AMPLIACION DE LA NOTICIA DEL ESCOLTA SALVAVIDAS.
Hoy lo sacan en EL CORREO
Un escolta de Patxi López se lanza a la ría, a la altura del Arriaga, para salvar a un hombre de 67 a?os que flotaba en el agua boca abajo
escolta de Patxi López
?Me tiré al ver que aún estaba vivo?
Un escolta de Patxi López se lanza a la ría, a la altura del Arriaga, para salvar a un hombre de 67 a?os que flotaba en el agua boca abajo
AINHOA DE LAS HERAS| BILBAO
Trabaja de guardaespaldas y ayer, además, salvó una vida. Un ertzaina, escolta del secretario general del PSE-EE, Patxi López, se lanzó a la ría para rescatar a un hombre de 67 a?os que se había precipitado al agua y flotaba boca abajo. Al acercarse a la orilla, vio cómo ?salían dos 'burbujillas'? junto a la cabeza del hombre y pensó: ??Hostias, está vivo!?.
?Era sí o sí, al ver que tenía vida me tiré sin miramientos. No había tiempo. Lo que quería era tardar lo menos posible, así que me quité la chaqueta que me molestaba y la pistola para que no se hundiera, y me lancé?. El policía, de la Unidad de Escoltas de Berroci, consiguió sacar del agua al desconocido, que fue trasladado en una ambulancia hasta el hospital de Basurto.
Ocurrió alrededor de la una de la tarde. Los escoltas de López aguardaban en la puerta del teatro Arriaga, en Bilbao, a que saliera su ?jefe?. ?Gracias a que en vez de estar tomándonos un café, estábamos allí vigilando y al ver a unos chavales corriendo nos picó la curiosidad?. Él y un compa?ero -otros dos se quedaron a la espera del protegido- se acercaron a la barandilla, en frente de la antigua estación de La Naja.
Resbalón con el verdín
?Vi a un se?or flotando, tenía pinta de estar muerto, así que llamé al 112, me identifiqué y pedí que me enviaran un recurso?. Tres chicos de origen magrebí les indicaron que acababan de presenciar cómo aquel hombre se tiraba a la ría, por lo que no debía de llevar mucho tiempo en el agua. ?Bajamos por la escaleras y me resbalé con el verdín, también mi compa?ero se pegó una buena culada?, recuerda.
Su trabajo le obliga a estar en buena forma física, por lo que acude habitualmente al gimnasio y a la piscina. El agente, de 40 a?os y con 20 de experiencia en la Ertzaintza, miró alrededor a ver si encontraba algún palo con el que alcanzar al hombre, que flotaba a cierta distancia de la orilla mientras la marea subía. Al final se le ocurrió utilizar la porra extensible, pero con ella tampoco llegaba. ?En esos momentos no hay que pensar, sólo actuar?. Sabía que cada minuto que pasaba podía ser vital para aquel hombre.
Una vez en el agua, levantó al hombre, que ?tenía la cara morada y empezó a echar espuma por la boca?. Le agarró por el cuello y empezó a bracear con una sola mano hacia la orilla, pero la corriente les empujaba hacia arriba, hacia La Pe?a, y ?nos alejaba del escalón?. ?Me hundí varias veces y pegué varios tragos de agua 'chocolatada'; sabía raro?, recuerda. Mientras, su compa?ero se sujetó con un brazo a uno de los pilares del muelle y estiró la pierna.
?Agárrate al tobillo que aguanto?, le dijo. De esta forma y con la ayuda de los tres chicos que les habían avisado y de un tercer escolta, del concejal Txema Oleaga, extrajeron al hombre en peligro. Apenas pasó en el agua tres minutos. En tierra, numerosas personas observaban la escena desde las escaleras. ??Respira, respira!?, le gritó su compa?ero al ahogado hasta que ?le fue saliendo el agua que había tragado?. Calado hasta los huesos y desorientado, el hombre, que llevaba un jersey de lana, fue sacado en volandas por el escolta y los bomberos.
Una vez a salvo, el escolta se dio cuenta de que sus dos teléfonos móviles ?habían muerto?, se habían mojado. Fue a casa a cambiarse de ropa y cuando contó ?me he tirado a la ría a sacar a una persona que se estaba ahogando, mi ama se emocionó?, dice orgulloso.