Unas horas antes de que un artefacto explosionara en el puente que separa el término municipal de Benalmádena y Torremolinos, y sólo a cuatro kilómetros de allí, un chatarrero encontraba una mochila, una bolsa y una ri?onera. Estaban entre las basuras arrojadas a una antigua cantera convertida ahora en escombrera, en las inmediaciones de las obras de la carretera de circunvalación y de la autovía que une Málaga con Algeciras.
En su interior había una pistola Smith & Wensson, procedente de la partida de 350 armas robadas en Vauvert (Francia) e idéntica a la encontrada en poder del 'liberado' del 'comando Vizcaya' Arkaitz Goikoetxea. Además, se encontraron dos cargadores de 9 milímetros parabellum, un temporizador, un reloj detonador, tarteras de plástico, dos pilas de petaca, un carné militar listo para ser falsificado y un papel con breves instrucciones en euskera para la manipulación de explosivos. El chatarrero llevó las armas y los cargadores a la Policía Municipal, quien dio aviso a las fuerzas de seguridad.
Ahora, los servicios de Información de la Policía Nacional trabajan sobre dos hipótesis, y la que gana peso conforme pasan las horas es que los terroristas se deshicieron apresuradamente de los efectos que pudieran relacionarles con ETA tras abandonar la bomba que explosionó, a las 00.35 horas de ayer, ya temporizada. La otra hipótesis, menos probable, es que las armas y el material para fabricar explosivos fuera parte de una entrega al comando que cometió el atentado en Torremolinos.
Los mandos terroristas temen una ofensiva en los próximos días, y no descartan que el 'talde' de Torremolinos haya dejado temporizados otros artefactos antes de abandonar el material sobrante en la escombrera.
Temor
Los responsables de Información recuerdan que nunca un comando viaja en campa?a de verano al Mediterráneo para colocar un único artefacto, aunque también apuntan la posibilidad de que el grupo, tras conocer la reciente desarticulación del comando Vizcaya y destaparse sus planes de atentar en Andalucía haya temido por su seguridad y haya desistido tras un ataque de poca monta.
Cabe recordar que, coincidiendo con la operación en la que se desarticuló el comando Vizcaya fue detenida en Fuengirola la presunta etarra Libe Aguirre Mazaga, que estaba veraneando en la localidad. No obstante, ayer el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, indicó que no hay indicios de que la banda terrorista tenga una infraestructura en Andalucía.
Interior, que el pasado 24 de junio movilizó a 6.000 agentes para patrullar las zonas turísticas, ha dado órdenes en las últimas horas de reforzar los efectivos en la Costa del Sol y en otros puntos de Andalucía.
La deflagración de la bomba, compuesta por menos de un kilo de explosivos, a 300 metros del hotel Sol Alhoa Puerto, se produjo cuando los efectivos de seguridad inspeccionaban el vertedero en el que había aparecido el material de ETA. El estallido sólo provocó un cráter de un metro de diámetro y apenas 40 centímetros de profundidad. El estruendo se oyó en toda La Carihuela y una gran humareda llenó el lugar. Un turista que se encontraba en las inmediaciones tuvo que ser atendido debido al aturdimiento y se vivieron escenas de nerviosismo entre los clientes del hotel.
El artefacto estalló sin que mediara la habitual llamada de aviso de los terroristas durante la campa?a de verano, aunque desde un principio los servicios de Información de la Policía atribuyeron el atentado a ETA, un hecho que fue confirmado posteriormente por el ministro del Interior.
El atentado de Torremolinos se produce sólo dos días después de conocerse que el desarticulado 'complejo Vizcaya' tenía intención de llevar a cabo una campa?a de atentados en Andalucía. El jefe del comando, Arkaitz Goikoetxea y el 'liberado' Asier Borrero (todavía huido) tenían una cita de seguridad el próximo 15 de agosto en Granada con un terrorista desconocido, a fin de comenzar una oleada de ataques contra centros comerciales y hoteles. Las fuerzas de seguridad todavía ignoran si Goikoetxea y Borrero iban a tener algún contacto con los terroristas que han atentado en Torremolinos.
Reaparición
La reaparición de ETA en la Costa del Sol se produce cuatro a?os después de su última acción en la provincia, cuando a principios de diciembre de 2004 hizo explosionar una mochila con 300 gramos de amonal en el Paseo del Parque, La peque?a deflagración no ocasionó da?os personales, ya que la zona fue desalojada por la policía minutos antes.
El 21 y el 22 de junio de 2002, la banda terrorista perpetró una serie de atentados contra intereses turísticos, con coches bomba en Fuengirola, Mijas y Marbella. Un a?o antes (julio de 2001) había protagonizado un atentado frustrado con coche-bomba en el Aeropuerto de Málaga. Los artificieros desactivaron entonces un vehículo cargado con más de 50 kilos de explosivos.
