El Puerto
Denuncian por abuso de autoridad y detención ilegal a dos policías locales
Un matrimonio fue obligado a trasladarse a Jefatura para pasar la prueba de alcoholemia y multado sin haber conducido
C.Benjumeda / El Puerto | Actualizado 04.02.2012 - 01:00
Dos policías locales de El Puerto han sido denunciados por abuso de autoridad y detención ilegal. La denuncia fue cursada el domingo 29, por el matrimonio de Sevilla G.L. y José María G.L.C., de 54 y 56 años de edad, en base a unos hechos ocurridos el sábado, día 28. Hacia las diez de la noche, el matrimonio salía en compañía de otras tres parejas de cenar en el restaurante 'El Pescaito', en la calle Villa de Rota, cuando observaron a un agente de la Policía Local anotando las matrículas de sus vehículos. Uno de los coches, marca Mercedes, fue sancionado por encontrarse en un aparcamiento personalizado para minusválido, encontrándose el automóvil propiedad de los denunciantes detrás de este, aunque fuera del aparcamiento. Entonces, según el matrimonio, uno de los agentes pidió a la mujer la documentación del coche y al entrar en el vehículo le indicó que diera marcha atrás un par de metros, lo que hizo la conductora, que cuando fue a darle los papeles bajó por error la ventanilla trasera. En ese momento, el funcionario indicó a la mujer "creemos que usted no está en condiciones de conducir y vamos a realizarle la prueba del alcoholemia", lo que hicieron los agentes 'in situ', dando resultado positivo. Los agentes se dirigieron entonces a su marido, José María G.L.C. a quien hicieron igualmente la prueba, en la que también dio positivo. Una vez terminada esta, el marido quiso entregar la boquilla del medidor a los agentes, a lo que ellos respondieron "eso es suyo", replicando el afectado "qué hago ¿lo tiro?", momento en que uno de los agentes con mirada desafiante y en tono amenazante le respondió: " Ni se le ocurra", por lo que se lo guardó en el bolsillo. Entonces los policías les indicaron que la grúa iba a retirar el vehículo, replicando el matrimonio que ellos no tenían pensado coger el coche, que lo iban a dejar allí y se irían con uno de los matrimonios que los acompañaban.
Ante esto, los policías les respondieron alzando la voz, con tono violento y amenazante que les acompañaran a Jefatura, "o vienen de forma voluntaria o la engrilletamos". Según José María G.L.C. ante las "amenazas" entraron en el vehículo policial en contra de su voluntad, siendo conducidos a la Jefatura. Allí los tuvieron un tiempo retenidos, al cabo del cual, los dejaron marchar, entregándoles dos sanciones, una por estacionar el vehículo en zona para minusválido y otra por conducir sobrepasando la tasa de alcohol permitida, teniendo que recoger al día siguiente el coche retirado por la grúa.