. El grupo municipal del PP responde que "no hay lugar" a mencionar la herencia recibida, escudándose en el contrato integral a ocho años firmado en 2014 y cifrado en 114 millones de euros. "Hoy iniciamos una gran operación asfalto que tendrá continuidad en los próximos años", anunció Botella en abril de ese año junto al Manzanares mientras los operarios extendían el alquitrán. Tres años después, 'la gran operación' es un lastre, según denuncia el Gobierno local.
El Ayuntamiento está renegociando el contrato por estar "infradotado". La Consejería de Medio Ambiente, encargada de gestionar la movilidad, reconoce que "será complicado" cambiar las bases de un acuerdo que "no cumple con las necesidades que tiene la ciudad". De hecho, los 48 millones que se destinarán este año están fuera de ese contrato integral.
El plan anunciado por Maestre afecta a un total de 523 calles de los 21 distritos de la ciudad. Desde Ahora Madrid explican que los 48 millones forman parte de un “plan de choque” a partir de las inversiones de financiamiento sostenibles. La ley permite a las entidades municipales dedicar parte de su remanente a este tipo de gastos cuando tienen superávit.
El plan debe ser adjudicado y ejecutado en el mismo año de su aprobación, por lo que el Ayuntamiento anuncia que las obras comenzarán en octubre y noviembre. El Partido Popular carga contra Carmena por realizar las tareas de mantenimiento en otoño, “un hecho histórico”. “La alcaldesa parece funcionar a base de ocurrencias”, protestan los populares. Ahora Madrid recuerda a los populares que ya en 2014 se habían acometido obras en este período.
Una inversión con la que perder votos
Las obras de reparación de asfalto generan desvíos de tráfico, caravanas, ruidos y olores. “Tradicionalmente se percibe que las inversiones en mantenimiento no dan rédito electoral", explica Esteban García, uno de los autores del colectivo Nación Rotonda, especializado en urbanismo, ordenación del territorio y burbuja inmobiliaria en España. “El relato es que el ciudadano quiere inversiones nuevas. De ahí que tengamos ese problema endémico en España de obras enormes y nuevas que luego no se mantienen”, concluye.
La crisis obligó a que la inversión en mantenimiento se redujese a cero en 2013. Los populares reconocen que en ese momento no había dinero para ejecutar obras, luego de dos veranos en los que el coste de pasar el alquitrán por los socavones fuese de solo 1,4 millones en cada uno. Un año después llegaba el anuncio del contrato integral y una primera inversión de 13 millones de euros. “El pavimento en Madrid está muy mal, y es consecuencia directa de hacer un mantenimiento pésimo durante décadas”, arguye García.
“Una calle no se rompe de un día para otro”, lamenta la Consejería de Medio Ambiente, que cifra la vida útil de una calzada en 15 años. “Los técnicos nos dicen que en los seis últimos años se pueden empezar obras para no llegar al deterioro actual”, explica una de las responsables del departamento.
