-Un sindicato no está más cerca de un Policía que del Gobierno.
-Un sindicato no presionará al Gobierno si el Policía no lo hace con sus representantes sindicales.
-Un sindicato es subvencionado cada a?o, es pagado por alguien contra el que se supone que ha de luchar, no deja de ser más que UNA INCONGRUENCIA.
-Un sindicato es el látigo que porta el domador y amaina a las fieras.
-Un sindicato lo dará todo por un jefe y poco o nada por un policía.
-Un sindicato clandestino lo conseguía todo con la lucha de compa?eros valientes, hoy la clandestinidad se torna a la oficialidad; a la subvención y por ende....RENDICIÓN.
-Un sindicato no deja de ser un cortafuegos para que los cada vez más fornidos y salubres robles no dejen de arraigarse en el poder.
-Un sindicato es como DIOS, cuando las cosas están jodidas te acuerdas de él, sin embargo es en ese momento cuando él no se acuerda de ti.
-Un sindicato está completo de arte, en él, actuaciones teatrales por doquier... "To Be Or Not To Be" y el toque irónico sindical: "Two beer or not two beer", a?ádasele langostinos de San Lucar, Percebes de As Rías Baixas, un buen Rioja y otros manjares.
-Un sindicato actúa como una secta, comienzan desde los primeros pasos, primero regalan.... (véase CDs portátiles, DVDs.... ???Jamones!!!), te captan, institucionalizan el grito de guerra: "Por si me suspenden de empleo y sueldo" grabándolo en tu subsconciente en toda tu carrera policial y condicionándote con ello para finalmente actuar como un auténtico parásito, no dando nada y sí quitando poco a poco esa peque?a dosis de tu ser.
-Un sindicato está copado de funcionarios que ansían llegar a lo más alto, algo que le facilita el Gobierno a cambio de sumisión, no deja de ser una escalera para saciar el egocentrismo de estos míseros narcisistas.
-Un sindicato y su labor eterna, cual función de una presa con el arroyo, conteniendo la furia del agua, tornando por ende el sentido de lo lógico y lo justo.
-Un sindicato es una prisión, una prisión en la que este colectivo empu?a sus barrotes aceptándolos con la edad y la costumbre, y toda opción a los valores sociales ceden al recuerdo y al deseo.
[size=18]El día que comprendamos que los SINDICATOS no son más que una ramificación del poder Gubernativo, quizás entonces estemos preparados para la lucha por nuestros derechos
SATAN[/size].[/b]