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Colau 'legaliza' a los manterosLa podemita cede a las presiones de la CUP y gastará 700.000 euros en las nuevas acreditaciones para los vendedores ambulantes.
R. Moreno
Jueves, 5. Mayo 2016 - 11:35
La alcaldesa de Barcelona, la podemita Ada Colau, ha aceptado este miércoles in extremis varias peticiones de la CUP ante las exigencias de la formación anticapitalista para que se apruebe la modificación presupuestaria del Pleno de este jueves. Entre ellas, la de eliminar las unidades de antidisturbios de la Policía Municipal, así como la creación de un carnet del mantero para el que, que según el PP, el Consistorio destinará 700.000 euros.
Se da la circunstancia de que un edil de la CUP, Josep Garganté -el concejal skin de la CUP con ODIO tatuado en la mano-, se encuentra envuelto en una denuncia por coacciones a un médico por un asunto relacionado precisamente con policía y manteros. Como informó este diario, un vídeo muestra a Garganté reclamando al médico que cambie su informe y ponga que las lesiones de un mantero son por un empujón de la Urbana.
Este miércoles, la CUP ha anunciado que se abstendrán en el pleno, convocado para las 15.30 horas, para permitir ampliar el presupuesto de la ciudad, después de que las asambleas del partido decidieran anoche "no impedir" la aprobación de las cuentas.
Así, Ada Colau ya cuenta con los votos favorables del grupo del PSC y de ERC, por lo que la abstención de los tres concejales de la CUP le permitiría sacar adelante su propuesta presupuestaria.
Ha asegurado que la militancia de la CUP-Capgirem ha "debatido de manera serena, pese a las presiones recibidas" y ha señalado que estaban "muy lejos del sí, ni a un 40 %" de lo que proponían.
La incorporación de 5,2 millones de euros en partidas sociales y para atajar la femenización de la pobreza son otros de los acuerdos que el gobierno municipal ha alcanzado con la CUP para conseguir sacar adelante la ampliación del presupuesto municipal en 275 millones de euros.
El PP no da crédito a este 'disparate'
Por su parte, el líder del PP de Barcelona, Alberto Fernández, no da crédito a que la regidora acepte algunas de estas propuestas de la CUP, que considera un disparate. Cree que eliminar la unidad de soporte policial (USP) de la Guardia Urbana es el peaje que Colau paga por la abstención de la CUP.
También denuncia que Colau “pasa de legitimar los sindicatos de manteros a la creación de un carnet de mantero, que da apariencia de legalidad a una actividad ilícita, que además perjudica a los comerciantes que pagan sus impuestos”.
Así las cosas, pide al PSC que rompa el pacto con la podemita, y a Colau, que explique el pacto oculto con la CUP. “Queremos saber si la Guardia Urbana es moneda de cambio para conseguir su apoyo”, expresa el ‘popular’, que recuerda que los procesos participativos de los que tanto habla Colau, se han reducido a tener sólo en cuenta a los militantes de la CUP.
'Mercadillos rebeldes' para asombro de comerciantes
Cabe recordar que los manteros de Colau llevan meses montando 'mercadillos rebeldes' en las Ramblas de Barcelona bajo lemas como “DesobedienciaTraslaManta. Contra la represión policial”. Con ellos pretenden denunciar que no pueden trabajar, pese a que su actividad es ilegal, y exigen soluciones al gobierno municipal.
Es el Sindicato Popular de Vendedores Ambulantes, que se creó el pasado octubre, con el apoyo de Colau, quien organiza estos actos de protesta.
La manteros ocupan desde la Fuente de Canaletas hasta el Palau de la Virreina, donde despliegan decenas de fardos con los productos que habitualmente venden en este céntrico paseo barcelonés, desde camisetas del Barça a zapatillas, pasando por gafas de sol, relojes, calzoncillos y llaveros.
Los mercadillos rebeldes constituyen “una actividad delincuencial amparada en concentraciones no anunciadas”, según ha afirmado el director de los Mossos d’Esquadra, Albert Batllé, que ha advertido de que "la respuesta será el levantamiento de actas y la aplicación del régimen sancionador" contra los promotores de esta iniciativa.
Los comerciantes andan preocupados ante esta venta ilícita e ilegal que supone para ellos competencia desleal, y desde el PP de Barcelona denuncian que “Ada Colau ha debilitado a la Guardia Urbana, que es la que tiene que combatir a los manteros y la actividad ilegal que desarrollan en la ciudad, y ha fortalecido a los manteros”. “Tanto es así, que ahora dicen que no pueden trabajar, cuando tienen una actividad ilegal que hace la competencia desleal al comercio, que paga impuestos y crea trabajos”, remacha a este diario la ‘popular’ Ángeles Esteller. Además, explica que estos "antes salían corriendo cuando veían a la Guardia Urbana, pero que ahora “se quedan en su sitio y les tiran piedras y más de 30 guardias urbanos han resultado heridos”.
Además de en la Rambla se sitúan cerca del Paseo Colón, donde los comerciantes cuelgan pancartas con el 'stop de venta ilegal'
“Engañados y traicionados por Colau”
Los manteros vienen montándolo desde que el Consistorio presentó sus propuestas para el 'top manta', que no han satisfecho al colectivo. Se sienten “engañados” y “traicionados” por el gobierno municipal, por haberles hecho creer "que buscarían salidas sociales y laborales al conflicto".
El Ayuntamiento de Barcelona aseguró el pasado 9 de marzo que ayudaría a los manteros 'sin papeles' que residen en la ciudad a regularizar su situación en España a través de unos nuevos planes de formación y empleo de 12 meses, para que puedan cumplir el requisito de tener una oferta de trabajo y solicitar la residencia. También propuso aumentar la lucha contra la venta de productos falsificados por parte de los cuerpos policiales en el Puerto de Barcelona y en los almacenes del Área Metropolitana de Barcelona donde los manteros compran productos falsificados.
Por su parte, este grupo de vendedores, que integran el llamado ‘Sindicato Popular de Vendedores Ambulantes’, sostiene que el gobierno municipal les ha mentido sobre los planes ocupacionales. Denuncian que, hasta el momento, ningún inmigrante irregular dedicado a esta actividad ha recibido alguna oferta para participar en los citados planes de formación y empleo, e instalan el 'mercadillo rebelde' en La Rambla una vez por semana.
