Un tiroteo con un policía nacional herido causa conmoción en la ciudad
El Grupo de Localización de Fugitivos se desplazó desde Madrid para detener a un sospechoso pero éste escapó del vehículo policial
GONZALO AYUSO - SEGOVIA
En el lugar donde los sanitarios atendieron al policía herido podían contemplarse poco después los restos del material utilizado para la cura de urgencias. / Alberto Benavente
Un tiroteo en el centro de Segovia. Nadie daba crédito ayer cuando pasada la una de la tarde empezaba a circular la noticia por la ciudad. El suceso ocurrió en las inmediaciones de la Comisaría de Policía, entre la calle 3 de Abril y el solar de la zona trasera de la estación de autobuses. Un agente de la policía nacional resultó herido de gravedad en una pierna accidentalmente cuando perseguía a un detenido que se había zafado de la vigilancia policial al ser a la comisaría segoviana en un vehículo.
El suceso causó una gran conmoción en Segovia y se convirtió en motivo de las conversaciones mantenidas en la vía publica y en establecimientos comerciales y de hostelería, propagándose rápidamente versiones en ocasiones pintorescas.
La Subdelegación del Gobierno confirmaba a primera hora de la tarde que un agente del Grupo de Localización de Fugitivos del Cuerpo Nacional de Policía había resultado herido en una pierna como consecuencia de un disparo efectuado por él mismo, aunque su vida no corre peligro.
Este policía fue atendido en un primer momento por personal sanitario de emergencias en una de las aceras de la calle 3 de abril, que comunica la rotonda del Paseo Ezequiel González con el Hospital General y el cruce de las carreteras de Arévalo y N-110, frente al Hotel Corregidor. Posteriormente fue trasladado al Hospital General de Segovia.
El agente herido llegó ayer por la mañana desde Madrid, junto a otros compañeros del citado grupo, comparable a los Marshall de Estados Unidos, y perteneciente a la Brigada Central de Crimen Organizado. El operativo policial tenía como finalidad la detención de un ciudadano de nacionalidad búlgara localizado en Segovia y sobre el que pesaba una orden de detención internacional.
Pasado el mediodía, y después de detener a este sujeto, mientras era conducido en un coche policial a la comisaría se arrojó del vehículo y huyó a la carrera, dirigiéndose hacia la zona del velódromo por una cuesta con abundante maleza. Fue entonces cuando los policías del dispositivo iniciaron la persecución tras él y efectuaron algunos disparos intimidatorios, según informó la Subdelegación del Gobierno en Segovia.
Los agentes consiguieron detener al fugitivo —que llevaba documentación falsa— y fue confinado en el calabozo de la Comisaría Provincial del Cuerpo Nacional de Policía.
Un grupo de viajeros que se encontraba en ese momento en los andenes de la estación de autobuses, y fueron testigos de la persecución, afirmaron que pudieron oír al menos tres disparos y, aunque algunos añadieron después que todo indicaba que estaban dirigidos al aire, hubo quien se tiró al suelo como medida de precaución para evitar ser alcanzado por una bala perdida.
Otras fuentes policiales informaron de que al agente accidentado se le disparó el arma a la altura de la ingle, posiblemente cuando iba a proceder a guardarla o manipularla.
Los agentes del Grupo de Localización de Fugitivos de la Policía Nacional tienen como misión localizar y detener a los delincuentes —no terroristas— más peligrosos vinculados al crimen organizado o autores de delitos de especial gravedad. Desde su creación, en 2005, ha detenido a cientos de criminales reclamados, nacional o internacionalmente, por la justicia trabajando con otros cuerpos policiales de 62 países y mantienen constantes contactos con la Oficina Central de INTERPOL y EUROPOL.
“Esto no ocurre todos los días en Segovia”
David Bastián, que estaba trabajando en el Hotel Corregidor, pudo grabar en vídeo parte del suceso con su teléfono móvil.
David Bastián se encontraba trabajando en el Hotel Corregidor de Segovia cuando a pocos metros del establecimiento, frente a su entrada principal, escuchó los tiros que efectuaban agentes de Policía Nacional que perseguían a un fugitivo. “Hemos abierto la ventana y había muchos policías corriendo y han venido las ambulancias y era movimiento de gente por todos los lados”, explicaba este testigo poco después del suceso.
Bastián pudo ver también cómo se llevaban a un detenido, que al escuchar los disparos se tiró al suelo, según explicó. Al parecer se trata de un hombre calvo o con poco pelo y de mediana edad o incluso más joven, con las manos esposadas a la espalda.
También pudo grabar un vídeo con su teléfono móvil en el que puede observarse cómo es atendido un policía herido por personal sanitario, así como las ambulancias y otros vehículos policiales que se trasladaron hasta el lugar.
Consciente de que había estado en el momento justo cuando ocurría un suceso de alcance, este videoaficionado comentaba después “esto no ocurre todos los días en Segovia”.
Además de agentes del Grupo de Localización de Fugitivos desplazados desde Madrid, fueron numerosos los policías de la Comisaría Provincial que corrieron hasta el lugar al tener conocimiento de lo que sucedía, así como alguna dotación de la Policía Municipal. El dispositivo llamó la atención de muchos ciudadanos que se encontraban en las inmediaciones de la cercana estación de autobuses, aunque no fueron conscientes de la gravedad de lo ocurrido.
A medida que la noticia se propagaba por las redes sociales se sucedían los mensajes de ciudadanos alarmados pero también comentarios jocosos o irónicos como, por ejemplo, “la estación de autobuses se está volviendo un lugar tan inseguro como el Bronx o Nueva Segovia” o “tiroteo en Segovia: Un policía persigue a un búlgaro y se dispara él en la pierna”.