Sistema Gretel
Protección más rápida y discreta de las víctimas de la violencia de género
Blom lanza, junto a Orange, un sistema que manda un sms y mail a los policías
Envía su posición y foto, y emite alertas si ella sale de un perímetro
A. Calvo | Valladolid
Actualizado lunes 27/09/2010
La víctima pulsa un botón en su teléfono móvil e "inmediatamente", sin intermediarios (112, el centro de control de la Policía...) los agentes de la Policía o la Guardia Civil de la zona reciben un mail, un sms y otro mensaje de seguridad en su BlackBerry.
Al abrirlo ven la fotografía de la persona que requiere su ayuda para identificarla cuando acudan en su auxilio, su nombre y posición exacta, que se actualiza cada minuto por si se mueve del lugar inicial.
La empresa con sede en Valladolid Blom, en colaboración con Orange, ha diseñado un sistema para reaccionar con mayor "rapidez, eficacia y discreción" ante el aviso de una víctima de violencia de género. Ya se ha puesto en marcha en Torrejón de Ardoz y Alcorcón.
Utilizan un móvil común, una BlackBerry, para no estigmatizar a la víctima de violencia"Acorta mucho el tiempo de respuesta desde que se activa el botón de pánico". Este es el principal beneficio de este nuevo sistema, denominado Gretel, que, además de reducir el tiempo de actuación enviando la información gráfica y escrita de la mujer en paralelo a los agentes y al centro de la Policía o al 112, busca también que la víctima "no esté estigmatizada llevando un aparato raro, que llame la atención".
Por ello, Blom, tras probar varios terminales móviles, se decantó por una BlackBerry con GPS incluido, "que muchas personas llevan y pasa desapercibida", y transformó el uso de la tecla lateral, utilizada convencionalmente para la activación de voz, en un botón para estas emergencias que la víctima debe pulsar tres veces. Así evita falsas alarmas y que se dispare al llevarlo, por ejemplo, en el bolso.
Este dispositivo móvil soluciona, además, un problema asociado con la conexión GPS: el elevado consumo de batería. "Los otros se apagaban enseguida, éste tiene bastante autonomía", apunta Ignacio Albisu, director de producto de Blom. Además de la ficha personal de la víctima, el agente y el centro de control de la Policía pueden consultar la posición de la mujer "incluso en lugares sin cobertura habitual" en un mapa que aparece en la pantalla de su BlackBerry, que para poder visualizar con rapidez este tipo de aplicaciones debe ser 3G, modelo 9700.
Las imágenes también se ven en el ordenador y ofrecen mucha precisión. Son tomadas en tres dimensiones y perspectiva y pueden consultarse con un zoom a nivel callejero. Todo ello "ayuda a identificar mejor dónde se encuentra la víctima".
En interiores se emplea la tecnología GSM "que aunque es menos precisa llega donde la GPS no", apunta.
Para estacionamientos sin dirección postal, "como descampados, pinares o zonas no urbanizadas", la localización se efectúa gracias al envío actualizado cada minuto de la latitud y la longitud. "Damos las coordenadas geográficas para agilizar la llegada", indica Albisu.
Por otro lado, el funcionamiento del dispositivo incluye la activación de varias alertas que recibiría el centro de control de la Policía para mayor seguridad de las mujeres maltratadas.
En cada caso se pueden configurar parámetros de alertas propias para cada víctima, "según sus rutinas, necesidades y agenda".
Éstas son de varios tipos. Una de ellas, denominada "fuera de zona", se activa si la víctima de violencia de género sale de un perímetro marcado previamente por ella misma: "Si sale de la ciudad, sin que esté previsto, el móvil informa a la Policía, pero también si sale de un perímetro menor que se haya configurado".
Este sistema no tiene límite de alcance, tiene "cobertura en todo el mundo; la Policía sabe que se va y si se diera una emergencia fuera puede comunicarlo a otro municipio. También se enteraría si pasa en cualquier sitio".
Otra alerta, "no ha llegado a zona", avisa si ante una cita prevista ("juzgado, hospital, recogida de los niños del colegio...") la persona no aparece. Puede configurar detalles tan precisos como si los lunes y los jueves a una hora concreta tiene una actividad y otros días a otras horas otra. "La unidad que coordine esto en la Policía podría llamar a la mujer, preguntarle qué pasa y prestar especial atención a su caso".
También alerta a la Policía si el usuario tiene batería baja para o bien avisarle o saber que si se apaga y deja de recibir su posición es por esa causa. Para optimizar el consumo de batería, la usuaria puede modificar la frecuencia de envío de posiciones (por defecto 60 segundos) y de la captura de posición (cada 5 segundos).
Para que la rutina de quien ha padecido malos tratos no se altere demasiado por llevar este dispositivo que pretende protegerla de su agresor, incluye la opción ocultar en segundo plano la aplicación para utilizar la BlackBerry de forma habitual y también poder cerrarla introduciendo una contraseña y usar el móvil sin estar localizable.
El proyecto se presentó el pasado mes de junio cuando los ayuntamientos de Torrejón de Ardoz, primero, y de Alcorcón, después, lo adquirieron. Por el momento, quince mujeres de cada una de las dos localidades ya lo utilizan y Blom confía en extender su implantación a muchos otros, sobre todo de la Comunidad de Madrid, por la cercanía de las dos primeras experiencias. "El sistema es tan modular y accesible que puede implantarlo desde el Ayuntamiento más pequeño hasta la cuidad más grande", indica Jan Skybak, director de Blom España.
Albisu añade: "Desde uno que pida tres aplicaciones hasta una gran ciudad" y explica que esto se logra porque "no requiere ningún tipo de desarrollo de una tecnología, ni una instalación compleja, pueden comprar dos móviles y activar la aplicación, contratar con Orange y ya está".
El precio actual lo marca esta operadora de telefonía móvil. "Cuesta 60 euros al mes por cada terminal incluyendo tarifa plana de voz", aclara el director de producto de la empresa con sede en Valladolid. "Hemos tratado de ser baratos y sencillos para que su aplicación sea real", señala.
Con este método de protección, Blom y Orange pretenden ayudar a la Policía en su gestión de este tipo de conflictos y complementar las medidas al respecto puestas en marcha por el Gobierno que «para dar a una mujer un sistema de aviso pide muchos requisitos y no todas las víctimas los cumplen, como el tener una orden de protección».
Los sistemas de este tipo lanzados por el Ejecutivo son, en opinión de la compañía, "escasos, no hay para todas las que lo necesitan".
Este proyecto surgió cuando, al detectar la "falta de un producto tan avanzado", Orange solicitó a Blom Sistemas Geoespaciales que adaptara sus servicios de localización a las demandas de la lucha contra la violencia de género. "Buscamos difundir nuestros servicios de localización y ayudar a cuantas más personas mejor. Además, queremos ser el producto en protección personal", defiende Ignacio Albisu.
La empresa, que ve en la innovación "la clave del éxito", cuenta con centros de desarrollo en Valladolid y en Madrid y, pese a que Blom tiene presencia en doce países, el servicio de localización ha sido desarrollado íntegramente por su equipo en España.
"Nos gustaría contribuir a reducir los riesgos de las víctimas de violencia de género y por tanto a hacer que su vida sea un poco más feliz", afirma Jan Skybak.