Sindicato Unificado de Policía
Negociación con los terroristas en el horizonte
El diario EL MUNDO publica hoy la noticia del acercamiento de algunos dirigentes históricos de
ETA a cárceles próximas al País Vasco. Se dice que el Ministerio del Interior pretende dividir a los
presos de ETA y que ha sido informado el responsable en esta materia del PP, Federico Trillo.
El discurso oficial, el cínico, dirigido a los ciudadanos por el Gobierno y el Partido Popular es que
no habrá más negociación con ETA y que bastará la eficacia policial para reducirla a un grupo
terrorista como el GRAPO (Secretario de Estado de Seguridad). Pero ese discurso no es coherente
con la noticia de hoy, porque si sólo se va a combatir a ETA policialmente ?qué importancia tienen
los presos?
Los presos son importantes sólo si se trata de debilitar al sector más partidario de mantenerse en
la práctica terrorista, y si se trata de debilitarlos por medios distintos a la acción policial es
simplemente porque hay una nueva negociación en el horizonte.
Ya ha tenido ETA tres ocasiones de negociar su rendición. En 1988, en 1999 y en 2006. Antes de
cada uno de estos procesos ha intentado ?poner muertos sobre la mesa? como demostración de
fuerza, y una vez que no ha conseguido su objetivo, que es la independencia del País Vasco, más
muertos, como castigo al Gobierno y para conseguir un nuevo proceso de negociación. El hecho de
que cada uno de los procesos de negociación haya sido con un presidente distinto para impedir
aprender de los errores cometidos. Si los miembros de ETA y su entorno, en este momento crítico
para ellos, generan otra vez esperanzas de un proceso de diálogo y se les permite reorganizarse,
todas las detenciones practicadas y las muertes sufridas, otra vez, no habrán servido para nada.
Por ello manifestamos nuestra rotunda oposición a que se cometan más errores en la lucha contra
el terrorismo, a que sean ellos, los terroristas, quienes tengan las llaves de las cárceles
(Barrionuevo, ex ministro de Interior), que es lo que pasa si cada vez que quieren y están
debilitados el Gobierno les acepta en una mesa de diálogo. Mientras sea así seguirán
incorporándose terroristas a ETA con la esperanza de que cuando ellos decidan dejar de matar
negociarán al menos la salida de la cárcel de sus miembros.
Porque ningún Gobierno ni partido de la oposición (ni siquiera el PP de la anterior legislatura, que
denunciaba el proceso de negociación a?adiendo siempre la palabra ?política? se?alando que eran
esas cuestiones las que no podían negociarse) se opone a negociar ?paz por presos?. Paz por
presos es un desprecio a los casi mil muertos, un insulto a sus familias y un incumplimiento de
todo lo que dicen los responsables políticos del Gobierno y de la oposición, empe?ados en abrir
cada día una brecha mayor con los ciudadanos precisamente porque nunca hacen lo que dicen ni
dicen lo que hacen. Si hay proceso de paz por presos se habrá cometido la mayor injusticia de la
democracia espa?ola, y las víctimas de Hipercord, las ni?as de Zaragoza, los más de cuatrocientos
miembros de la Policía y la Guardia Civil asesinados verán manchada su memoria.
Madrid, 10 de diciembre de 2008.
COMISIÓN EJECUTIVA NACIONAL