LA LUCHA CONTRA LA AMENAZA TERRORISTA
El 'superfichero' que ultima Interior sobre viajeros sospechosos de yihadismo rastreará Twitter y otras redes sociales
El Ministerio licitó en febrero por 1,6 millones el desarrollo informático del registro que recogerá los datos de todos los pasajeros de líneas aéreas para poder detectar la llegada de terroristas y delincuentes peligrosos. Acaba de redactar el pliego que detalla qué capacidades tendrá.
Gran hermano contra la amenaza yihadista. El superfichero informático que ultima el Ministerio del Interior para recoger todos los datos de los viajeros de líneas aéreas con salida y llegada en nuestro país para detectar a tiempo la presencia entre ellos de terroristas y otros delincuentes tendrá capacidad para "captar información de redes sociales", como Twitter e Instagram, de buscadores como Google y Bing, e, incluso, de "fuentes multimedia de vídeo", como el célebre YouTube. Así aparece recogido en el pliego de prescripciones técnicas elaborado por el Gobierno al que ha tenido acceso Vozpópuli y en el que se concreta por primera vez la fecha límite para su puesta en marcha: el próximo 10 de diciembre. Este fichero, conocido formalmente con el nombre de Sistema de Registro de Nombres de Pasajeros o PNR (Passenger Name Record) por sus siglas en inglés, es una vieja aspiración de España y otros países europeos que tras los atentados de París se reactivó.
El sistema aún tardará meses en estar operativo. Interior ha puesto como fecha límite el próximo 10 de diciembre
De hecho, el pasado 3 de febrero, y sólo unas horas después de que Mariano Rajoy y Pedro Sánchez plasmaran su firma en el pacto de Estado contra el yihadismo, el Ministerio del Interior colgaba en la web de la Plataforma de Contratación el anuncio previo de licitación para su creación. El presupuesto previsto: 1.633.500 euros, IVA incluido. Ahora ha elaborado el pliego de condiciones a las que deberán ajustarse las empresas que aspiren a hacerse con el contrato. Una de ellas, que una vez que se falle el concurso antes del próximo 1 de agosto, tendrán sólo cuatro meses para tenerlo plenamente operativo. Ese plazo sólo se podrá alargar como máximo hasta el 10 de diciembre, añade dicho documento.
En la introducción del documento elaborado por Interior se destaca que, hasta ahora, “las medidas para la recogida y el intercambio de datos personales entre la Policía y otras autoridades” se limitaban a “las personas que ya se sospecha, es decir, las personas que son ‘conocidas’ por las autoridades policiales”. Esto es calificado de “útil”, pero también de insuficiente, por lo que apuesta abiertamente por un "uso más sistemático de información Passenger Name Record relativa a dichos pasajeros para hacer cumplir la ley" con el objetivo de conseguir "importantes mejoras operativas" en la "prevención, detección, investigación y persecución de delitos relacionados con el terrorismo y el crimen organizado". Para ello, el supefichero deberá ser capaz de recopilar, procesar y permitir el tratamiento análitico "de la información existente sobre los pasajeros que viajan desde o hacia nuestras fronteras apoyándose en los datos existentes en el PNR".
El equipaje, el asiento, la ruta...
El nuevo registro recogerá la "información no verificada proporcionada por los pasajeros y recogida por las aerolíneas" con cada reserva aérea, desde si ha sido hecha por Internet o a través de una agencia de viajes, hasta si ha sido pagada en efectivo o con una tarjeta de crédito. También incluirá el recorrido de los viajeros para detectar 'rutas' de las habitualmente seguidas por los terroristas o información sobre el equipaje y el número de asiento que ocupa. Todo ello se "cruzará" con los datos obrante en otras bases de datos, pero también con la que se pueda obtener "de fuentes abiertas, principalmente redes sociales". Es en este punto, el pliego elaborado por Interior hace menciona expresa a Twitter, Google Plus, Linkedln, Tumblr, Instagram y Flickr, así como los buscadores Google, Bing, Yahoo y Duck Duck Go. Además, habla de "fuentes multimedia" como YouTube, Vimeo y LiveLeak y de "foros, blogs y páginas genéricas".
Interior quiere que los datos extraídos de las redes sociales no sólo puedan ser utilizados para análisis, sino también para investigaciones concretas
Interior quiere que el sistema informático se capaz de "extraer" de los mismos la información "de la forma más estructurada posible" y hace referencia concreta a "metadatos de los contenidos mulotimedia o documentales, nicks/usuarios que realizan los post y comentarios". El pliego elaborado por el Gobierno incide en la necesidad de que el sistema debe "ser capaz de realizar búsquedas específicas de datos nuevos [en la redes sociales] ante eventos particulares, como eventos generados a partir de alertas generadas sobre viajeros, vuelos, lugares u otras entidades identificadas como de riesgo". Además, quiere que la información "relevante" que se obtenga de la mismas no sólo puedan ser utilizadas "en los procesos de análisis estadísticos" sino también "ser incorporados a casos de investigación específicos".
Una vieja aspiración
La idea de un superfichero de viajeros no es nueva y, de hecho, hay países como EEUU, Canadá y Australia que ya someten a un estricto control este tipo de información para evitar ataques yihadistas. En Europa también se planteó hace tiempo su creación, con España entre los países promotores. Fue en 2010, cuando varios estados de la UE propusieron a la Comisión Europea un proyecto de directiva conjunta para la puesta en marcha del PNR. El Consejo de Ministros de Justicia e Interior tardó dos años en llegar a un acuerdo general, pero en abril de 2012 ya puso sobre la mesa del Parlamento europeo un proyecto para que fuera aprobado por la cámara dado que era necesaria una codecisión de los Estados.
La UE tiró por tierra en 2013 la directiva que quiso poner entonces en marcha el PNR al considerar que vulneraba la protección de datos personales
Sin embargo, el registro se encontró en 2013 con el rechazo frontal de la Comisión de Libertades Civiles, Justicia y Asuntos de Interior (LIBE) que entendía que dicho registro de pasajeros vulneraba la directiva comunitaria sobre protección de datos personales de los ciudadanos. De nada sirvió una carta enviada por los ministros de Interior de España, Alemania, Francia, Reino Unido, Italia, Bélgica, Suecia, Polonia y los Países Bajos al presidente de dicho organismo. El proyecto pareció quedar empantanado en las instituciones europeas pese al intento de varios ministros, entre ellos el español Jorge Fernández Díaz, de reactivar su puesta en marcha en los últimos meses.
Sin embargo, los atentados de París del pasado mes de enero contra la sede de la revista satírica Charlie Hebdo y una tienda de comida 'kosher' parecen haber desbloqueado la iniciativa. La decisión de Interior de convocar, primero, el concurso para adjudicar el contrato para su instauración en España por 1,6 millones de euros y, ahora, el pliego de prescripciones técnicas son los primeros pasos de un proceso que debe estar terminado antes del 10 de diciembre. Fuentes de la lucha antiterrorista aplauden la medida y consideran el PNR "una pieza clave" para detectar el retorno a los países europeos de los varios miles de sus ciudadanos que en los últimos años se han desplazado a Siria e Irak a combatir en las filas del autodenominado Estado Islámico.