Rosa Díez, o cómo pasar en ?democracia?, de la izquierda a la extrema derecha
Rosa Díez es una demostración ideal de lo fácil que resulta transitar en ?democracia?, desde la ?izquierda? a la extrema derecha
J.M. Álvarez | Para Kaos en la Red
KAOSENLARED.NET -- Rosa Díez, o cómo pasar en ?democracia?, de la izquierda a la extrema derecha
Después de que el régimen diera marcha atrás en la ilegalización de Iniciativa Internacionalista-Solidaridad con los Pueblos (II-SP), Rosa Díez, líder del partido Unión Progreso y Democracia (UPyD), declaró a la cadena de emisoras de radio de los curas (COPE), que II-SP es ETA, o lo que es lo mismo: Rosa contra todos, como el famoso grito de ??A mí, Sabino que los arrollo!?
Si hacemos un peque?o recorrido por la trayectoria política más reciente de do?a Rosa, nos encontramos con su sorprendente afirmación (utilizando el nomenclátor al uso en las democracias de los millonarios), de que su partido no es de izquierdas ni de derechas, y que el centro ?no es nada?, con lo cual ni ella misma sabe dónde se encuentra; luego, para salir de ese lío, asegura que UPyD es ?transversal? (debe ser un nuevo término político-borreguero)
La Díez, se declara no nacionalista, pero lleva por bandera la exaltación del nacionalismo franquista, clamando que sólo apoya a quienes defienden la sagrada unidad de la Espa?a Carpetovetónica. Quizás por eso, coquetea con Unificación Comunista de Espa?a (una especie de secta que dios sabrá quién anda detrás), recibe elogios de grupos nazis, como el que encabeza Ynestrillas, e incluso Falange Espa?ola le ofreció ir en sus listas electorales.
Ahora esta se?ora, que se pasa el santo día alabando la Constitución impuesta por el neofranquismo, se molesta porque, precisamente, el Tribunal de su Constitución, rechazó (por ahora) la ilegalización de II-SP. Curioso: cuando unos jueces determinaron que esa organización pertenecía al entorno de ETA, entonces sí estaban acertados, pero cuando otros dejan en ridículo a los primeros, resulta que están equivocados. Rosa Díez es una demostración ideal de lo sumamente fácil que es derivar en ?democracia?, desde la ?izquierda? a la extrema derecha más reaccionaria, pues ambas fueron paridas por la Reforma Política de 1977.