Será "llave", sin duda, pero gobernar como principal partido...como que no.
UPyD cierra su congreso con la ambición de gobernar “dentro de muy poco”
Rosa Díez avisa de que no aceptará el chantaje ni a España ni a su partido
Alardea de la votación contra el derecho a decidir que dividió a PSOE y PSC
Francesco Manetto Madrid 3 NOV 2013 - 12:37 CET1
Unión Progreso y Democracia (UPyD) ha clausurado hoy su segundo congreso con una hoja de ruta inequívoca: ser un “instrumento de gobierno”. Lo ha recalcado esta mañana Rosa Díez, reelegida ayer al frente de la formación con un respaldo del 93%. Dos días después de anunciar la ruptura del pacto de gobierno en Asturias, la líder del partido ha resumido: “Hemos hecho una tarea muy importante para preparar el partido para gobernar, para ser un instrumento de gobierno no dentro de mucho sino dentro de muy poco tiempo”. El objetivo de UPyD es, en efecto, condicionar al próximo Ejecutivo central y ampliar de manera significativa, según pronostican todas las encuestas, su presencia en las instituciones.
“Si el instrumento está bien organizado, el partido político, si los principios son útiles, estará garantizada la buena gestión”, ha razonado Díez en su discurso de proclamación. La portavoz de la formación ha hecho hincapié en su discurso de regeneración democrática apelando precisamente a esos principios: transparencia, tolerancia cero contra la corrupción, apertura a las bases, a la sociedad y a los simpatizantes, que podrán votar a los próximos candidatos, y rechazo al sistema bipartidista. “Nacimos para regenerar la democracia, y la regeneración de la democracia es devolverles los ciudadanos el control sobre las instituciones”, ha enfatizado.
“Hoy puedo decir con orgullo en nombre de todo el partido que somos lo que decimos y decimos lo que hacemos y que somos lo que hacemos”, ha proseguido. “No defraudamos la palabra dada, podemos equivocarnos, pero nunca traicionaremos el compromiso que para con los ciudadanos es el programa electoral. Y nunca traicionaremos ningún acuerdo”, ha agregado antes de advertir que no consentirá “chantajes” a España, en referencia al Gobierno de Artur Mas, ni a su formación, en alusión a la ruptura del acuerdo de legislatura en Asturias.
Su objetivo consiste en mostrarse un partido fiel a sus votantes y a sus compromisos. “No es una cuestión de orgullo interno, sino por algo todavía más importante, si nos faltan el respeto a nosotros nos faltan el respeto a la gente que nos ha votado”, ha manifestado. Díez también ha querido lanzar a sus simpatizantes el mensaje de que sí se pueden cambiar las cosas. Y lo ha hecho en referencia a Cataluña y a la votación del pasado martes en el Congreso de los Diputados que dividió a PSOE y PSC. Díez ha alardeado del resultado: “Este grupo de cinco diputados ha tomado de la solapa a los dos principales partidos y ha conseguido que 286 diputados digan que la unidad de la nación es indisoluble”.