Enero de 1976
En enero las luchas saltan a empresas en las que la paralización del trabajo tiene mucha más repercusión, primero en el conjunto de la ciudad, como es el caso del transporte, y después también salta a empresas que por su carácter aún más amplio, estatal, como Renfe o Telefónica, van ensanchando de forma natural el escenario de la movilización contra el régimen.
El Metro fue a la huelga los días 6, 7. 8 y 9 de enero. Como una prueba de las dificultades que los trabajadores tenían que superar para poder reivindicar sus derechos, a partir del tercer día de huelga se militariza a los empleados de la empresa. Es decir, se les somete a disciplina militar, bajo mando militar y aplicándoles el Código de Justicia Militar tipificando las conductas laborales como delitos militares.
La huelga acaba con un acuerdo verbal de negociar sin despedidos. Fue un éxito que no hubiese despidos pero la negociación se sustituyó por un laudo de obligado cumplimiento dictado por el Ministerio de Trabajo que daba la razón totalmente a la empresa.
La Telefónica protagoniza fuertes movilizaciones del 12 al 16 de enero que no sólo se extienden por todos los centros de trabajo de Madrid sino al resto del Estado, convirtiéndose en una huelga estatal. Se consigue romper la congelación salarial.
El 8 y 9 de enero salen a la huelga 20.000 trabajadores del sector de la Construcción. El día 12 ya eran 80.000 y 90.000 el día siguiente. Hasta el día 18 la huelga sigue extendiéndose no sólo por todo Madrid, sino a Guadalajara y a otras provincias en su lucha contra la congelación salarial. La patronal se vio obligada a aceptar el aumento reivindicado de 17.500 pesetas, es decir, un 40% de subida. Se pulverizó el decreto de congelación. Aún les quedó fuerzas a los trabajadores de la Construcción para volver a la carga con una nueva huelga general de tres días en febrero, los días 11, 12 y 13, reivindicando la aprobación del Convenio Provincial de la Construcción, la readmisión de los últimos despedidos y el problema de los parados.
En Getafe, la huelga en las empresas más importantes dura ya más de un mes. El día 7 de enero son detenidos los principales dirigentes obreros de las empresas del metal. Como respuesta la huelga se hace totalmente general.
El día 13 se suma Correos, siendo fulminántemente militarizados. Se van incorporándo a las luchas sectores de la Administración pública, los servicios de limpieza del Ayuntamiento, e incluso policía municipal y empleados de los juzgados protagonizan concentraciones.
La huelga se extiende a toda la periferia obrera de Madrid; Alcalá, Torrejón, Alcobendas-San Sebastián de los Reyes, San Fernando-Coslada,...
?En la semana del 11 al 18, en Madrid, la huelga fue seguida por trabajadores de todos los sectores de la producción, de los servicios, de los transportes, de la Administración pública, del peque?o y mediano comercio, por ciertos supermercados; durante esa semana se produjeron más concentraciones y manifestaciones que en los cuarenta a?os anteriores; en concreto, el día 14 de enero ?según escribe un destacado dirigente de las huelgas del Metal, Adolfo Pi?edo? se celebraron en Madrid no menos de quince asambleas distintas, en algunas de las cuales, a?adimos nosotros, participaban, como en el caso de Chrysler, 11.000 trabajadores. El grado de politización, de toma de conciencia de amplísimas capas sociales madrile?as, en especial de la clase obrera, de centenares y miles de técnicos y empleados, alcanzado en el curso de esa semana, seguro que es una garantía para una ampliación de la lucha por la democracia? (Ibídem).
Los días 12, 13 y 14 comienzan los paros en la Renfe. El 15, 16 y 17 se extiende la huelga por todos los centros de Madrid, Valladolid, León... El día 18 el gobierno decide militarizar a los 72.000 trabajadores de los ferrocarriles uniéndose a los 50.000 ya militarizados de Correos.
Así mismo acaban sumándose a la lucha los sectores de Sanidad y Ense?anza.
El día 14 de enero llegaron a coincidir en huelga 350.000 trabajadores. En total en las luchas de enero participaron más de 400.000 trabajadores, rebasando con creces la cota alcanzada en las luchas del 4 de junio y de diciembre.
El movimiento cortó su ascenso al aceptar los dirigentes de la Comisión Negociadora la estrategia del Gobierno; negociar rama por rama y por los cauces oficiales.
Como conclusión de los autores del libro Madrid en huelga; ?la huelga de Madrid es la primera gran movilización por la que los trabajadores no han tenido que pagar un elevado tributo?. Han conseguido algunas conquistas en determinados sectores, como es la ruptura de la congelación salarial. Y, sobre todo, ?se ha consolidado un sector muy amplio de los trabajadores de una elevada conciencia política, organizativa y de protagonismo?, que se ha reflejado en ?la multiplicación de la militancia política?.
1976 es un a?o de luchas permanentes y por todo el Estado.
En febrero la huelga general de la Construcción en Madrid.
En marzo la lucha de Vitoria que provoca luchas de solidaridad en el País Vasco y en el resto del Estado.
En mayo se producen los acontecimientos de Montejurra (Navarra) donde con el consentimiento de la policía se concentran pistoleros fascistas de las tramas negras internacionales frente a los carlistas y llevan a cabo dos asesinatos.
El 1 de julio es destituido el presidente del Gobierno, Arias Navarro, y siete días después el Rey nombra a Adolfo Suárez. Este es el momento en el que la clase dominante comprende que no puede seguir con los viejos métodos. Hay un cambio de estrategia. Suárez comienza inmediatamente las conversaciones secretas con personalidades de la oposición, incluidos Felipe González y, a través de intermediarios, con Carrillo.
El problema era que ni los fusilamientos, ni la represión más feroz, como fue el caso de marzo del 76 en Vitoria o la masacre de cinco trabajadores y jóvenes en la semana por la Amnistía en Euskadi en mayo del 77 en vísperas de las primeras elecciones, ni matanzas como las de Atocha, consiguen frenar el movimiento. Por el contrario sigue extendiéndose y radicalizándose. Mientras en 1975 se habían perdido 10,35 millones de jornadas de trabajo por huelgas en 1976 la cifra se multiplica por 10; se pierden 110 millones de jornadas (Fina y Hawkesworth, 1984). Para hacernos una idea de la importancia de estas cifras podemos compararlas con una fecha más reciente. Por ejemplo en 1988, contando las jornadas perdidas por la huelga general del 14 D, se pierden 11,6 millones de jornadas por las huelgas de los trabajadores. La reacción de la clase trabajadora ante los métodos represivos del Gobierno Arias estaba poniendo en peligro no sólo la supervivencia del Gobierno, sino la de la Monarquía, la del régimen e incluso la del propio sistema capitalista.
La represión no sólo no para la lucha sino que la azuza. Desde septiembre de 1975 hasta las elecciones de junio del 77, en 20 meses, mueren asesinados por las fuerzas del ?orden? o a manos de los guerrilleros de extrema derecha 39 personas.
El 10 de septiembre Suárez anuncia su proyecto de Reforma Política que es inicialmente denunciado por el PCE como ?un fraude antidemocrático?.
El 12 de noviembre la Coordinadora de Organizaciones Sindicales (COS), integrada por UGT, CCOO y USO, convoca una huelga general que, a pesar de su escasa preparación, es secundada por 2,5 millones de trabajadores de todo el Estado. Esta convocatoria de huelga general se da en un ambiente de conflictos generalizados y con muchas huelgas muy duras. Son meses de luchas por todas partes.
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Como ves larras, en 1976 PMM participó en la huelga que se hizo, la consecuencia de esa huelga fue la militarización, quizás en el foro haya alguno de los compa?eros que participó en ella, pero seguro que hay muchos que se lo han oído contar a los más veteranos, como las unidades fueron "tomadas" por los militares, como les pusieron la "galleta" de militarizados y como les leían en voz alta las leyes penales militares . . . para que supieran que practicamente todo estaba penado, bajo la jurisdicción militar de la época, con la pena de muerte . . . ahora estamos en 2009 . . . la pregunta que me surge es . . . estará legitimada una huelga de los miembros de las FFyCCSE, que está prohibida por una LO, en este momento historico actual? ? ? . . . se puede comparar 1976 y su huelga con el 2009 y su crisis? ? ? . . . no estaréis siendo manipulados los funcionarios que de buena fe apoyáis vuestras reivindicaciones económicas y detrás de esta movimiento no habrá otros intereses políticos más profundos y de mayor calado que intentar poner a la sociedad espa?olas en los a?os 70 de nuevo? ? ? . . . yo no veo claro que, en este momento, con la crisis económica actual, con los cambios políticos que se han realizado, haya una huelga de esta naturaleza sin que detrás de ella haya otros movimientos distintos a la mera reivindicación económica, lo siento larras, no dudo de vuestra buena fe, pero no me lo creo, si algo caracteriza a las reivindicaciones sindicales es el sentido de oportunidad para realizarlas . . . y la vuestra, en un momento donde hay casi tres millones de parados, esa oportunidad no existe, por lo tanto . . . no será que hay otro trasfondo detrás de esa reivindicación ? ? ?